In bloom

Pequeños detalles

Prompt: 096. Dulce

Rating: K+

Extensión: 395 palabras

Advertencia: Gen, fluff, siblings love.

Disclaimer: Bleach es propiedad de Tite Kubo.

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Amo la idea de que nada es obligado, que el amor de los demás, su tiempo, su atención, son regalos que se deben merecer.

Federico Moccia

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Después de haber buscado con avidez en las mejores tiendas de libros de Karakura, Rukia consiguió el suplemento de recetas que tanto buscaba: "Cómo preparar huevos de chocolate".

Se había enterado por Yasutora que en Occidente era un clásico obsequiar en cierta fecha conmemorativa los famosos huevos de Pascuas de chocolate. No estaba al tanto de algunos detalles históricos, pero sí sabía cuándo se celebraba aquella tradición. Cuando llegó la fecha, Rukia no dudó en buscar la manera de preparar sus propios huevos y obsequiarle uno a su hermano.

Tenía los ingredientes dispuestos sobre la mesada y el suplemento de recetas en la mano. Rukia puso todo su empeño para trabajar el tan delicioso y delicado chocolate en su punto justo. También hizo una pasta cremosa y colorida con mucho cuidado, la cual habría de colocar en los bordes del huevo más tarde. Con premura, volcó la preparación sobre los moldes descartables, cortesía de Urahara, y procedió a dejarlos enfriar durante unos cuantos minutos. Apenas hubo concluído la espera, Rukia unió las dos partes del huevo y las selló con la pasta, no sin antes poner confites de colores adentro.

El día de Pascuas, un fresco y soleado domingo primaveral, Byakuya había encontrado en su bandeja de desayuno un extraño paquete. Cuando notó que había una tarjeta firmada y dibujada por su hermana menor lo abrió con curiosidad. El dulce aroma del chocolate lo envolvió rápidamente, confiriéndole a aquella mañana un agradable sentimiento familiar.

Byakuya no tardó en inferir que el huevo se trataba de una hechura de los humanos vivos, ya que nunca los había visto en la Sociedad de Almas, pero tampoco pudo negar que era un invento ingenioso y que, sobre todo, tenía buen sabor. Lo que sí logró sorprenderlo fue hallar dentro del huevo mismo una conocida figura en miniatura, el Embajador Alga, hecha también con chocolate y pasta de merengue. Byakuya se dio cuenta de que aquel regalo había sido preparado nada más ni nada menos que con las propias manos de Rukia y un cándido sentimiento fraternal lo asaltó.

Alzó la mirada al cielo apacible y se le ocurrió que quizás, el hecho de que su hermana aprendiera algunas cosas del mundo de los vivos no fuera tan alarmante. Podía sacar provecho de novedades como aquella, Byakuya pensó en sugerirle a Rukia que preparara huevos de chocolate más seguido.