CAPITULO 26

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Me quería marchar de ese lugar, odiaba a ese hombre y no quería estar junto a el.

-         ¿estas es tu hija?- sonrío a mi padre

-         Si, se llama África. Dale dos besos África, no seas mal educada- como era tan estupido, si me conocía de sobra

-         Encantada Dilan, ahora os tengo que dejar que me quiero preparar para la fiesta- sus ojos no dejaban de mirarme, me di la vuelta y me marche hacia mi dormitorio

Estaba muy furiosa, no podía creer que Dilan estuviera en mi casa y menos que fuera el hermano de Mía. Tenia que tener mucho cuidado, podía contarle a mi padre que he ganado el campeonato del patinaje. Sabia que siendo como es, me hacia chantaje para no decirle nada mi madre y eso me aterraba. Me metí en la ducha esperando poder relajarme un poco, solo quería dejar de pensar y que la fiesta pasara lo antes posible. Erick no se podía enterar de nada, como te enterara podría venir y estropearlo todo. Cuando termine de ducharme me senté en la cama, estaba muy agobiada y no sabia como quitarme esa angustia. Respire tres veces y me puse el vestido, me maquille y me peine. Me mire en el espejo y estaba preciosa, sabia que Dilan no me dejaría en paz toda la noche y baja con este vestido. Me puse las sandalias negras y me puse a bajar las escaleras, en la entrada ya había gente que venia a la fiesta y también estaba Dilan. Su mirada hacia a mi, eran penetrantes y incómodos. Cogí fuerzas y baje las escaleras con mucha sensualidad, así el sabría que me daba igual que el estuviera hay. Vino a recibirme a las escaleras, me ofreció su mano y yo lo rechace. Hizo como una mueca y se río, me dirigí hacia el salón donde estaban todos los invitados a la fiesta. Tenia ganas de estar con gente, así no tendría la oportunidad de acercarse a mi. Mi padre se dedicaba a recibir a todos los invitados, yo no paraba de tomar copas a escondidas porque era menor pero no me importaba. Necesitaba estar en otro mundo para desaparecer en la que estaba en ese momento. Estaba tan mareada que Salí al porche de atrás a tomar el aire, necesitaba respirar un poco de aire y estar sola. Me senté en las escaleras del porche con una copa de champán, no dejaba de mover mi cabeza al ritmo de la canción que sonaba en esa fiesta aburrida. Cuando estaba tan centrada en la canción, oí como se acercaba una moto y corrí a la entrada de mi casa. Espere que fuera Erick, pero la moto paso de largo y yo me puse muy triste. Cuando intentaba subir la cuesta de mi casa, oí como me llamaban, estaba un poco bebida y no hice caso. Seguí intentando subir esa maldita cuesta cuando alguien volvió a nombrar mi nombre, como ya me cabree empecé a gritar

-         dejar de pronunciar mi nombre, malditos arbustos- me reía sola de las cosas que decía

-         África, no soy un arbusto, soy Erick- yo no veía a nadie en esa calle

-         Muy bien, ahora el arbusto se llama Erick, muy original que un arbusto me responda- ya no sabia ni que decía ni lo que hacia

-         Ven hacia aquí, ya no estoy en el arbusto- cuando me gire y le vi, eche a correr a sus brazos como una niña enamorada

-         Te he hecho de menos, quiero estar toda la noche junto a ti- me miro y me beso

-         No puedo llevarte, tienes una fiesta que celebrar y como no estés te van a castigar. Vete a la fiesta y mañana intenta escaparte- me beso y se marcho

Esa sensación no me gustaba, estaba triste y apenada. Subí de nuevo esa maldita cuesta y me dirigí hacia mi porche. Cuando estaba con lágrimas en los ojos, note que alguien ponía una chaquete en mis hombros y se sentó al lado mío.

-         te he visto con Erick, ese chico no te conviene- solté una sonrisa sarcástica

-         déjame en paz Dilan, llévate la chaquete y olvídate de mi- me quite la chaqueta con rabia

-         no te puedo dejar en paz y menos si me voy a quedar una temporada a vivir con vosotros. No tengo prisa de marcharme- no podía creer lo que me estaba diciendo

-         no te vas a quedar, hablare con mi padre y que te eche- estaba muy enfadada

-         no creo que quieras hacer eso, es mejor que me tengas de amigo y no de enemigo- como odiaba esa media sonrisa que tenia en su cara

-         como tienes la poca vergüenza de venir a mi casa y decir lo que estas diciendo. ¡estas loco!- me levante de las escaleras

-         ¡tu de aquí no te vas! El día que nos vimos, te dije que tú serás mía para siempre y lo conseguiré. Siempre consigo lo que yo quiero, entupida niñata- esas palabras me asustaron, sus ojos reflejaban odio

-         ¡jamás seré tuya! Mi padre no lo permitiría que su hija este con un hombre como tu- mis lagrimas querían hacer aparición en mis ojos pero yo lo evite

-         Tu padre esta encantado que su hija este con un hombre como yo- como estaba tan seguro de lo que decia

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QUE TAL ESTE CAPITULO?????ESPERO QUE OS VAYA GUSTANDO TANTO COMO A MI ESCRIBIRLO.

HE SUBIDO LA FOTO, CON LA QUE AFRICA ESTA EN LA FIESTA

BESOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS OS ADORO A CADA UNA DE VOSOTRASSSSSSSSSSSS

PINGOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

AMOR SOBRE HIELODonde viven las historias. Descúbrelo ahora