Capítulo 2: Sin cafeína

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Cuando Wu Yifan y Kim Joonmyun se conocieron era apenas el primer año del segundo en la universidad. Le asignaron un bonito "apartamento" y pronto ya se encontraba acomodando sus cosas en el armario de su habitación, los libros en su escritorio, decorando todo a su gusto, incluso si sabía que para el siguiente fin de semana habría una pila hecha de ropa sucia en algún rincón (o en todos). Disfruta el hecho que por ser el primero en llegar al departamento puede escoger primero en cuál cuarto quiere dormir, y no desperdicia la oportunidad, decide tomar la que tiene una mini terraza y baño dentro; será desordenado pero le gusta su privacidad (quizá le gusta porque es desordenado pero el punto es otro).

Ya ha terminado de empacar y se encuentra observando las alacenas casi vacías, excepto por la vajilla básica y un par de sartenes, no es que importe mucho porque no es muy bueno cocinando e igual planeaba sobrevivir a base de ramyeon instantáneo, arroz y cereal; es un buen plan.

Deberá rellenar el refrigerador, eso sí; hace una lista mental: leche, huevos, cereales, algo de jugo, quizá podría comprar verduras... pero no se engaña a si mismo, no sabe cómo podría usarlas... ¡Fruta! Esas las puede comer crudas luego de lavarlas así que ese camino parece mejor.

Es cuando lo escucha por primera vez, el sonido que le perseguirá por los siguientes años, la puerta se abre y le sigue el sonido de una pelota botando, debe ser su compañero por lo que sale de la cocina para presentarse con él. Una sonrisa se posa en sus facciones al tiempo que mira al extraño.

—Buenos días, mi nombre es...

—Enano.

Joonmyun se queda helado en su lugar, cualquier palabra que pensara enunciar se queda en su mente pues el tal Wu Yifan le acaba de decir enano y no llevan ni un segundo de conocerse. Y sí, Wu Yifan es muy alto, extremadamente alto, con el cabello bastante más largo que el propio, castaño y recogido en una pequeña coleta; tiene cejas como de caricatura pero eso no lo va a decir en voz alta.

Rápidamente esboza de nuevo una sonrisa y hace lo posible para que no se note cuánto es que le ha afectado directo en el autoestima el adjetivo.

—Mi nombre es Joonmyun, mucho gusto. Primer año de psiquiatría —se presentó inclinándose ligeramente como saludo. El no recibir respuesta además de la mirada clavada en su rostro le incomodó como si no hubiera un mañana y tuvo que recordarse a si mismo el no parecer tenso, más tenso—. Tú eres Wu Yifan, ¿No es así? Sé que seremos compañeros pero no sé nada más de ti y...

—Eres un enano gordito muy simpático.

¿Qué? Es decir, ¿Qué? ¿Qué rayos...?

Su primer encuentro fue así de simple y de sencillo, Yifan sigue asegurando (y lo hará toda su vida) que él fue quien se presentó primero luego de que el abusivo de Joonmyun le quitara su habitación y se comiera toda la comida que había en el refrigerador.

Es de mañana y Joonmyun entra a la habitación de Yifan, sin molestarse en tocar la puerta porque está furioso, le quita las cobijas y cuando eso no funciona jala las sábanas hasta que lo hace caer al suelo, todo bajo la atenta mirada de MyunMyun que los ve desde su jaula.

—¡Wu Yifan! ¡Mi cabello es rosa! ¡ROSA! —grita, le fulmina con la mirada, toma la primer almohada que encuentra y le ataca sin importarle que la conquista de la noche anterior esté saliendo del baño y les vea desde la puerta de la habitación—. ¡Es rosa! —chilla—. ¿Por qué mi cabello es rosa?

Yifan le observa, claramente, en un estado de estupor en el que es obvio que no comprende qué es lo que está pasando, qué le está diciendo o quién le está hablando. Se cubre un poco con las sábanas y un segundo después estalla en carcajadas.

—¡Eres rosa! —y sigue riendo.

—¡Pude notarlo! —le grita Joonmyun de regreso. Es plenamente consciente de que está montando una escena, que está reaccionando como un niño, pero su maldito cabello es rosa y está harto de las estupideces de Yifan; antes de ducharse su cabello tenía ese tono de castaño que le cuesta un poco cuidar pero vale la pena porque le hace ver como alguien que sabe lo que hace. Sale de la habitación como un remolino, se viste en menos de un segundo y se marcha del departamento dando un portazo. Todo en menos de un minuto.

Horas más tarde es cuando Yifan descubre que esta vez realmente se ha pasado, le gusta molestar a su compañero de piso pero es solamente porque el coreano se enfada fácilmente, se exaspera, grita y aún así es demasiado bueno para odiarle por completo o mantenerse molesto por más de un día.

Por primera vez en tres años la cafetera está vacía cuando se arrastra a desayunar, no hay una taza especial para él junto a la cafetera, nadie se molestó en hacer la lista de lo que hace falta para el supermercado. Olvida sus llaves porque nadie las pone tras la puerta para que recuerde que debe llevarlas al salir del departamento.

Se le pasará piensa, Joonmyun podrá estar molesto pero nunca ha sido descuidado cuando se trata del piso que comparte.

Esa noche vuelve a un departamento sumido en la obscuridad, es el menor quien siempre llega primero y enciende por lo menos la luz de la entrada para evitar accidentes. La loza que dejó sucia por la mañana sigue en exactamente el mismo lugar, no hay libros regados por las mesas, no hay ni un solo signo de que alguien antes que él haya puesto un pie en el departamento.

Corre a revisar a su mascota porque si Joonmyun no ha aparecido en todo el día eso quiere decir que MyunMyun no ha sido alimentado y podría estar muerto... Para su fortuna no lo está, pero si parece bastante hambriento, a juzgar por la forma en la que se abalanza sobre el plato de su comida.

Volverá pronto, se dice a si mismo cuando trabaja en algunos de los planos que debe entregar para algunas de sus materias, es su último año estudiando arquitectura y jamás se perdonaría si llegase a fallar alguna de sus asignatura. Se queda dormido sobre la mesa de dibujo sin darse cuenta.

Cuando, a la mañana siguiente, el característico aroma del café que prepara el psiquiatra no invade el departamento  es que puede notar a la perfección que esta vez, en verdad, en verdad, en verdad, ha cruzado un límite que ni siquiera sabía había sido establecido para evitar que Joonmyun le asesinara, o peor.


🌟

Holiii ; u ;

Les dejo solamente una imagen de lo que es el departamento del KrisHo para que puedan darse una mejor idea... y... errrrrr.... eso, comenten y voten y esas cosas bonitas que me suben el autoestima ; u ;


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Cómo domar a tu dragón [KrisHo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora