Pov HeeChul.
Observo su brazo inclinarse por sexta vez y comienzo a preguntarme si está bien hacerle esto. Desde que descubrí que estoy enamorado de Siwon, he discutido con mi conciencia la realización de algunos actos que me convierten en una mala persona. Entre dichos actos podrían encontrarse los constantes insultos hacia la religión a la que Siwon es devoto; la forma en que trato de hacerlo quedar mal e incluso llego hasta arrepentirme de las cosas que dije o hice cuando nos separamos.
Pero cuando recuerdo el estado de tristeza en el que se encontraba por culpa de sus problemas laborales, y más específicamente, de sus debates morales. Eso que se calla es lo que lo obliga a hacer algo que no quiere. Por esa razón obligo a mi conciencia a acallar esos gritos de "NO DEBES HACERLO", "SON COSAS PRIVADAS Y SOLO LO EMPEORARÁS" y centrarme en que si lo saca todo, podrá llevar las cosas con más calma, e incluso puede que quitarse ese peso de encima lo ayude a tomar buenas decisiones.
Ahora, ¿Porque estamos en el bar dónde trabajo? Y ¿Porque Siwon está consumiendo alcohol como un enfermo?. Pues la respuesta a cada una de esas preguntas es tan sencilla que podría considerarse una idea clásica y aburrida.
Primero, estamos en un bar porque sirven buenos tragos. Lo que es netamente normal. Y segundo, porque le amenacé con dejar de hablarle si no me demostraba -a base de beber- de que no pretendía gritarme en el restaurante. Esto último era realmente falso, porque por mas increíble que parezca, aquello no me hizo ni cosquillas; pero volviendo al asunto, lo he engañado diciéndole aquello, solo para que se emborrache y me cuente de una vez por todas quién es el que lo está incitando a hacer algo que va en contra de su moral.
—¿Faltan cuantos? —Pregunta. Tiene la voz más grave de lo normal y cuando enfoco la vista, a pesar de la escasa luz que hay donde nos encontramos, veo que sus ojos están húmedos, producto de la bebida. Miro la barra donde están apilados en hileras, las copas de martini. Seis vacías y cuatro llenas, la aceituna en el fondo con su respectiva estaca clavada en el corazón.
—Solo quedan cuatro. —Digo. Le tiendo la séptima copa y me armo de valor para comenzar con mi interrogatorio. —Entonces...
—No te diré nada. —Masculla. Se toma la copa de un solo trago y yo finjo indignación.
—Ni siquiera sabes que iba a decirte. Me has hecho quedar mal ¿sabes?. Has herido mi orgullo.
—Lo siento...es que...
—No hay justificación. Pero para remediar el error. Te tomarás cinco más.
—¿Que? HeeChul, amor —Temblé por el mote— no creo que sea la manera de arreglar las cosas.
—Amor. —Comencé, sintiendo como mi cuerpo se convertía en gelatina cuando sonrió.— Así me demostrarás tu arrepentimiento.
—Vale. —Acepta.
Pido por un intercomunicador cinco martinis más y para mí, una cerveza. Veo la cara de frustración de Siwon y sonrió satisfecho. Soy un hijo de puta. Los tragos llegan rápido y Jhon se va contoneándose. Que iluso es al pensar que puede atraer la atención de Siwon. Lo reitero al ver que tiene la mirada en las nuevas copas.
—¿Sabes? Casi no se nada de ti. Por no decir absolutamente nada. —Digo.
—Pues no hay nada interesante. —Dice con voz pastosa.
—Yo creo que si. —Asiento a mis palabras— Ya se que eres abogado, eres cristiano y te gusta observar mi trasero...
—Yo nunca... —Suelto una carcajada y el me acompaña después cuándo se da cuenta que le he tomado el pelo.
ESTÁS LEYENDO
¿Quieres Ir A La Iglesia? [SICHUL]
Fanfiction¿Puede una relación homosexual, ser aceptada por la iglesia cristiana? ¿Siwon elegirá a Dios o al amor que le brinda Heechul?