«Guillermo Díaz un muchacho de 16 años tierno, lindo, amable y educado pero con una pinta muy provocadora.
Samuel De Luque un señor de 23 años apuesto, con un cuerpo de dioses y una sonrisa para morirse pero muy posesivo con lo que le pertenece.»
¿...
-Guille, bebé, despierta, tienes que ir a la escuela.
-Mgh, 5 minutos más.
-Ya levantaré Guille, se te va a hacer tarde.
Yo me removí de la cama y me estire completamente, abrí mis ojos y ahí vi a Samuel abrichandoce los botones de las muñecas, yo Sonreí al verlo al igual que el.
-Buenos días amor.-Dijo con su hermosa voz.
-Buenos días.-Dije y me levante de la cama para darle un beso.
Cuando iba directo al baño recibí una nalgada de Samuel, lo que me hizo sobresaltarme. Entre al baño y cerré la puerta, me mire al espejo y vi que estaba muy marcado, muchos chupetones y mordidas en mi cuello que asta sentí pena por mi. Me metí a la ducha de agua tibia y disfrute de esta. Salí y me cambie con lo que Samuel me había comprado, ya que hacia algo de frío esto sería perfecto.
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Salí a la cocina con mi mochila ya puesta, me encontré a Samuel tomando café el cual me dio una sonrisa.
-¿Ya nos vamos?.-pregunte.
-¿No vas a comer algo?.
-Es temprano, así que le diré a Melo que vallamos a una cafetería cerca de la escuela.
-Esta bien, pero antes...-Sacó su cartera de su sacó negro y de ahí sacó 100€ y me los entregó.-Invitala a desayunar, eso me parece mejor.
-Samuel, no, esta bien, yo tengo dinero no te preocupes, yo...-me interrumpió.
-Shhh, calla Guillermo, no te estoy preguntando si los quieres o no, yo te los estoy dando porque quiero.-me dio un beso en los labios.-Y a parte, tu no tienes ni 10€ en tu cartera.
Reí por su comentario, tenía razón, no tenía ni 10€.
-Gracias Samuel, te amo.
-No agradezcas pequeño, yo también te amo.
Y así salimos directo a mi instituto.
[...]
Ya estaba en la cafetería con Melo comiendo, ella me platicaba de cualquier tema, las risas invadían nuestro ambiente. Al terminar nos fuimos directo al instituto y entramos a clase.
Estaba escribiendo lo que dictaba el profesor asta que sentí una bolita de papel caer en mi brazo, mire el papelito y después a Melo que ella seguía en su rollo, yo tome el papelito y lo habri, en el decía:
"Puto el que lo lea:v"
Votee a ver a Melo de nuevo la cual se están riendo por debajo de su suéter, yo la mire de mala manera y ella se descojonaba, yo evite sonreír, es una tonta.
