Hermanos ❀ HopeV - Hopemin

❀ Capítulo 18

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— ¡Escúchame! ¡Tan solo, escúchame! — suplicaba HoSeok.

— ¡Déjame en paz! — gritó JiMin a la vez que se detenía, tan solo para mirar de la peor manera a su todavía novio.

— No debiste hacerlo — musitó el mayor ante la mirada amenazante de su pareja.

— So... solo déjame en paz por hoy, HoSeok — esas palabras fueron duras y lo suficientemente neutras como para que HoSeok accediera a la petición.

No podía creer que de un momento de felicidad se podía pasar a un momento de enojo y tristeza. No quería creer que JiMin tenía la culpa, su corazón le decía que no la tenía, pero su mente decía que la única víctima ahí, era TaeHyung.

Se dirigió al mesón de la cocina y se sentó en una se las bancas de esta misma. Sus manos se colocaron en su cabeza en un modo de desesperación, desesperación por no saber qué es lo que sucedía verdaderamente en su noviazgo.

— ¿Te peleaste con JiMin? — esa suave y dulce voz que lo tranquilizaba todas las noches cuando apenas era un niño, lo sacaron de sus​ pensamientos. Su madre se encontraba con una sonrisa en su rostro y con sus brazos abiertos, en busca de un abrazo.

HoSeok no se negó a nada y se lanzó a los brazos de su madre, esta le sonrió y acarició sus cabellos.

— ¿Qué sucedió? — fue la pregunta más tranquila que pudo escuchar en toda la mañana.

Sentía que al estar entre los brazos de su madre todos los miedos se irían y serían reemplazados por un fuerte calmante. Sin embargo, no contestó nada, solo afianzó el abrazo.

— Es por el hermano de JiMin, ¿cierto? —

Y tal como un resorte, HoSeok saltó, se deshizo del abrazo y con los ojos ligeramente abiertos, miró a su madre. Ella le sonreía con tranquilidad, algo que no parecía transmitirle.

— ¿Có-cómo? ¿Tú... — iba a proseguir y preguntar por completo cómo fue que se enteró de todo aquello, pero fue interrumpido por las suaves palabras de su madre.

— Soy tu madre, HoSeok... Sé lo que te gusta, lo que te desagrada, lo que odias y aunque no lo creas, también sé lo que amas.

La mujer sonrió y alzó sus manos para tocar las mejillas de su hijo, había crecido tanto, pero su mente seguía siendo la de un niño ingenuo.

— Y-yo... n-no entiendo — fueron las palabras del chico.

— Deberías pedirle un tiempo a JiMin — aseguró ella. HoSeok se apresuró a negar repetidas veces. No podía creer lo que estaba escuchando, no podía creer que su propia madre le dijera que dejara a JiMin, que abandonara a su verdadero amor, que dejara de luchar por la persona a la que él amaba y por la que seguiría luchando hasta el final.

— ¡Yo amo a JiMin! — aseguró en voz alta. La mujer miró con preocupación a su primogénito, quería ayudarlo en todos sus problemas, pero este, en el que se encontraba, era uno muy difícil.

— Hijo... — respiro hondo y sonrió, tratando de demostrar todo su amor mediante esa acción. —  la mirada que le dirigías a JiMin ha cambiado, no es la misma que cuando empezaste a salir con él.