¿Otro secuestro?

1.2K 51 12
                                    

Pov Narradora

-No me importa, te deseo-dijo y le mordió la oreja mientras seguía frotándose contra ella.

El chico poco a poco fue subiendo su mano y con ella la ropa de su novia hasta llegar a sus pechos los cuales no portaban sostén, sonrió para sí mismo, terminó de retirar la prenda y la tiró a quien sabe dónde, pellizcaba sutilmente los pezones de la chica provocándole a ésta gemidos. Metió su mano en las panties de la azabache y empezó a masturbarla.

-¡Adrien ah! Adrien deten-te mmm.

-Pero si veo que lo estas disfrutando. Mmm Mari, te deseo no sabes cuánto-dijo lujurioso.

-Pero aaaahhh.

La despojó de la última prenda que poseía y retrocedió hasta el sofá sentándola en su regazo, se colocó el preservativo y lentamente la hizo descender sobre su gran falo, ella le estaba dando la espalda por lo que no podía ver sus expresiones llenas de placer pero podía escuchar sus sutiles gemidos. Una vez entró por completo la sujetó por las caderas y empezó con las envestidas, sumiéndola en un vaivén salvaje y embriagante.

-Adrien Adrien-gemía la azabache.

-Marinette tus gemidos me excitan.

La abrazó por la cintura mientras apretaba uno de sus senos, siguió penetrándola por un buen de tiempo más hasta que ya no podía aguantar.

-Marinette, me voy a correr.

-Yo igual. ¡Ah! ¡Ah!

El modelo la besó y explotó al igual que la azabache, con la diferencia que su semilla había sido retenida en el condón mientras los líquidos de la fémina escurrían entre ambos sexos, lentamente salió de ella y se recostaron en el sofá viéndose el uno al otro.

-¿Por qué yo soy la única desnuda?-preguntó la oji-azul algo avergonzada.

El rubio se dio cuenta de que tenía razón, ella no tenía absolutamente nada y él tenía toda su ropa puesta a excepción de su zipper abierto.

-¿Es que acaso me quieres ver desnudo?-dijo coqueto.

-T-tonto-dijo a la defensiva.

Ambos se quedaron dormidos abrazados. Las horas pasaron y un mensaje de texto fue lo que los levantó, la azabache se sentó y reviso su celular.

Marinette voy a dar una fiesta esta noche, más te vale venir al igual que tu novio, es a las 8:00 no llegues tarde.

-¿Qué es eso Mari?-dijo somnoliento el rubio mientras la abrazaba por la espalda.

-Un mensaje de Alya. Va a haber una fiesta, ¿quieres ir?

-Claro ¿por qué no? Así puedo presumir a mi linda novia.

-Tonto-dijo mientras le golpeaba levemente la cabeza.

El estómago de ambos rugió y se dieron cuenta que tenían hambre, decidieron salir a comer algo por ahí. Marinette se puso un pequeño conjunto que constaba de un polo verde claro y un pequeño short de jean y Adrien, pues, él solo se subió el cierre. Salieron de la panadería y se dirigieron a un restaurante, en el camino varios reporteros y fangirls se acercaron a ellos y les hacían preguntas sobre su relación, y como Adrien es bien hijo de puta les decía que Mari era su novia sabiendo que a esta le daba vergüenza, obviamente las fangirls se molestaban con la respuesta, a excepción de una que se fue gritando "¡¡¡El Adrinette es real!!!" (Esa nos representa a nosotras) Llegaron al restaurante y ordenaron. Mientras esperaban un akuma atacó por lo que tuvieron que transformarse e ir a derrotarlo.

Mi Marinette, Mi PrincesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora