—¿Cómo que la policía está buscándome?— Preguntó algo sorprendido, pero de echo, no era nada nuevo para él. Ya se había metido en bastantes líos antes.
—Si… debes salir de tu casa ahora mismo, te encontrarán ahí— Advirtió Louis.
—Pero… ¿Pero porqué?— Aún no recordaba haberse metido en algún problema desde hacía casi dos semanas.
—¿Cómo que porqué Styles? ¿Qué ya olvidaste la tremenda paliza que le diste a Liam? Me ha llamado Chaz… dijo que Liam está en el hospital desde esa noche. Él está… en coma— Dijo Louis con voz pausada. Harry sintió una punzada en el corazón. ¿En coma? Bien, ahora sí estaba metido en un problema grande. El miedo lo recorrió.
—¿En coma? Lo merece, lo que le hizo a mi hermana no tiene perdón— Dijo Harry sin mostrarse débil.
—¡Vamos, REACCIONA STYLES! La policía está buscando al culpable de esto y ese eres tú. Lo has dejado inmóvil, le diste un golpe en la nuca que provocó su coma. Mejor deberías rezar porque despierte. Además, podrías ir a la cárcel, ¿Lo sabes?— Dijo exhaltado Louis, le desesperaba que Harry no le hiciera caso, era su amigo y no quería verlo tras las rejas.
—Mierda. ¿Y qué hago Louis? ¡De cualquier forma el tuvo la culpa también! El violó a Amber, el único que debe ir a la cárcel es él no yo— Se defendió.
—El irá a la cárcel por violación… pero eso sólo si vive para contarlo, idiota— Esta vez, Louis estaba enojado. Y mucho.
—Cálmate viejo…— Pidió Harry.
—¿Qué me calme? ¿Cómo mierda quieres que me calme? ¡Te estoy diciendo que podrías ir a la cárcel y parece que no te importa! Es hora de que apartes tu actitud de querer hacerte el ‘rudo’ y reacciones ya. Si lo matas… ¿Qué pasará eh? De verdad, no sé como siempre quiero ayudarte y parece que hablo con la pared. Me avisas cuando quieras hablar, pero recuerda que si es desde la cárcel, yo no estaré ahí para ayudarte— Gritó Louis. Valla, Harry sí que se sintió mal con las palabras de su amigo… mejor dicho, su mejor amigo.
—Vamos, Louis… ¿Qué estás diciendo? Somos amigos hace 5 años… ¿Me dejarás de hablar?— Preguntó Harry algo preocupado.
—Ya no pienso ayudarte más, ya he hecho demasiado por ti, te he sacado de todos tus jodidos problemas, pero ya me arté de tu actitud Styles. Suerte con la ley— Y colgó.
Harry sintió que un dolor se acumulaba en su pecho. ¿Por qué Louis había cambiado así con el? Bien, no debía por qué preguntárselo. Pero valla que le dolió… su mejor amigo tenía razón. Debía agradecerle a Louis todas las veces que éste lo sacó de broncas, llevándolo siempre por el buen camino. Pero nunca le había agradecido. Se preocupaba más por si mismo que por los que le rodean. Ahora sí que estaba arrepentido, Louis también había estado con él ofreciéndole una mano de apoyo cuando su padre y su hermano se fueron a la guerra y él estaba afectado. Dios… ahora empezó a recordar todo lo que Louis había hecho por él y valla que era una lista enorme.
«Perfecto Harry, ya no sólo es Zac el problema. Si no todo un ejército de policías buscándote. Y además, perdiste a tu mejor amigo, tu único apoyo. Bravo, bravo» se dijo sarcástico.
Supuso que tendría que salir de su casa, tal como Louis le advirtió. Así que tomó una pequeña mochila y guardó solo un poco de ropa. Tomó sus llaves y salió de ahí. Subió a su moto y se dirigió al hotel más cercano, ahí pasaría la noche. No le avisaría a ______, no aún.
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—¡YA CAITLIN!— Gritó finalmente ______. Ésta empezó a reír sin parar.
—Vamos… ¡TE SONROJASTE!— Gritó emocionada.
—Esta bien, si, me dijo te quiero y le dije yo también. ¡LO ACEPTO, FUE HERMOSO! ¿Contenta?— Dijo aún más ruborizada. Caitlin cantó un ‘aw’.
—Él me agrada, es sólo eso… aunque no es mucho tu tipo, ya sabes, el es ‘rudo’, pero si llega a lastimarte puedo ser más ruda que él— Dijo haciendo un gesto de burla. ______ rió.
—Losé… pero es increíble. No creo que eso sea necesario, Cait— Dijo alegre. De pronto, recordó que debía llamarle a Harry. Ya eran las 10 de la noche. Tomó su celular y salió del cuarto.
—Espérame, lo llamaré—.
Caitlin le guiñó un ojo. Ella rió y salió, caminó hasta la sala y se sentó ahí. Por fin contestó.
—¿Hola?— Susurró Harry.
—Hola— Respondió ella.
—¡Ah! Cariño… creí que no llamarías— Dijo él.
—Prometí que lo haría, ya me dormiré… así que buenas noches—.
—Oye… espera. ¿Podrías arreglarte mañana? Te llevaré a un lugar— Dijo Harry alegre.
—¿Uso vestido o a qué te refieres?— Preguntó sorprendida.
—Usa lo que quieras, todo es perfecto en ti. Pasaré por ti a las 7— Avisó. Ella sonrió inconcientemente, se sintió muy emocionada por dentro.
—Bien… me agrada. Estaré lista— Confirmó feliz.
—De acuerdo… te veré mañana, que duermas bien… te quiero— Dijo con toda la seguridad del mundo. Le fue fácil decirlo por segunda vez, no tan complicado como el pensó.
—Igual… igual yo— Dijo trabándose. Le costaba… sí. Pero lo sentía a todo pulmón.
Ambos colgaron al mismo tiempo.
