Capítulo 7| Materialista, interesada. Lo tuyo es ruba, dinero y fama.

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ANTES.

¿Qué dices que dijiste?

Abrí los ojos como si hubiera visto un fantasma con su mascota paseando por la calle. No lo entiendo, no entiendo nada. ¿Se habrán peleado? Troy siempre parece serio cuando está con Emma, no sé cómo será cuando están solos o sin compañía.
¿La ayudaré? Ella no es mí amiga, quede inconsciente indirectamente solo por ella. Troy es un amigo que acabo de conocer, y no sé porqué me está trayendo tantas cosas a mi vida, aunque sean pequeñas las trae. No quiero que él rompa una relación por mi culpa, no quiero que otra persona rompa su corazón y yo ser cómplice del crimen cometido, es un pecado. Pero creo que necesito también escuchar la otra cara de la historia.

—Emma... Cálmate, vamos a una cafetería y te tomas un chocolate caliente y me explicas, ¿Si?—quiero que se calme y que me explique todo desde principio hasta el final. Mientras que le digo todo esto le sobo los brazos de arriba hacia abajo para que se le quite el estrés y la impotencia.

Todo el camino transcurrió en un soberano silencio, me coloqué el suéter ya que empezaba a hacer frío y metí mis manos en los bolsillos, la veo de reojo de vez en cuando y percibo que está pensando el millones de cosas a la vez, está asustada, pensativa, triste pero a la vez con impotencia y rabia, de seguro lo que le pasó fue algo grave porque quiere acudir a mí y más, que quiere terminar su relación con Troy.

Estás entre la espada y la pared.
O en tu cabecita sería entre el veneno de Alicia en el país de las maravillas y una pared de caramelos.

Llegamos a la cafetería Stich's. Es muy moderna pero a la vez tiene un toque vintage que se lo da las mesas de madera clara y la decoración, me gusta mucho.

Nos sentamos en una mesa de afuera, una de las cosas muy bonitas de este local es que puedes ver toda la ciudad que está al otro lado del pueblo, es como si habláramos de New York y por una separación viniera algo totalmente pintoresco y con pocas personas, pero igual tiene un toque hermoso en su forma de ser. Emma se quedó impactada con la vista cuando entró ala terraza—que más parece un balcón—del local, se nota que no había venido aquí antes.

—Es hermoso.—dije centrándome en la ciudad toda iluminada con minúsculas luces que hacían toda la magia. Me senté y ella también.

Esperé unos segundos hasta que con un poco de valor decidió hablar y expresarse.

—No me tienes que ayudar literalmente.—me aclara y siento como si me quitaran un microondas de encima.—Pero, solo quiero terminar con él, y quiero que tú seas la primera en saberlo.

—¿Por qué yo?

—No puedo contestar todas tus dudas. Porque si yo abro la boca, tu vida se esfuma así.—hace un chasquido con los dedos.

—¿Ah? ¿De qué estás hablando?

—Muchas dudas, pocas respuestas. Solo quiero una cosa.—asiento con la vista.—No olvides perdonar, hay veces que solo son sentimientos encontrados y... Te siguen queriendo. Suerte, va a ser  duro.—con esto dicho y dejándome confundida se levantó de la mesa y se fue de la cafetería, ni siquiera me dio tiempo para pedir nuestras órdenes. ¿Por qué todos me dejan confundida y con preguntas que ni siquiera se dignan a respondérmelas? Primero Mason y después Emma, todo esto se ha vuelto un poco loco, las cosas han cambiado y todo por... desde que llegó Troy, ¿Será él el causante de todo esto? Si lo analizamos Mason jamás se quiso involucrar en la casa que siempre mencionaba yo cuando tenía un poco de curiosidad, en la casa de Troy. Emma es la novia de Troy, es obvio que en las relaciones hay problemas, todos lo saben, pero ¿Por qué repentinamente a mí? ¿No pudo pedírselo a una de sus amigas o amigos? Como dije antes no pienso meterme en sus asuntos, prefiero que como pareja los resuelvan ellos en su sana paz y convivencia, bueno, sinceramente no creo que en sus discusiones halla una sana paz, pero al menos creo que tienen que intentarlo. Sinceramente no me gustaría ver a ese chico de los ojos claros triste ni a esa chica de cabello negro deprimida, sé que no nos llevamos del todo bien, pero querer ver a las personas sufrir pienso que es algo cruel e inmoral, por lo menos de mi parte.

La Otra Cara del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora