Vinculo- Parte 1

366 56 40
                                    

La mente del moreno había quedado en blanco de la nada, sabía que tenía que seguir aparentando pero su instinto había sido mayor, era eso o algo que había disparado esa reacción.



Su cuerpo entero gritaba por comer la carne del humano que tenía delante, sus pupilas se dilataban mientras juraba poder escuchar la sangre del contrario recorrer sus venas. Necesitaba aquel liquido en su boca, ahora solo degustaba el sabor metálico de su propia sangre,fría y sin mucho sabor a su parecer.



Comenzó a caminar hacía el menor con claras intenciones de hacer el mayor daño posible, el pelirrojo se puso en guardia a la espera de cualquier movimiento del contrario.



Law dio un paso hacia adelante y recibió otro puñetazo en su mejilla que le hizo girar un poco el rostro, gruñó antes de sentir un golpeen sus piernas haciéndole caer, si bien ya podía caminar no podría sostenerse ante una patada en sus piernas.



Kid aprovechó el haber tirado a su atacante, lo tomó de uno de sus brazos para girarle con fuerza dejándolo así boca abajo, se sentó en la espalda baja del moreno y dobló el brazo del mayor hacia atrás buscando someterle en aquella posición.





-Calmate de una vez- decía mientras apretaba con más fuerza el brazo que sostenía, teniendo cuidado de no romperlo o hacerle demasiado daño, pero el mayor no hacía las cosas fáciles, se removía con fuerza buscando tirar al pelirrojo de su espalda.



El dolor en su brazo le era indiferente, solamente quería poder comer aquella presa que tenía tan cerca pero que se resistía tanto a morir, apoyó su mano en el suelo haciendo otro intento por levantarse pero el peso extra sobre su cuerpo no se lo permitía, sintió otro tirón en su brazo antes de que algo se enredara en su muñeca.



Apenas y había podido alcanzar la camisa que le había prestado al moreno pero que ahora no traía desde el incidente de la laguna, con la manga de la prenda ató la mano que sostenía antes de tomar la otra con fuerza, si no fuera porque Kid había pasado la mitad de su vida en el mar y la otra ayudando a su abuelo a pescar, seguramente no podría contra la fuerza del moreno, cuando logró atar ambas manos se puso de pie para alejarse un poco del mayor, seguía sin entender lo que estaba pasando, salió a prisa de la cueva para ir a su bote, tomó algunas cuerdas y regresó para atar mejor al otro.

Sabía que la tela no podría retenerlo por mucho tiempo, ató sus pies también para evitar que se moviera.





-No entiendo que te sucede pero no dejaré que me muerdas de nuevo- dijo algo molesto mientras rasgaba la camisa con la que había atado al moreno antes de usar las cuerdas, trenzó las tiras de tela antes de hacer que Law las mordiera, de esa manera pudo amordazarle, con eso ya tenía seguro que no sería atacado de nuevo.





Se alejó de nuevo para buscar en su libro los efectos secundarios de la planta espanta diablos, pasaba de largo las advertencias de molestias gastrointestinales, sequedad en la boca y demás, eso no podría provocar que el moreno entrara en un estado tan "salvaje",suspiró un poco resignado antes de leer el final de las advertencias; no administrarse en personas con antecedentes psicóticos, puede desencadenar un episodio. No se podía leer más debido a una mancha en la hoja pero sabiendo que comenzaba la advertencia con "antecedentes psicóticos" podía darse una idea.





"Era eso entonces lo que había provocado que Law enloqueciera y me atacara" pensó sintiéndose un poco aliviado, odiaba admitirlo pero cada vez era mayor su aparente paranoia con las sirenas, ya casi lo había ahogado, "¿Que más tenía que hacer para quedar satisfecho?" se cuestionaba mientras acariciaba su nuca buscando relajarse un poco, de cualquier manera solo debía ser paciente para que los efectos de la medicina pasara y Law volviera a la normalidad.



















SirenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora