Bajo el mismo techo | Yoonmin

29.-

Pov. Yoongi

Sus ojos, sus mejillas, sus labios, su voz, su cuerpo, sus sonrisas cada vez que me veía abrir los ojos por la mañana, todo Park Jimin... Todo Park Jimin que ahora está frente a mí.

Pestañeo repetidas veces incrédulo ante la situación, Park frente a mí, con la misma sonrisa de siempre estira sus brazos esperando una respuesta mientras los chicos expectantes murmullan cosas emocionados. Mis piernas flaquean y caigo al suelo de rodillas, cubriendo mis ojos para que no vean las lágrimas salir.

-...No puede ser- Balbuceo volviendo a abrir mis ojos para así ver a Jimin cojeando hacia mí, para mi sorpresa su cabello ya no es del tono anaranjado de antes, ahora es castaño oscuro –Tu pelo-

-Quería hacer un cambio antes de que me vieras- Su mentón tiembla por los sollozos que se aproximan–Si quieres puedo cambiarlo- Añade mirando a un lado avergonzado, entre mis dedos tomos hebras de su cabellera, haciéndole saber que me gusta así -¿Qué sucedió contigo, Yoonie~?- Pregunta pasando su pulgar por mis ojeras y terminando en mi mentón ahora cubierto por una no muy espesa barba.

-Se suponía que no volverías hasta dos meses más...- Comento evitando su pregunta, aún no creo lo que veo

-¿Sabías qué antes de desarmar una pistola debes revisar la recamara?-

(...)

Con torpeza bajo las escaleras hasta el subterráneo con Jimin en brazos, ambos aún llorando de alegría

-No se vayan a caer- Uno de los chicos grita preocupado, seguramente Jin o Rapmon

Llegando al piso de abajo, uno con fuerza mis labios a los suyos, dejándolo de pie en el suelo

-Te extrañe tanto...-Hablo entre el beso que se torna salado

-Yo a ti- Sus manos rodean mi cuello y desordenan mi cabello. Con la zurda sujeto su cintura apegándolo más a mi cuerpo en lo que con la diestra giro el pomo de la puerta, me separo de él para así permitirle la entrada a la habitación

-...Todo sigue igual- Sus ojos analizan cada rincón de la habitación hasta llegar al escritorio donde se detiene –Casi todo- El montón de hojas arrugadas no son agradables a la vista –¡Holly!- Chilla emocionado al ver al perro dormir bajo la mesa. Abrazo a Park por la espalda antes de que despierte a Min, con curiosidad subo con las yemas de mis dedos por el interior de su camiseta, provocando en él un suave suspiro

-Ya limpiaré eso...- Beso su cuello, pero me detengo ante la expresión de asco en su rostro -¿Sucede algo?-

-Esas cenizas- Habla apuntando el cenicero frente a nosotros en una esquina del escritorio –Min Yoongi, ¿Estuviste fumando?- Jimin se voltea hacia mí con el ceño fruncido

-Prometo dejarlo, en serio- Hablo escondiéndome en su cuello, sus manos alzan me sacan del escondite

-Feliz aniversario atrasado, amor~- Habla con dulzura cambiando el tema. Su boca busca nuevamente la mía, lo beso con necesidad

-Deja que te bese por todos los meses que no lo he hecho- Vuelvo a besarlo mientras con mis manos alzo su camiseta, rozando con los dedos su marcado abdomen, mis manos heladas hacen que el suelte un par de jadeos, los que permiten el acceso de mi lengua intensificando así el beso, los dedos de Park se entrelazan en mi nuca para luego dar por terminado el contacto de nuestros labios

-Debes afeitarte- Me ordena con un puchero, Dios como extrañaba esa expresión

-Eso es lo de menos ahora, Park- Digo casi sin aire para luego succionar su labio inferior.