AMOR SOBRE HIELO

CAPITULO 5

Sentía que me ahogaba en sus brazo, le mande que me soltara, de inmediato me soltó.

-         No sé de qué me estás hablando-  susurre

-         Africa no te hagas la tonta, te he visto patinar 2 noches seguida, sabes que si quiero puedo denunciarte porque estar en la pista de hielo sin ser de esta universidad- como podía ser tan cruel conmigo.

-         Bien denúnciame, no tengo ningún problema- le dije muy enfadada

-         Sabes que no lo voy hacer, pero a cambio de no hacerlo te pido que patines conmigo cada noche- me susurre y eso me hizo temblar todo mi cuerpo

-         No lo voy hacer, para mí esto es un hobby, aparte tu a mi no me puedes obligar hacer esto- no sé quien se creía que era

-         Sabes que puedo obligarte- me sonrió

Me marche hacia mi casa pensando lo que había dicho Erick, si era Erick. Me lleve una decepción porque no me pensaba que fuera de esa forma. Sabía que si me denunciaba a la universidad, jamás entraría en ella y mi mayor deseo era entrar justamente en esa universidad. Subí por las escaleras para dirigirme a mi habitación cuando oí la voz de mi tata

-         Africa, ¿Dónde has estado?- la notaba preocupada

-         Tata, fui a dar un paseo ¿pasa algo?- me acerque donde ella

-         Si, ha llamado tu padre para decirme que ya habían salido hacia estados unido y que quería hablar contigo pero como no estabas tuve que decirle que te habías marchado a dar una vuelta.

-         Se ha enfadado mucho- la mire con inquietud

-         Africa se ha enfadado tanto, que me ha dicho que estarás 1 semana castigada sin salir a ningún lado después del colegio y que te llamara todas las tardes para saber si estas en casa o no.

Mire a mi tata y la sonreí, era la mejor noticia que me podía dar porque así me podía librar del chantaje de Erick. Me marche a mi habitación con una gran sonrisa.

Por la mañana me marche al colegio, pero ese día estaba contenta ya que tenía una amiga, Lisa aunque sabía que iba a estar molesta conmigo por haberme marchado ayer sin decir nada. Me acerque a mi taquilla y hay estaba ella con sus libros.

-         Africa, que te paso ayer- me sonrió

-         Nada que me acorde que tenía que marcharme a hacer unos trabajos- los mejillas se volvieron rojizos.

-         Si quieres puedes venir mañana, que nos toca otra vez las clases

-         No puedo lisa, mi padre me ha castigado 1 semana sin salir todas las tarde- le susurre

-         No pasa nada, si quieres puedo ir a tu casa hacerte compañía y así conocernos más- me dio mucha alegría que Lisa quisiera ser amiga mía.

-         Me parece genial, así también podemos hacer los deberes juntas

Legamos a clase, ese día teníamos exámenes, así que me sentía tranquila porque sabía que iba aprobar todas. Llego la hora de irnos, cuando vino Lisa

-         Africa, no puedo ir a tu casa, tengo que cuidar a mi hermano- me puse muy triste pero recordé que tenía que ir a dar clases.

Fui corriendo a casa, llame gritando a mi tata para decirla que me tenía que cubrir con mi padre para ir a dar clases. Ella asintió y yo me marche a coger el autobús.

Llegue al barrio cuando vi que estaba lleno de niños curioseando algo. Habían hecho un círculo alrededor de algo, que no me dejaban ver. Me acerque e iba apartando a los niños para poder ver que es lo que pasaba. Hay estaba con su nueva moto, con sus pantalones vaqueros rotos, su chaqueta de cuero y hablando y jugando con los niños. Cuando me di cuenta que era Erick, me di la vuelta y me marche

-         A donde crees que vas, me debes una respuesta- me cogió de la muñeca

-         ¡No te debo nada y suéltame de la mano!- todos los niños nos miraban hasta que vi  Lia delante nuestro.

-         Erick suéltala, la haces daño- esa niña tenía razón me estaba haciendo daño

-         Lia, no pasa nada, vete llevando a todos los niños a clase que ahora voy- la sonreí para que viera que todo estaba bien.

-         Africa, como no patines conmigo te denunciare a la universidad y no te dejare en paz- en su mirada notaba furia

-         Erick, se acabo, te dije que no y es que no. Ahora déjame, quiero ir a dar clase a mis alumnos. ¡por cierto bonita moto!- le sonreí

Me marche hacia la casita de madera, cuando vi a todos mis alumnos mirando por la puerta y ventanas de la casita. Entre y les mande que se sentara. Empecé a dar clase cuando note que Lia no paraba de mirar hacia la ventana.

-         ¿Lia que te pasa que no paras de mirar por la ventana?- la reñi

-         Nada, solo pensaba que había una persona pero me equivoqué- siguió mirando hacia la ventana

Deje el libro encima de mi mesa y me acerque a la puerta

-         ¡Qué haces tú aquí!- estaba escondido detrás de la madera de la paredes, era Erick

-         Puedo estar donde quiera, tu no me puedes decir nada- me grito

Me metí dentro de clase con los dientes chirreando de la rabia contenida que tenia. Cogí mi libro y empecé a dar clase con normalidad

Espero vuestros comentarios y votos!!!!!!!!!

Os está gustando la historia? Un beso y mil graciasssss!!!!!!