Capítulo 27

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•DANIEL OVIEDO•
-Sé que quieres perdonarme, tu cuerpo lo dice nena -me acerco a su cuello despacio y dejo un leve mordisco en él

-Joder Oviedo -muerde su labio inferior y sonrío

-Te quiero nena -acaricio sus mejillas- ¿me perdonas? -pregunto besando su cuello sin prisa

-Daniel -susurra- no me hagas esto -dice excitada

-Déjame satisfacerte nena

Uno nuestros labios ferozmente y de un salto rodea sus piernas en mi cintura mientras nos besamos con gran intensidad. La pasión e incluso el calor aumenta entre nuestros cuerpos, mi excitación al igual que la suya crece por momentos, la necesito.

-Necesito sentirte -susurro mordiendo el lóbulo de su oreja

Muerde su labio y la subo a la habitación, la acuesto en la cama despacio y me acuesto a su lado acariciando su suave abdomen con la yema de mis dedos.

Toma el mando colocándose sobre mí y besa mi cuello añadiéndole algún que otro mordisco; acaricio sus caderas bien definidas y llevo mis manos a sus glúteos también bien definidos.

-Quítame este calor Oviedo -susurra en mi oído- por favor -suplica

-Tus deseos son órdenes para mí

Uno nuestros labios ferozmente incrementando la excitación de ambos, comienzo a quitar su camisa y seguidamente el resto de la ropa, pero ella no se queda atrás, quita mis shorts y masajea mi miembro por encima del bóxer, a lo que respondo mordiendo mi labio inferior inconscientemente. Acaricio su intimidad por encima de la fina tela que la cubre mientras introduce sus dedos bajo mi bóxer.

-Nena, no aguanto más -susurro totalmente excitado

Tras quitarnos mutuamente lo que nos queda puesto de ropa interior, entro en ella lentamente y entrelazo nuestras manos provocando un gemido que se escapa de sus labios.

-No te contengas nena, grita -exijo proporcionándole una fuerte embestida

-¡Dios Daniel! -gime clavando sus uñas en mi espalda

-Así me gusta nena -susurro con la respiración agitada

Doy varias embestidas seguidas y un último gemido por parte de ambos invade la habitación llegando así al climax. Me acuesto a su lado y apoya su cabeza sobre mi torso mientras con sus dedos realiza pequeños círculos masajeando la zona. Acaricio su cabello mientras beso su frente.

-Gracias preciosa -susurro

-¿Por qué? -pregunta sonriendo

-Por regalarme este momento, me ha encantado -digo sincero

-Lo haces bastante bien -dice mordiendo mi labio- eres una fiera -sonrío

-Tú tampoco te quedas atrás bonita, lo que me da mucho que pensar -admito

-No soy virgen Dani, ni siquiera soy primeriza -dice riendo- pero he de admitir que contigo ha sido distinto -acaricia mi tupé- eres tan, no sé, diferente

-Lo diferente enamora -le guiño el ojo

-Y tanto que enamora, eres el primero con el que no me arrepiento, algo habrás hecho

-Quererte, es lo único que se me da bien -sonríe levemente

Tapo nuestros cuerpos desnudos con una manta y poco a poco, con el calor de su cuerpo, mis ojos se cierran del cansancio.

•ANJHARA JONES•
Me pongo su camisa y bajo a preparar algo de cenar haciendo así una pizza mediterránea. La preparo y la pongo en el horno entre 30 y 45 minutos que utilizo para preparar la mesa y ordenar un poco mi pequeña pero acogedora casa.

Tras el rápido paso del tiempo, saco la pizza del horno y la sirvo en un plato cortándola en 8 pedazos. Siento sus fuertes brazos rodear mi cintura y besar mi cuello para, seguidamente, unir nuestros labios.

-Me encantas nena -susurra mordiendo el lóbulo de mi oreja

Intocable. [Daniel Oviedo] #GSA2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora