Gancho al corazón

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Sé que es tarde ya
para pedir perdón
sé que es tarde ya y lo siento
termina nuestro amor.

Si ya nada funciona contigo
el intento no va más allá
no me pidas dale tiempo al tiempo
no puedo esperar.

Si la culpa fue tuya o fue mía
el saberlo ya no servirá
no me pidas que sea tu amigo
te aseguro no funcionara.

Solo unos minutos te pido
voy a ahorrarte tener que explicar
diferencia entre novio y amigo
cuánto tiempo puede funcionar
y con vodka pretendo olvidarte
mis amigos y esta canción
porque se, que siempre,
que siempre es amargo el adiós


Había recibido un mensaje de Jesús con el nombre de esa canción y al escucharla pensé bien es hora de dejar las peleas y hacer un nuevo plan, me fui a la cama y al siguiente día cuando desperté tenía las energías para luchar contra toda una ciudad si era necesario, ya tenía el plan E para resolver lo que estaba pasando en nuestra relación. Luego de las primeras horas de clases estábamos en el recreo y se acercó a mí.

-¿Hablamos?

-Si

-mira como la canción de ayer lo decía, no tiene caso que busquemos culpables - sentía que se avecinaba algo horrible y cada palabra que decía era como si estuvieran sujetándome por los brazos con tanta fuerza que aunque yo intentara soltarme solo lograba lastimar mis brazos pero al frente de mi había alguien más lanzando golpes directamente a mi estómago, algo así como ganchos - los dos hemos hecho cosas que nos han herido y no deberíamos seguir lastimándonos- era esa una forma de arreglar nuestra relación o más bien se avecinaba, esa era la forma de dejar de lastimarnos para él, yo solo necesitaba que comenzara a luchar por mí. Seguíamos caminando.

-Okay, ¿pero es lo que ambos queremos?

-Yo si - no lo pensó, no tardo ni un segundo no responderme, mi mente mi corazón solo por favor no, gritaban no- Igual yo- de que demonios había servido que yo preguntara si lo queríamos si iba a terminar cediendo, seguíamos caminando, rodeamos toda la cancha, llego uno de sus amigos y comenzó a conversar con él, ninguno de los dos me dirigía la palabra así que solo seguí mi impulso, mi cerebro se apagó y dejo de darme ordenes, solo quedábamos mi cuerpo y yo, comencé a caminar, no sabía a donde ir, llegue con Héctor y Laura y mi cerebro volvió para decirme no aquí no, no arruines este día perfecto para ellos, seguí caminando, esta vez vi a Mich solo llegue ahí y comencé a llorar, ella aun no me veía hasta que me recargue en su espalda, volteo y me vio llorando, me abrazo de alguna forma estar en sus brazos hizo que mi dolor brotara y solo logre llorar más, me dolía más.

Lili una de sus mejores amigas vio como las lágrimas empapaban mi rostro, comenzó a alejarse iba en su dirección, Jesús iba con sus amigos caminando, Lili iba tras él, Mich me soltó y comenzó a ir detrás de Lili para detenerla, yo me quede parada, luego mi cuerpo me llevo tras Mich las alcance pero jamás entendí que era eso que estaba pasando. El recreo termino Lau vio mis lágrimas cayendo y me abrazo, la deje y subí las escaleras para ir a clase. Mi profesora ya estaba en el salón junto con Sarai mi mejor amiga y Jenny su mejor amiga.

-¿Que paso? ¿A quién voy a reprobar?

- A nadie miss, solo no es nada- Jenny me veía y sabía lo que había pasado, la vi y me dio una mirada triste, pude ver cómo me decía " Lo siento" y realmente era honesta, Sarai me dio un abrazo corto y las tres nos sentamos, yo limpie mis lágrimas y continúe el día escolar, transcurrieron las horas y por fin salimos de clases.

Llegue a mi casa, subí las escaleras, cerré la puerta del cuarto, me tire a la cama tome una almohada, cubrí mi rostro y comencé a llorar, me quede arriba una hora llorando hasta que me resigne, abrí la puerta comencé a hacer tarea y se me paso toda la tarde, no me escribió, no le escribí, sentí su ausencia cada segundo de la tarde, llego la noche y volví a la cama de nuevo lloraba, lloraba y me odiaba por lo que había pasado, dolía y así me quede dormida. Al siguiente día me levante para ir a la escuela, me metí a la ducha, el agua estaba caliente, la sensación del choque del agua contra mi cuerpo era asombrosa, pero mi pecho dolía, brotaron lágrimas de mis ojos, caí de rodillas, puse mis manos en mi cara, lo amaba, solo necesitaba que él estuviera ahí, que él hubiera dado algo por mí. Me levante, debía seguir, cerré la llave de la regadera después de una larga ducha, me puse el uniforme, me agarre el cabello en una coleta y desperté a mi mamá, baje a desayunar, no tenía hambre, no quería nada. Llegue a la escuela y por alguna razón esperaba que todo fuera igual, él no estaba donde siempre, el simplemente no estaba.

Una semana después.

-¿Podemos hablar?

-sí, dime

- ya van a ser exámenes y esto no puede estar mal entre nosotros, habíamos prometido ser amigos, seámoslo

-Si está bien.

-Lao tenía razón, esperar una semana era mejor

-No comiences

- ¿A hacer qué?

- No lo se

-Ah? Ouh llegaron por mi bye.

-Bye

Se que habia pasado mucho tiempo desde la ultima vez que actualice pero habia estado arreglando cosillas y pues no queria escribir, no habia inspiracion y solo necesitaba mucho tiempo lejos de esto, pero estuve leyendo estos dias y me dije volvamos y pues aqui estoy, espero que les guste este capitulo y ustedes diganme que les parece en los comentarios.



Héroes al desastreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora