Capitulo 10 ✨

5.6K 335 7
                                    

Catherin.

Mi mente no puede dejar de repetir ese beso con Dereck una y otra vez. Pues después de que me dejara en mi departamento sin poder llevar a cabo nuestro plan de películas y palomitas debido a que su madre lo necesitaba en casa, se había despedido con un simple beso en la mejilla, pero definitivamente algo había cambiado.

Mientras desayuno sigo pensando en ese momento, pero algo más me invade, ¿Cómo debía actuar ahora con él? ¿Debía seguir como si nada hubiese pasado? ¿O acaso algo cambiaría entre nosotros?

Con esas preguntas en mi cabeza y el nerviosismo de saber qué tendría que verlo nuevamente después de lo que había pasado, me iba matando lentamente, y mientras más se acercaba la hora de ir a clases, era peor.

Después de lo que había pasado, no podía dar marcha atrás. Si de cierta manera sabía que Dereck me atraía, ahora podía realmente confirmar y asegurar que Dereck me gustaba.

Cuando me doy cuenta de que falta muy poco tiempo para entrar a clases, corro a hacer lo que me falta y salgo rápidamente del departamento.

Voy casi corriendo a la preparatoria tratando de llegar a tiempo. Reviso la hora y para mi desgracia falta un minuto para mi primer clase, lo que significa que tengo que correr más a prisa para que con suerte me dejen pasar al aula.

Dereck me había enviado un mensaje ayer por la noche diciendo que no podría pasar por mí hoy, y esa era la razón por la que ahora venía corriendo sola. Aunque de cierta manera agradecía que fuera así, porque retrasaba más el momento en que tuviera que verlo frente a frente.

Entro corriendo por los pasillos vacíos de la preparatoria, y al llegar a la esquina de uno de ellos choco contra alguien cayendo al piso.

—Maldición— solté, sin mirar al causante de mi caída.

—Es tu culpa por aparecer de la nada— le escucho decir de manera burlona.

Carajo, lo que me faltaba. Conocía esa voz y la conocía perfectamente.

Levanto la mirada solo para encontrarme con quién ya sabía que me había chocado. Genial.

—Dereck— dije desde el suelo.

Evitando a toda costa comportarme de manera extraña, trato de calmar mis nervios.

— ¿Vas a quedarte sentada ahí el resto del día?— cuestiona sonriente.

Me ofrece su mano para levantarme, y  río nerviosa antes de tomarla.

—Claro que no.

Dereck recoge mis cosas y me las entrega.

— Gracias.

— ¿Sabes que es lamentable? Que hayas venido tan apresurada y que el profesor no se presentara— sonríe divertido.

¿Ya había mencionado que Dereck era realmente atractivo? bueno, pues cuando sonreía lo era aún más. Bien, ¿A quién quiero engañar? Dereck es atractivo de todas las maneras posibles.

— Tal vez necesito pasar por tí para que seas puntual—continúa diciendo.

Lo observo detenidamente dándome cuenta realmente de todo lo que me provoca con su simple presencia.

— ¿Estás bien?— cuestiona mirándome—¿Vas a contestar a algo de lo que digo?— dice y reacciono.

— Sí estoy bien— le digo tratando de fingir normalidad— ¿Dices que el profesor no asistió?

Entrecierra sus ojos hacia mí antes de preguntar:

— ¿En qué estás pensando, Cath? Acabo de decirte que no, ¿Segura que estás bien?

— Sí, perdón. Estoy distraída— dije apenada.

— Descuida Cath.

—¿Y los chicos?— cuestione tratando de aligerar mi situación incómoda.

— Seguro andan por ahí. Se salieron en cuanto supieron que el profesor no asistiría— explica— Como sea, de todos modos me quedaría a esperar a que llegarás.

—Gracias.

— De nada.

El resto del día transcurre de lo más normal. Dereck no se comporta raro ni nada por el estilo, por el contrario, siguió comportándose igual que siempre y eso lo agradecía porque me hacía sentir tranquila. Incluso me había acompañado a casa como de costumbre, al salir de clases.

Cuando llegamos a mi departamento estuvo un rato y luego se marchó.

°°°

Los siguientes dos días transcurren de lo más normal, Dereck no saca como tema de conversación el beso y yo tampoco. Aunque como ya lo había dicho, algo había cambiado desde ese momento, y ahora siempre nos saludábamos o despediamos con un beso en la mejilla y nos tratabamos aún más apegados de lo que ya éramos.

Era sábado, pero Dereck había venido a mi departamento como últimamente lo hacía. Creo que no había día en que Dereck no pasará el rato aquí conmigo, ya fuera después de clases o en las tardes los fines de semana.

—¿Te veo mañana?— pregunta Dereck frente a la puerta de mi departamento listo para retirarse.

— Claro, ¿Qué haremos mañana?

Se encoge de hombros.

— Podríamos salir, a menos que quieras que nos quedemos y hagamos algo aquí.

— Creo que salir suena bien, ¿Algo en mente?

— De hecho sí, podríamos hacer un día "tipo campo"— dice haciendo comillas con los dedos en la última frase.

— Eso suena bien, ¿A qué hora sería?

Hace una mueca pensativo.

—¿Te parece si paso por tí a las once?—pregunta recargando su peso en uno de sus brazos apoyado en el umbral de la puerta.

Asentí.

— Me parece bien.

—Entonces, te veo mañana.

— Mañana— sonrío.

Se acerca a mi y deposita un beso no lento pero tampoco rápido en mi mejilla.

— Descansa, Cath— sonríe.

— Descansa, Dereck.


Intercambio Académico.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora