(34) Mi cabeza es un lío.

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Mi cabeza es un lío,

mi vida, un desastre

¿Cómo lo voy a arreglar?

Me siento tan mal, que al escribir esto lágrimas pican mis ojos, mi pecho duele, mi alma sufre, necesito ferozmente estar bien, pero solo consigo caer.

Caer. Caer. Caer.

En lo más profundo de un mundo gris, sin sentido, sin ganas de nada, todo se fue, mis ganas de existir, ¿dónde están? ¿Si las ven me hacen el favor de decir que regresen? Las necesito para seguir viviendo, o caeré en el mar de las ideas sobre mi muerte.

No sé de donde salen estás intensas ganas de desaparecer, de quedarme dormida para siempre, que mi cuerpo deje de cumplir funciones biológicas y mi mente se calle, no sé de donde sale la ferviente necesidad de darle fin a mi vida, pero ahí están, no se van, no lo hacen por más que razone, porque estoy consciente que "desear morir", es estúpido cuando tu vida es común, cuando no te falta nada económicamente, cuando tu salud física está bien mientras que otras personas sufren del mil maneras crueles e injustas.

Y ahí es donde me pregunto, ¿Por qué las personas que merecen vivir, mueren, y las hijas de putas que deberían estar enterrados a miles de kilómetros de profundidad andan gozando por ahí?

Yo no soy una hija de puta que merece la pena de muerte por algún crimen imperdonable, no, pero soy alguien vacía, alguien destrozada por dentro, que se siente perdida, que se siente jodida y sin solución, que es débil como una flor en un campo de venenos, tales venenos que me contaminan, dominan y consumen al completo produciendo un daño irreparable en mi interior, pero sin saber por qué cojones sigue respirando, sigue aguantando tanta mierda que la vida le lanza como piedras mortales al alma, marchita, gris, sin un sentido, sin una sonrisa verdadera, sin nada ni nadie que la proteja, o consuela, que la entienda y la abrace, no hay nada.

Solo oscuridad y un nudo en la garganta que duele como mil demonios metiéndose en mi interior, van devorando cada parte feliz en mí, me dejaron vacía, me dejaron desecha.  

Sueños PerdidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora