4 - 1

150 7 0
                                    

Mami: -Por supuesto. Haré lo que sea necesario.

Tengo una casa en la montaña. Durante las vacaciones podéis quedaros allí. Yo haré de tapadera, no os preoucupéis.-

(Ahora)

Y así fue como Mami consiguió que mi existencia no supusiera un escándalo en Mitakihara.)

-Heeeey, Suki, ¿bajas ya de las nubes?

-¿Eh? -Reaccioné yo.

-Te has quedado mirando las musarañas. Te he visto. Es porque te gusta Sasuke, ¿a que sí?

-¡Pero qué dices! -(Sí, cierto. Me gustaba, pero tenía cosas más importantes en las que pensar, vidas que salvar y brujas que cazar, además a ella también le gustaba. Mucho más que a mí de hecho. Así que había decidido no caer en el error de escuchar a mi corazón).

La miré de arriba abajo. Ella aún vestía el uniforme, pero se había arreglado mucho. Llevaba maquillaje de los caros, pintalabios rosa y aretes en forma de perla.

-¿No teníais un partido? ¡Llegaréis tarde! -Exclamó Madoka.

-¡Hai, ya nos vamos!

Al cruzar la puerta evité a Mami, verla me recordó todos los sucesos extraños de últimamente. Traté de olvidarlo, pero desde ese momento no pude concentrarme más que en eso.

-¡Gooooool!! -Exclamó Honoka dejándome sorda. -¡Qué bueno! ¿No lo has visto hermanita? -Dijo pegándome un codazo.

-No me llames hermanita... -Susurré. Odiaba que me tratara tan cariñosa y confiadamente- Desde que me había convertido en Puella Magi, para mí no había ni hermanas, ni mejores amigas, ni quedar después de clase. Exceptuando hoy, que era el cumple de Sasuke, y nadie lo sabía excepto yo, así que quería darle una sorpresa.

Por alguna razón no paraba de pensar en Mami. De repente tenía un snetimiento raro hacia ella; era como de irritación y preocupación, por lo que pudiera pasar, todo junto...Esa chica, Katelyn, tramaba algo; y no podía recordar si llevaba su gema del alma al cuello. <Nah, si la llevara, me hubiera fijado muy bien>.

-¿Habéis visto eso? -Una voz masculina joven y agradable me sacó de mis pensamientos. Era Sasuke que se había acercado a las gradas porque ya había terminado el partido.

-¡Enhorabuena! ♥ -Dijo la irritable voz de Honoka que apestaba a hormonas de pura adolescencia.

Sasuke rió sin parar.

-¿Are? -Me sorprendí yo.

-¿Qué pasa? -Preguntó Honoka.

-Hemos perdido. -Y siguió riendo.

Yo solté una carcajada también.

-Pero si sólo he visto un gol. -Dijo Honoka extrañada.

Efectivamente, había visto el único gol de Sasuke, ósea que sólo le había estado mirando a él.

Miré el marcador y efectivamente mostraba la aplastante derrota. "4 - 1" contra Tokyo.






La hija de Madoka y Homura [Detenida]Where stories live. Discover now