Illusion (Camren) [EDITANDO]

Capítulo 8

-¡Auch! ¡Eso duele!.- Me quejé al sentir el escozor que me provocaba la gasa con alcohol que la morena presionaba sobre mi herida.

-Lo siento.- Se disculpó soplando cerca de mi labio para poder disminuir el dolor- Ya está.

-Gracias, pero no era necesario que lo hicieras.

-Te negaste a que curase aquel ojo morado ayer luego de tu pelea. Es hora de que dejes de ser tan testaruda y me permitas ayudarte.- Murmuró con el ceño ligeramente fruncido lo cual me pareció adorable al instante.

-Eres demasiado buena y hermosa como para estar con un idiota como él Camila.- Dije y ella desvío la mirada de inmediato recogiendo todo lo que había utilizado para regresarlo a su lugar.

-Será mejor que acomode todo esto o Blair se enfadará con nosotras.- Hizo referencia a la enfermera ausente en ese momento intentando evadir el tema que le había impuesto indirectamente.

-¿Por qué evades hablar acerca de esto?.- Ahora era yo la que fruncía el ceño con confusión.

-No es algo que te incumba.- Intentó no ser grosera pero no le funcionó del todo bien entonces me pidió disculpas con una fugaz mirada.

-Pues si lo hace. Después de todo le di una paliza en tu defensa.

-No te pedí que lo hicieras.- Se justificó.

-No. Pero quería hacerlo y lo hice con mucho gusto.- Sonreí arrepintiéndome al instante en que mi labio ardió otra vez y maldiciendo entre dientes- No tiene derecho a poner sus asquerosas manos sobre ni a tratarte como un objeto.

-Ha sido así siempre.- Susurró acomodando un mechón de cabello tras su oreja.

-Pero no tiene que serlo.- Mi mano viajó a su mentón obligándola a mirarme a los ojos.

Los suyos estaban cubiertos por una fina capa cristalina y eso estrujó un poco mi corazón. Mi mirada cayó en su boca al igual que la suya en la mía y luego de relameremos los labios otro par de veces terminé con la poca distancia que nos separaba y uní nuestras bocas. Dejó escapar un suspiro seguido de un gruñido entre dientes y reí imitándola débilmente. Su lengua encontró la mía invitándola a bailar al ritmo de su propio compás con una dulce sensación que me entumeció los labios. Tomé su rostro entre mis manos intensificando el beso volviéndolo más profundo y atrevido.

-No creo que esto sea bueno.- Susurró sobre mis labios al separarnos lentamente- Estamos bien siendo sólo amigas.

-No lo creo. Yo quiero ser más que eso.- Me quejé frunciendo ligeramente el ceño.

-Debo irme. Tengo clases y tú también.

-No. Me iré para poder entrenar, mi padre me ayudará con eso. La próxima pelea es en unos días.

-¡Eso es genial!

-¿Estarás ahí?.- Pregunté de inmediato con la esperanza de que dijese que sí.

-Lo averiguarás buscándome en las gradas.- Sin decir nada más y con una hermosa sonrisa en su rostro, dejó la enfermería con paso rápido.

¿Qué estás haciendo conmigo Camila Cabello?

...

-¡Tú!.- El grito de Dinah resonó en toda la sala del departamento- ¡No puedo creer que hicieras eso!

-¿Qué demonios?.- Pregunté con el ceño fruncido en cuanto tuve a la hormonal embarazada señalándome acusadoramente.

-¡Te dije que no debías jugar tus cartas con Mila! ¡Sólo estás dándole problemas!.- Gruñó.