All Monsters Are Humans

18. Eva Must Die.

Todo lo ocurrido estos dias conmigo quedó atrás cuando unos extraños asesinatos empezaron ha asediar un pueblo que estaba cerca de Laurence Kansas, todo apuntaba que Eva había pasado por allí, asique sin perder un segundo, Cas, Bobby, Sam, Dean y yo partirmos en su búsqueda, armados con dos balas de ceniza de Fénix cada uno.
-¿creeis que estará aquí?-preguntó Sam cuando salimos del coche justo frente al primer bar del pueblo.
- no lo se, pero esto esta muy silencioso para ser un bar-dije quitandole el seguro a mi arma y apuntando hacia la puerta.
-Sam y yo por la puerta de delante, vosotros por la de atrás-dijo Dean; Bobby y yo nos fuimos hacia la parte posterior del bar junto a Cas, pero cuando entramos descubrimos que todos estaban muertos, todo estaba manchado de sangre y la mayoría de cadáveres tenían una enorme herida en el cuello, bajamos las armas y empezamos a recorrer el local para saber que había hecho esto.
-esta claro que son vampiros- dije señalando a los cadáveres con una herida en el cuello y unos enormes colmillos saliendo de su boca.
-no lo son-dijo Dean señalando la afilada cuchilla de hueso que salía de una de su muñecas.
-¿qué tiene colmillos y eso?-pregunto Sam a Bobby.
-nada que yo conozca-dijo dejándonos asombrados.
-¿entonces que son?-pregunto Dean
-tu los has descubierto, tu les pones un nombre.-Dean me sonrió orgulloso.
-veamos tienen muy mal genio y no te puedes librar fácilmente de ellos, deberían llamarse Alex-dijo con gracia.
-no les vas a poner mi nombre-dije seria.
- vamos es un regalo, puede que no descubra nada más nunca.
- ¿y porque no les pones el tuyo? Tienes peor genio que yo.
- no, creo que si no puedo ponerles tu nombre les pondré,..., Jennifer Starships
-¿Jennifer Starships?-pregunto Sammy frunciendo el ceño.
-si, esta decidido.
- no los vamos a llamar asi-dijo Sam.
-he sido yo el que lo ha descubierto así que se llamarán así.
-pero...
-podéis dejar de pelear, parecéis críos, hay que encontrar a Eva antes de que cree a más...-Dean me miró con una sonrisilla- Jennifer Starships -dije finalmente, rodando los ojos.
- bien vamos.-comentó Bobby saliendo del bar junto a cas.
- ¿pero si lo que Eva quería era crear nuevos monstruos, porque matarlos así?.
-quizás fueron intentos fallidos, algo que quería crear pero que no le salió bien en los primeros intentos.
- deberiamos buscar...-antes de que Cas terminase la frase, unos tipos armados irrumpieron en el bar y nos ordenaron que dejasemos las armas en el suelo, Cas desaparecio al instante, estaba claro que eran policías y por mucho que Sam, Dean o Bobby intentaban explicarles que no estábamos en ese lugar cuando todos murieron, ellos parecían no querer escucharnos, así que nos llevaron arrestados hasta los calabozos.
- genial, como miren mi historial me caerá cadena perpetua-dije desde mi celda hasta la de los chicos.
-ese es el menor de nuestros problemas.-dijo Bobby al escuchar el estruendo de fuera de los calabozos.
-son Jennifer starships -dijo Sam al ver aparecer a uno de ellos frente al calabozo.
-Eva esta contenta de veros aquí-dijo acercándose a la celda de los chicos.
-eh idiota ¿porque no te acercas a mi celda? ¿es que crees que no puedo darte una paliza por ser una chica? Vamos acercate para que te demuestre de lo que soy capaz.
- eres muy confiada para estar apuntó de morir-dijo cambiando de rumbo para abrir mi celda.
-eh idiota como la toques te mataré-dijo Dean apretando los barrotes de su celda hasta que sus nudillos se volvieron blancos.
- tienes muy buena pinta-susurró el seriff entrando y mirándome de arriba a abajo- no se si comerte o convertirte en ...-antes de que acabase le di un puñetazo en la boca haciéndolo retroceder un par de pasos.
-hablas demasiado-dije intentando golpearlo de nuevo, pero esta vez me retuvo sujetandome por la muñeca, sacó esa extraña cuchilla de hueso y la uso para cortarme en el brazo, su rostro se transformó por los dientes de vampiro que empezaron a emerger al oler la sangre de mi herida, pero antes de que hiciese algo más le di un rodillazo en el estomago frenandolo un poco, en ese instante Cas apareció y lo mató con sólo posar su mano encima de él.
-Gracias Cas.
- no es nada.
-¿habéis acabado? Porque nosotros seguimos aquí encerrados.-dijo Dean aun cabreado, llamando nuestra atención.
-debemos darnos prisa, si el sheriff era uno de ellos lo más probable es que todos sus hombres también lo sean.-dijo Bobby.
- entonces necesitaremos armas.-me agaché y le arrebaté su pistola al difunto Sheriff junto con las llaves del calabozo, tras sacar a los chicos, recuperamos nuestras armas y fuimos a las oficinas de la comisaría, todos los policías se nos echaron encima convirtiéndose en Jennifer starships, pero logramos librarnos de ellos poco después.
Los hijos del Sheriff estaban en una de las salas de interrogatorios, donde su padre los había escondido para su seguridad antes de que se convirtiera en un monstruo.
-¿tenéis hambre?-pregunté ofreciéndoles una chocolatina a cada uno, el menor la cogió sin decir nada.
- no habla desde que vio a Papa convertirse en eso-dijo su hermano pasando un brazo por sus hombros mientras que con su mano libre cogía la chocolatina.
- es normal que este confuso y asustado, pero ahora tienes que ser valiente por los dos-el niño asintió y yo le sonrei para darle consuelo.
- ¿tenéis a alguien con quien pueda llevaros?-pregunto Dean, que había estado junto a mi todo el tiempo.
-si, tenemos un tío en un pueblo cercano.
-vale, pues os llevaré con el -dijo Dean levantándose.
-no hay tiempo de eso, tenemos que acabar con Eva ahora que el rastro esta caliente.
- son niños Cas-dijo firme Dean sin poder creer que el ángel estuviera más preocupado por Eva, que por los niños.- los llevaré a un lugar seguro y después volveremos a investigar el paradero de Eva.
- pero...
-no les llevará más de una hora, Cas-interrumpí al ángel.
-esta bien nos reuniremos en el bar en el que desayunamos esta mañana -terminó cediendo, aunque aún algo cabreado.
Dean y Sam metieron a los niños en el coche y partieron rápidamente sin darme tiempo de decirles algo más que un "tened cuidado".
Bobby y yo nos encargamos de hacer desaparecer los cuerpos de los Jennifer starships de la comisaría y del bar. Apenas terminabamos cuando los chicos volvieron y nos dirigimos a la cafetería en la que estuvimos esa misma mañana, poco después de entrar Cas empezó a hacer muecas.
-¿qué pasa Castiel?-pregunté.
-no puede usar sus poderes-respondió la camarera.- lo siento pero he tenido que bloqueados para que podamos hablar.-dijo sonriendo, uno de los clientes se levantó y cerró la puerta con seguro.
-eras tu desde el principio-dijo Sam aun conmocionado, eso era una trampa y habíamos caído de lleno.
--¿porque estas haciendo eso?-interrogó Dean con tono cabreado.-¿porque matar y transformar inocentes?
-venganza-respondió ella con simpleza, pero con un gran nivel de ira en su voz.-desde el comienzo ha habido un equilibrio, mis hijos mataban a unos cuantos humanos y vosotros los cazadores matabais a un par de los míos, pero luego ese asqueroso y sucio demonio empezó ha hacer atrocidades a mis hijos, ¿esperáis que me quedé quieta cuando torturan y matan a mis hijos?¿que clase de madre sería?
-nosotros no tenemos la culpa de que un demonio quiera jugar con tus aberraciones-dijo dean provocandola.
- no me comprendes, quizás si tuviera otro aspecto-dijo transformándose en una mujer rubia, de mediana edad, de ojos azules y expresión maternal.
-no te atrevas a usarla.-dijo Sam muy enfadado.
-vamos Sam, quizás si me parezco a vuestra madre podais comprenderme.
-jamás comprendernos a una zorra como tu- dijo Dean.
- ¿qué haríais vosotros si matarán a todos los vuestros de maneras terribles?-dijo mientras se acercaba a Dean pasando sus manos sobre sus hombros, me tensé.
-eso acabó, Castiel mato a Crowley- le dije intentando llamar la atención para que se separase de Dean.
-¿eso crees?-se acercó a mi un poco, dejando de tocar a Dean.
-ehh, madre del año, ¿porque protegerias tu a tus bestias cuando nunca lo has hecho? Un monstruo como tu no tiene ningún sentimiento-continuó el estúpido cazador de ojos verdes, Eva, que ya no cabía en sí del enfado se abalanzó sobre él.
-quizás así entiendas lo que digo-dijo segundos antes de morderle en el cuello.
-¡Dean! -exclamé alarmada, pero poco después Eva se apartó asqueada, comenzó a derretirse formando una asquerosa sustancia gris en el suelo, tras lo que todos los Jennifer starships que estaban en el bar murieron.
-un chupito de Jack Daniel's y otro de cenizas de Fénix, no ha sido tan dificil-dijo sonriendo de lado, yo le golpee el brazo.
-eres un imbécil ¿sabes el susto que me has dado?-susurre antes de abrazarlo, el me correspondió el abrazo acariciando mi espalda.
-alguien tenía que tener un plan B.
Tras hacer desaparecer los cuerpos por tercera vez en el día, nos subimos al coche y volvimos a la casa de Bobby, todos menos Cas, quién desapareció cuando apenas había muerto Eva, había algo que olía mal en todo lo sucedido, Eva había insinuado que Crowley estaba vivo y si eso era cierto, Castiel nos había traicionado.
-ehh Alex, ya hemos llegado-la voz de Sam me saco de mis pensamientos por lo que le sonreí y bajé del coche, recogí mi mochila del maletero y al hacerlo uno de mis viejos teléfonos móviles cayó al suelo, una idea cruzó mi mente, le había prometido a Dean no indagar en lo que me había pasado hasta que acabaremos con Eva, y eso había hecho, pero ahora necesitaba saber que había ocurrido, asique llamé a mi viejo contacto en la policía y le pedí el expediente de ese homicidio.
-Alex-la voz de Dean me hizo colgar antes de poder despedirme.-¿que estabas haciendo?
-nada, sólo es que estoy muy cansada.-le sonreí, y el me respondió del mismo modo
-deja que yo lleve esto-me quito la mochila y sonriendome de lado entramos en la casa, cada quien se fue a su habitación, necesitaba una ducha urgentemente, me envolvi en una toalla y fui a buscar mi ropa, pero al salir del baño Dean estaba sentado en mi cama sosteniendo mi ropa interior.
-¿Dean que...?
-¿usas bragas de abuela?
-¡Dean!- dije arrebatandoselas de las manos.-son para dormir, son cómodas y...-el empezó a reírse y yo le golpeé el brazo sin poder evitar reírme un poco.
- seguro que te quedan genial-dijo con un tono algo más serio aunque aún con una sonrisa, se fue acercando lentamente y rodeó mi cintura con sus fuertes brazos, mi toalla sólo cubría lo necesario y Dean parecía haberse percatado de ello.
- ¿a que habías venido?-susurre cuando sus labios estaban casi rozando los míos.
-sólo a que me echases una mano con lo del cuello, pero he cambiado de opinión-dijo con la voz grave, mi piel se herizo al oirlo, habiamos esperado demasiado para poder estar a solas.
-aun así debería...-fui interrumpida por sus labios en los míos, haciendo que desapareciera mi último atisbo de razón, él se deshizo de mi toalla sin miramientos y comenzo a besar mi cuello mientras recorria con sus manos cada centimetro de mi piel, su contacto me hacía arder y pronto no pude contenerme, mis manos le arrebataron la camiseta del pijama y quedó sólo en boxers, dejando vía libre a mis manos para explorar por su piel, todo era tan conocido y a la vez tan nuevo.
-no sabes cuanto he deseado que este momento llegase.-dijo en mi oído para después dejar un reguero de besos desde mi cuello hasta mis labios, sus manos se dirigieron a mis muslos y me invitaron a rodearlo con mis piernas, perdida en sus labios y sus caricias no me percaté de que ya estábamos sobre mi cama, la última prenda de Dean que nos separaba desapareció en segundos y aun con sus labios sobre los míos nos unimos suspirando de alivio y placer, sus movimientos eran lentos pero fuertes, poco a poco, me iba acercando al paraíso y no podía evitar gemir su nombre, el aumento el ritmo impulsandome a la cima, segundos después se desplomó sobre mi cuerpo escondiendo su cara en mi cuello, donde dejó varios besos para después separarse de mi y tumbarse a mi lado.
- ¿porque hemos esperado tanto?-pregunto aún jadeante.
- no lo se pero no vamos a volver a estar tanto tiempo sin hacerlo-él  sonrio y me atrajo a sí, con rodeandome con sus brazos.
-voy a tomarte la palabra-dijo acercandome aún más.
- me encantaría que lo hicieras, pero primero voy a encargarme de esa herida.-sus sonrisa decayó y sus labios formaron una mueca triste, dejando su labio inferior expuesto para mi, me acerqué aún más y mordi suavemente ese labio tan tentador, dando comienzo con ello a una noche llena de lujuria, pasión y puede que algo más.