●DULCES SUEÑOS●
El aire fresco que entraba por las ventanas servía para terminar de acunar a sus compañeras, todo era silencio, y dos de las tres chicas que allí estaban dormían plácidamente.
Pero, ¿Qué pasaba con la delgada castaña que por miedo a la oscuridad estaba bajo la ventana? Daban las cuatro de la madrugada, y ya estaba mucho más calmada. Tres horas antes había tenido que salir al pasillo para que sus sollozos no despertaran a Paige y Aya, había soñado con su madre, recordaba una y otra vez como habían abusado de ella mientras veía todo. Claro, para luego matarla.-Sky- decían en voz baja- ya es hora de bajar- era Aya.
-Sube a la cama- un par de brazos tiraron de ella, luego sólo sintió la suave tela de su cama- descansa.
-Tratemos tus cosas- le dijo Aya- descuida.
(***)
Sudaba, temblaba, y le dolía la boca. Él la apretaba muy fuerte. Claro, tampoco esperaba que tuviera consideración.
-Mamá- susurró a la nada. Parecía no haber nadie ¿dónde estaba su madre?- mami...
-Tranquila, cariño- le dijo el hombre que le tenía amarrada- está todo bien.
Sentada en una silla de madera, amarrada a ella, golpeada y sucia se encontraba la pequeña Sky. Nueve años, adiós inocencia. No podía ver nada, y eso le frustrada, por no decir que hacía varios minutos no escuchaba ningún quejido o llanto (aparte del suyo). ¿Dónde estaba su madre?
-¡MAMÁ!- gritó cuando escuchó la puerta abrir- Mami, háblame, ¿dónde estás?
-Aquí estoy mi cielo- una voz ahogada le habló- No llores, que estaremos bien... ¡no! ¡déjala! ¡sueltala imbécil!
-¡MAMÁ!- gritó Sky al sentir como la jalaban.
-Es tu turno, princesa.
-¡VENE!- No podía con esa impotencia, ¡¿Cómo diablos podía ver?!
- ¡Mamá!- solo olía perfume de hombre, un fuerte olor, escuchaba gritos y llanto, pero no podía ver esos preciosos ojos grises que su madre tenía.
No, ya no era un olor a hombre, era... la voz, ya no era con llanto, ¿esa era su madre? No.
¿Han escuchado que al no poder ver, tus demás sentidos se desarrollan? Bueno, digamos que Sky era muy buena prestando atención a esos detalles en el sonido.
(***)
-¡Vamos, Sky!- Paige estaba, literalmente, montada en ella- ¡despierta!
Sky abrió los ojos y notó como todo su cuerpo estaba mojado, sudaba a mares. Estaba mareada, y temblaba. ¿hace cuánto no le pasaba algo así?
-¿Dónde está?- preguntó Sky, Paige la miró sin entender.
-Dónde está quién, Sky- le dijo espantada- olvidalo, ¿Cómo estás?
-¡¿Dónde está?!- Paige brincó de la cama y se alejó de su compañera- No, no,no. Lo siento, espera, lo siento.
-¿Te sientes bien, Vane?
-No me llames así- ahí iba, un dolor de cabeza insoportable.
-¡Corre!- en ese momento entraron a la habitación Aya y Hannah- aquí está.
Hannah miró a Sky y después a Paige, que parecía no quererse acercar a su amiga. Caminó y puso una mano en la frente de Sky.
-Vamos con la señora Pomfrey- le quitó una sábana de encima- vamos, estás ardiendo en fiebre.
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COMO UN SUEÑO.
FanfictionAhora toca entender algo más que ella misma. Toca despertar y ver la maldad. Conocer su pasado, averiguar y aceptar su futuro. Tú, ¿estás dispuesto a aceptar el peso de tus decisiones? ●Ésta es la continuación de "Fabricada". La puedes encontrar en...