Epílogo.

3.6K 487 157
                                    

-Hola pequeño...- Rápidamente me puse de pie, con movimientos realmente torpes a causa del pánico y un repentino sentimiento, muy indescriptible.

-N-No... Esto... N-No- Quería tratar de articular palabra pero no podía, la situación era tan surrealista que ya no podía actuar ni pensar objetivamente.

Mis pies por si solos se empezaron a abrir camino hacia él, su sonrisa nunca se desvaneció y podía ahora verlo mejor en mi estado de demencia temporal, estaba tan alto, pensaba desde la última vez que lo vi, que era imposible que siguiera creciendo, pero ahí estaba, aún más alto que hace cinco años, su cabello, era diferente, ya no tenía ese peinado para arriba que se hacía en la escuela y su color ahora era un lindo avellana.

Sus hoyuelos seguían marcándose, no sé si será el tiempo, pero los veía ahora con mayor intensidad, como si ellos también me estuvieran saludando, no voy a obviar el hecho de que traía gafas, ¿Estará mal de la vista?

Dejando todos mis pensamientos hundirse en las profundidades de mi ser, me di cuenta que ya estaba frente a él, por acto reflejo coloqué ambas de mis manos en su cara, a cada lado de sus mejillas, mirándolo como si fuera una obra de arte... No, él es una obra de arte.

-¿E-Eres... real? ¿No estoy soñando?- Mis dedos acariciando con cierto recelo sus mejillas- ¿H-Hoseok?... ¿H-Hobi?- Le dije instantáneamente riendo, sentí la calidez de sus manos en las mías, que aún seguían escudriñando su rostro.

-Soy yo, Taehyung- Habló tan débilmente, más parecía un susurro lleno de agonía- Soy yo...- Repitió ahora agachando la mirada y con ello aguantando su frente en mi hombro.

Estábamos en silencio, la oscuridad de la noche nos envolvía, las estrellas y la luna mirándonos sigilosamente en aquel encuentro inesperado, cargado de sentimiento, gestos o incluso palabras aun no dichas, pero que moríamos por decir. Sin dudarlo y dejando atrás mis inhibiciones envolví a Hoseok en un abrazo, uno que albergaba toda la calidad de hace cinco años, un abrazo infinito que prometía mucho, pero más que prometer, suplicaba a viva voz un; "No me abandones", "No de nuevo"

No puedo decir con certeza cuanto tiempo estuvimos así, no me quejo de todas formas, no había un porque, no había un término, no era un abrazo que tuviera fecha de caducidad, era un abrazo puro, sincero y de corazón, no era prohibido ni mucho menos incomodo, éramos dos personas rescontrándose después del rechazo.

-El calor de tu cuerpo es el mismo...- Dijo débilmente aún unido a mí en el abrazo- Tu aroma...- Ahora era yo quien inesperadamente y por pura curiosidad rompía nuestra conexión, pero era la sorpresa ¿Su acento había cambiado?- Incluso tú corazón...- Termino por decir, yo lo miraba atentamente, queriendo responderle- Late incluso más fuerte que antes- Su mirada era distante, avergonzada y melancólica.

-¿Por qué debería ser diferente?- Le dije con un sentimiento de nostalgia.

-No lo sé... Ha pasado tiempo y...- Replicó sin terminar la oración, aún un poco débil.

En un pequeño movimiento de él, pude ver un leve destello, quizás fue el reflejo de la luz a nuestro alrededor, pero vi perfectamente el colgante en su cuello, con mi mano lo toqué para asegurarme.

-¿C-Como es que...?- Abrí mis ojos tan grande, reconocía ese colgante.

-Me lo dió alguien muy importante para mí- Abrí mis ojos con gran asombro.

-Pero si eso lo dejé en la caja...- Él sonrió un poco avergonzado.

-No pude aguantar y lo saqué- Pude ver como ahora caminaba, para luego sentarse justo al frente del lugar donde estaba nuestra capsula.

Friends Don't Lie  || «Hopev»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora