Capitulo 17

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POV Stephanie Manlius

Todo pasó demasiado rápido, no puedo creer que ya ha pasado un mes desde que Marcos ingresó al hospital. Las chicas y yo hemos ido a verlo cada día, sin importar las circunstancias. Un nudo se forma en mi garganta al verlo ahí postrado en una cama. Que impotencia!! Se rompe mi corazón al ver que sus padres, quienes nunca tenían tiempo para él, pues ahora que está en este estado, están tan angustiados que no se mueven de su lado. Así es el mundo, mientras él estaba bien, todo era la oficina, en este momento no quieren ni respirar mucho por miedo a perderlo.

Lionelly, ¿Que decir de ella? No se ha movido tampoco. La primera semana, ni siquiera fue a la escuela. Está hecha pedazos, y no la culpo. Ver a tu mejor amigo en esas condiciones no es algo que le desee a nadie.

A las 6 PM como de costumbre, me despedí de las chicas y me dirigí a mi hogar. No puedo negarlo, no me siento muy bien que digamos, trato de ser quien se mantenga positiva ante todo esto, pero sencillamente es difícil. 

Luego de una ducha, me dispongo para dormir aprovechando la lluvia, amo la lluvia para dormir,  pero mis intenciones son interrumpidas por un sonido en mi ventana, me giro para ver que es lo que lo provoca, y me encuentro la divertida imagen de Christian empapado de agua y al parecer suplicando que le abra. Me paro en frente de él, aún sin abrir la ventana, y le sonrío, me mira incrédulo, esperando cuando rayos pienso abrirle, y eso hace que mi sonrisa se ensanche. Luego de unos minutos, cuando ya estaba en serio enojado, decidí que ya era suficiente.

-Que demonios te pasa ? ¿pensabas dejarme morir o que?

-No estaría mal.

-Muy chistosa tú.

-Oye, que pasa? Para mi no ha sido un buen día y no estoy de humor como para soportarte bipolar de cuarta.

-Esta bien, lo siento. Es que para mi tampoco ha sido un buen día, supongo que exageré.

-si, pero tampoco te vayas a poner sentimental, EH?

-Ves? Por comentarios como esos es que no puedo ser amable contigo- dice mientras choca mi hombro.

-Como sea, cuentame tus penas- digo adoptando la posición de un psicólogo.

Lo veo recostarse en mi cama y lo miro extrañada.

-Que rayos haces?

-Pues si vas a hacer el papel de psicóloga, tengo que recostarme en la cama como cualquier paciente.-dice sonriente. Me río ante su comentario, este sí que es bipolar, hace un minuto estaba furioso y ya recuperó el sentido del humor. Hombres...

Permanezco en una postura seria e interpreto mi papel de psicóloga.

-Digame Señor Smith. ¿Que es lo que lo agobia?

Lo veo suspirar y tocar el puente de su nariz, al parecer en realidad hay algo que le preocupa. Este no es Christian, él es el típico chico despreocupado del salón. No somos amigos pero si él me necesita, lo ayudaré como pueda.

- Sabes? Es difícil ser el hijo que mis padres quieren. Se sienten decepcionados de mi, pero no entienden que a mi no me interesa su mundo, ni la empresa, ni nada de eso. Simplemente quiero ser yo, con el basket, con mi gente, mi moto, mi auto, con ustedes... -  vuelve a suspirar como si de verdad está cansado.

y por que no??Donde viven las historias. Descúbrelo ahora