Capitulo 11

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-¿Que es lo que ya no soportas? ¿El hecho de que sus recuerdos de ti no le han regresado o el que otra mujer este interesada en tu hermano?- me acorralaba entre la pared, me sentía vulnerable a todo. El cuerpo de Kai se juntaba mas al mio -se que se escuchara cruel, pero, me encanta verte llorar- el paseaba su mano por mi rostro; que poco a poco bajaba hasta mi pecho, es una estupidez pero mi respiración se acelera, siento un cosquilleo en mi estomago, la pierna de Kai se pone entre las mías y la roza con mi parte intima -quiero hacerte mía, pero el hecho de que estés teniendo sexo con tu hermano, en cierta parte me repugna- el se alejaba de mi cuerpo y me veía de arriba a abajo, después de unos segundos, de nuevo se me acercaba y ahora sus labios se pegaban a los míos -deseo poder quitarte la textura de sus labios y dejar marcados los míos, quiero que tu cuerpo se llene de la textura de mis caricias, lo que yo no entiendo es como puedo desearte de esta manera- tomaba mi cintura y me cargaba. Yo abría mis piernas para poderlo abrazar con las ellas por detrás de su cintura, nuestros labios siempre se juntaban toscamente, mi cuerpo se estremecía al sentir la firmeza de su miembro; el cual su pantalón lo detiene de un movimiento mas profundo -por favor detente- mencionaba con mi voz entrecortada -como quieres que lo haga, si tu llanto me enciende, tu voz, esas ganas de darte todo de mi y olvides a tu hermano me excita hasta este grado-. La voz de Kouyou hacia que todo ese desenfreno se fuera, no se como fue que los dos logramos estar como si nada cuando el llego al vestíbulo -Kai podrias venir quiero mostrarte lo que llevo- Kai fue un tanto molesto a donde Kouyou estaba. El timbre del depa sonaba, abría la puerta y era mi jefe; quien traía un ramo de flores y otra cosa -Buenas noches Himemiko-san, toma son para ti- me da el ramo de flores -muchas gracias Tomoe-san, por favor pase- entra -quiere algo de tomar?- pregunte -quien es?- llegaba este Kouyou y miraba a Tomoe molesto se acerca a mi y me quita el ramo de flores que me regalo, las avienta al suelo y me toma por la espalda para después besarme -que te quede claro que ella es mía- decía después del beso, yo no supe que hacer, ni siquiera reaccione; la cara de Tomoe cambio a un ceño sorprendido -Yo pensaba que eran hermanos- fue lo que mi jefe dijo -¿Que?- decía confundido Kouyou -Lo somos, pero el no recordaba nuestro parentesco, tal vez pensó que era su pareja, siento mucho todo esto Tomoe-san- hacia una reverencia -Es mejor que me valla, dejo este presente para tu hermano aquí, te veo mañana a primera hora- decía ya retirándose del depa, regreso la mirada hacia mi hermano y este me mira con asombro al piso, pareciera que recuerdos llegaban a él -somos hermanos?- pregunto aun con la mirada baja -Lo somos- respondí -entonces que son todos estos recuerdos que tengo contigo haciendo el amor?- llevaba sus manos a la cabeza, sus lagrimas se deslizaban al recordar más y más; sobre nuestro pecado.

La mirada de ella se veía tan triste al darse cuenta que aun no la recordaba, cuando entre a mi estudio una melodía llego a mi, saque una hoja en la cual escribí un par de párrafos, mejor dicho escribí una canción pero siento que algo le hace falta para que este completa, tome asiento en una silla y cierro los ojos, pareciera que la voz de ella pronuncia unas palabras que trato de escuchar, pero aun nada, fue de golpe que el sonido de esas palabras llegaron a mi -Please call my name- tome un bolígrafo y lo apunte en aquella arrugada hoja, mientras escribo eso pienso el como responder a esa petición, ahí fue cuando llego otra parte de esta canción -¿Debería responder a esa petición con una sonrisa?- pero si en verdad llegara a hacer eso me daría temor de lastimarla, aquí llego otra parte para que la canción tuviera sentido -Tengo tanto miedo de hacerte daño que no puedo ver nada- fue lo ultimo que plasme en la hoja, el que Kai estuviera aquí me ayudo de mucho. Escucho como se azota la puerta -yo iré a ver- decía mi querido amigo, continuo escribiendo los acordes. Sentí que Kai se tardo demasiado estoy tan emocionado de que aquella mujer pueda escuchar lo que he escrito para ella, voy hacia el vestíbulo sin antes llamar a Kai, cuando llegue Kai estaba recargado en la pared; frente a aquella mujer, ninguno se veía a los ojos, sentí celos de que ellos estuvieran ahí, solos -Kai podrías venir quiero mostrarte lo que llevo- fue la única manera en la que pude alejarlos, no quería dejarlos solos, no recuerdo bien quien es ella, pero el solo pensar que ellos dos estén así me enoja -Bien y que querías mostrarme?- decía un tanto molesto -quiero que leas la letra- le pasaba la hoja, escuche de nuevo el timbre; deje en el estudio a Kai y me dirija a la sala, un hombre elegantemente vestido se encuentra frente a ella. Me molesto, un impulso invadió mi cuerpo haciendo que tomara el ramo de flores y las ventara al piso, tome por la muñeca a aquella mujer y sin pensarlo dos veces la besé, mis labios reconocieron aquella textura; dulce, suave, cálida. Observaba la expresión en su rostro y estaba enrojecido, yo solo sonreí -pensé que eran hermanos- decía el hombre que esta estupefacto debido a aquella escena -lo somos- menciono la mujer, cuando pronuncio esas palabras un millón de recuerdos llegaron a mi de golpe, recuerdo las veces que mi cuerpo se estremecía al sentir el de ella, recuerdo sus crueles silencios, el como era que siempre me iba de su cuarto sin decirle nada, muy en el fondo se que jamas abuse de ella, que nunca la lastimaría, pero a pesar de todo eso, no recuerdo su nombre. Mi cabeza duele, el que todos aquellos recuerdos llegaran de golpe me provoco un mareo y dolor estomacal, corrí al baño; vomite. No se que me da mas asco el haber hecho el amor con mi hermana o que a pesar de todo deseara hacerlo de nuevo.

Sugar PainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora