310
Diario de Raúl
Cronos corría sobre su hexágono, flanqueado por Rodrigo y Gunter. Nikola daba golpes y patadas, la estrella de varias puntas que formó, y la esfera de luz que la rodeaba, se hizo tan visible que incluso Graham llegó a verla.
—Estoy muy orgulloso de ti, Nicola. Sin duda eras el elegido para ser mi alumno —dijo Graham.
Eva y Toshiro protegían la esfera de luz en todo momento, observando a izquierda y derecha, elevando los brazos a la altura de los hombros, creando una barrera energética para que Nicola haga tranquilo su trabajo. Milena, equidistante a Nikola y al hexágono que formaba Cronos, dirigía a los colibríes sobre la esfera que se formaba. Esta vez, Sodio estaba cerca. Parecía que su sola presencia era capaz de ahuyentar a cualquier colibrí contrario. Todo estaba saliendo tan bien que la doctora Ruth no pudo mantener la calma y le pidió un cigarrillo a Román, que se lo negó diciendo: "Prometí ayudarla a dejar la nicotina".
Alana y Alanis caminaban dentro y fuera del hexágono, revisando los movimientos energéticos.
—¡Ya es hora de activar el cubo 22! —dijo Alana—. Todo está en una armonía perfecta.
—¡Es hora de sentarse y girar el cubo 22! —dijo Alanis.
Nikola, siempre rodeado de un fuerte halo de luz, creado por él mismo, movió varios niveles del cubo 22.
—¿Esta vez sí lo logramos, no? —preguntó Nadenka a Teseo. Ambos observaban todo desde lo alto de un edificio. Era la indicación de Marco pues desde cierta altura era posible ver cosas que desde el suelo no se mostraban.
—Sí, es claro que lo hemos logrado —dijo Teseo.
—Me apena no poder ayudarlos, me siento algo inútil —dijo Nadenka.
—Descuida, quizás tu parte dentro de la estructura es tan importante que es mejor que descanses esta vez.
Allá abajo todos levantaron los brazos en señal de triunfo. Los colibríes de Milena volvieron a su jaula, Eva acarició la cabeza de Sodio. Marco, a la manera de un entrenador deportivo, con las manos hacia atrás, se limitó a asentir con la cabeza, serio. Cronos seguía corriendo, pero esta vez hacia cualquier parte, como si hubiera metido la canasta ganadora de la final del campeonato mundial de basket, en el último segundo.
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Diario de Raúl
Hicieron el mismo ejercicio, pero esta vez, encima de la cancha abandonada de Óbninsk. Después de que Nikola activara la esfera con sus movimientos de Wing Chun, y luego, girara el cubo 22, Alanis y Alana vieron algo impresionante: miles de espíritus, miles de caras diferentes, todos saliendo disparados, disolviéndose en el aire, libres.—Sus espíritus guardan información de la última materia que habitaron, es lo que proyectan apenas son libres —le dijo una sorprendida Alana a una Alanis que observaba con la boca abierta y los ojos llenos de asombro el espectáculo.
Los otros maestros del color solo podían sentir las vibraciones de esos espíritus, como fuerzas invisibles que los traspasaban entre las costillas. Tenían el ímpetu de varios ejércitos que escapaban hacia su liberación.
***
Ahora estoy viendo a Milena escribir en su diario...
"Después de varios sueños recurrentes con Reynolds, decidí contárselos a Marco, que no demoró en interpretar ese patrón.
'Es simple, tienes que ir a la casa de Gertrudis, y llevarte al gato. Ahora toca ir al sótano de la casa abandonada. Viajamos en tres días. Debes apresurarte'.
No tenía cómo "robármelo". Además, no le haría algo así a la señora Gertrudis, se trataba de su gato favorito".
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FANFICTION - La vida de Horacio - II
Ficção CientíficaEste es un libro (no oficial del mundo de LVDH) sobre lo que pasa con la misión de los niños X del 2015