XVIII.- Esperaras por mi... ¿Verdad?

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Apenas entraron al departamento de Sungjong y Sungyeol ya estaba perdido comiéndose a besos al menor, había estado demasiado frustrado y definitivamente le urgia algo de acción, mantenía sus ojos cerrados para dejar que sus demás sentidos se volvieran locos con cada caricia, dejando que Sungjong lo acorralara contra la pared para seguir besándose y tomar el control, suspiros y jadeos eran los únicos que hacían sonidos en aquella habitación. Sungyeol en serio estaba disfrutando aquello pero la mente es terca y cuando uno más quiere ser libre juega mal haciendo que en ese momento la imagen de alguien más llenará por completo sus pensamientos

Sunggyu...

Sabía que lo deseaba, que lo amaba y no podía terminar de creer que ni en esos momentos pudiese dejarse llevar.

Sungjong pegado a su cuello succionando suavemente su piel, dejando pequeñas marcas que sabría que serían evidencia para alguna burla pero debía detenerlo. No sería justo para nadie que se le escapará el nombre equivocado.
Apartó lentamente al menor viendo en sus ojos la pasión impresa del momento, tomo su cabeza, acaricio su cabello y se acercó a su oído.

-No puedo hacerlo, lo siento- susurro Sungyeol tomando a Sungjong entre sus brazos cosa que no le hizo mucha gracia como podía besarlo así y después decirle que no pasaría nada.
El mayor se apartó con suavidad, tomo su chaqueta que en algún momento terminó en el piso y camino decidido a la puerta hasta que la cálida mano de Sungjong lo detuvo.

-Y que? Eso es todo?, me vas a dejar aquí sólo y te irás?, Sungyeol vamos quédate- dijo jalando un poco al alto hacia su cuerpo.

-Lo siento Sungjong pero yo...- un beso sello sus labios y corto sus argumentos.

-No digas nada, ambos estamos vulnerables ahora y quizás sólo nos dejamos llevar demasiado, quédate veamos una película y duerme aquí, prometo portarme bien.- dijo el menor guiñando un ojo -Además la soledad a nadie le hace bien- tiro un poco más de Sungyeol quien comenzaba a ceder, no sabía si todo eso estaría bien pero tenía razón no quería estar sólo en ese momento.

Sungjong se dirigió a la cocina por algunas palomitas o algo para calmar su ansiedad y ver la televisión mientras Sungyeol tomaba asiento en uno de los sillones en la sala admirando tranquilamente la decoración que no había visto de primera instancia, los colores en el departamento eran muy claros y justo en la mesita junto a él había algunos portaretratos con fotografías pero una en especial llamo su atención, Sungjong aparecía sonriente abrazado a la espalda de un chico alto de cabello de negro y podía jurar que tenía el rostro más bello que haya visto jamás, mismo rostro que recordaba haberlo visto antes durante esa fiesta que ofreció Hoya para celebrar su cumpleaños, recordaba muy poco puesto que se había puesto bastante borracho pero estaba seguro que era ese chico no creía posible que hubiera 2 iguales.
¿A caso Sungjong sólo era quien lo uniría con esa aventura que desapareció después de aquella noche?

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En serio nos veremos esta noche? 😨😱😵😍

Era el quinto mensaje que Woohyun le mandaba a Sunggyu para confirmar lo que había le dicho esa mañana en su apartamento, no sabía como se había atrevido atrevido a decir tal cosa pero ahora no encontraba como salir de eso, le había asegurado que pasaría esa noche, quizá ya estando ahí encontraría la forma de safarse del asunto, de verdad no se sentía listo y por el simple hecho de ser Woohyun quería disfrutarlo, sabía que tenía que superarlo probablemente ya hora de ver a un profesional o algo así pero mientras eso pasaba debía evitar que pasará algo.
Guardo su celular aún sin responder ningún mensaje y se dedicó a trabajar ya pensaría mejor las cosas a la hora de comer.

UNINTENDED LOVEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora