Capitulo 3: No conoces su historia

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3:00 de la mañana.
Narra Miley.


Me levante de golpe, estaba sudando. La barriga me dolía más que nunca, ¡Mierda! Era muy doloroso, tanto que no aguantaba. Era insoportable, me dolía demasiado. Quería gritar pero no podía. No podía despertar a la señora Pattie ni a su hijo, no podía gritar en casa ajena a estas horas de la madrugada. Tire las sabanas al piso, me mire estaba completamente sudada. Mire las sabanas y ¡Mierda! Sangre…comencé a llorar, si algo le pasa a mi bebe me muero.
No pude más de dolor, pegue el gritó más ahogado de mi puta vida.


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—¿QUÉ PASA? —Entró Pattie desesperada a la habitación.

—No se Pattie, me duele…hay sangre. —Dijo Miley llorando. Estaba preocupada. 

—¡JUSTIN VEN AQUÍ! —Gritó Pattie fuertemente, acercándose a la chica. —Tranquila, vamos a un hospital. —trato de calmarla.

—Me duele, me duele…—sollozo.

—¿Qué pasa mamá? —Entró Justin con solo unos boxers, dormido. Miro a Miley y abrió los ojos como platos. Estaba todo rojo. —Mierda…—Susurro.

—Justin llama a una ambulancia hijo por favor. —Corrió a buscar unas toallas al baño para secar él sudor de la chica. —Veni Miley vamos abajo a esperar la ambulancia. —la ayudo a levantarse.

—¡Ya viene mamá! —Gritó Justin desde abajo. 

—Justin cámbiate por favor necesito que nos acompañes. —Sin quejarse subió a su habitación y se cambió lo más rápido posible. 



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—¿Qué tiene doctor? —Pattie le preguntó.

—Es un embarazo muy joven… tiene que hacer reposo, por ahora son solo perdidas de sangre, pero puede perder al bebe. —Explicó. —Ella… ¿vive con usted? 

—No… soy una amiga, ella vive sola… 

—Tienen que resolverlo, no puede estar sola, si esto vuelve a pasar y no tiene ayuda, no sé que le puede pasar al bebe…—Recomendó.

—Voy a hacer lo que pueda…¿Puedo pasar a verla? —Pidió.

—Si claro. —Dijo el doctor, y salió por el pasillo.

—Justin, voy a pasar a verla ¿Queres pasar? —Le preguntó a su hijo, quien se encontraba en una de las sillas de la sala de espera.

—Paso. —Se limitó a decir. 

Pattie entro lentamente en la habitación donde Miley se encontraba acostada en una camilla. Se veía tan frágil e indefensa. Tenía los ojos abiertos y rojos de tanto llorar. Se acercó. 

—¿Cómo esta mi bebe? —Fue lo primero que logro decir.

—Él está…esta bien…tenes que hacer reposo…—Habló débil.

—Ah, bueno…—Suspiró. Pensó que era algo grave, y enserió era grave, solo que Pattie no le quería contar.

—Dijo el medico que no podes estar más sola en casa…—Le contó. —Así que vendrás a mi casa…
—¿QUÉ? —Preguntó atónita, ¿vivir en la misma casa que Justin?

—Lo que escuchaste ¿Quieres que le pase algo malo al bebe? —Miley nego- entonces tienes que hacer lo que el medico diga- sentenció- ahora descansa…más tarde tenes que hacer unos estudios y después vamos a tu casa para buscar tus cosas e instalarte en mi casa ¿si? 

—Si, gracias —Sonrió.

—¿Por qué? —Preguntó sin entender.

—Por preocuparte por nosotros pattie…—Dijo tocando su panza.

Pattie sonrió y beso su frente para después salir del cuarto y dejar que Miley descanse un rato. Se encontró con Justin que estaba metido en su Iphone.

—¿Ya nos vamos? —Preguntó sin siquiera despegar su mirada del aparato.

—No. —dijo molesta por la actitud molesta de su hijo. Se sentó al lado. —Ya dime, ¿Qué te pasa?

—¿Eh? —Preguntó haciendo una mueca. —No me pasa nada…—aclaró mirándola.

—Sí, claro. —Revoleó los ojos. —¿Estas molesto conmigo porque te hice venir aquí? 

—No mamá, era una emergencia…—Lo interrumpió.

—No me refiero al hospital, me refiero acá a Atlanta. 

—Ah…—toco su nuca. —No estoy molesto. —Mintió.

—Sé que si Justin. Pero entiéndeme, te extrañaba… —Explicó a punto de llorar.

—Mamá, lo se… enserió, solo que…deje a todos mis amigos allá. Mi novia —Suspiró. —Pero no estoy enojada contigo, yo también te extrañaba, necesitaba a mi madre. —Confesó. Se abrazaron.

—¿y con Miley que te pasa? ¿Por qué la tratas así? —Preguntó soltándose.

—Nada… no me cae muy bien. 

—¿Qué? ¡Pero si ni la conoces! —Rio. —Es una excelente chica.

—Esta embarazada y tiene 17 años mamá.

—¡HEY! —lo retó dándole un leve golpe en le brazo. —Fue un error, no sabes su verdadera historia así que por favor no hables sin saber Justin. —La defendió.

—Está bien, lo siento. —Se disculpó.

—Espero que la trates mejor Justin…ella no está pasando un buen momento. —Suspiró. —Vendrá a vivir a casa…—Soltó.

—¿Cómo? —Preguntó confundido.

—Sí, lo que escuchaste. Va a vivir con nosotros.
—Pe-pero ¿Por qué? —Preguntó él sin entender ¿Por qué tenía que vivir con ellos?

—Él medico dijo que tenía que hacer reposo, y que no podía estar sola en casa por si esto vuelve a pasar…—Explicó.

—¿Y no tiene padres? —Dijo molesto.

—Ya te dije, no sabes su historia…espero que en estos días que esté en casa la conozcas más… —Dijo parándose de la silla. —Voy a ir a hablar con él doctor. —Avisó caminando por el pasillo.

Él día transcurrió lento, Pattie estuvo con Miley durante todos los exámenes y revisaciones, Mientras Justin estaba en la cafetería o haciendo algo con su iphone  Cuando al fin le dieron de alta fueron a la casa de Miley a buscar un bolso con ropa y después volvieron a la casa.

—Hogar dulce hogar…—Bromeó Justin apenas llegaron a la casa.

—Miley ve a darte una ducha cariño. —Habló pattie ignorando a Justin.

—Si, gracias. —Dijo Miley tímida. 

—Oye, ya te dije que no tienes que agradecer todo, ahora está es tu casa y puedes hacer lo que quieras. —Miley rio y subió para darse un merecido baño. —¡Ten cuidado! —Gritó Pattie desde la cocina.

Hasta que llegaste tú (Miley Cyrus & Justin Bieber) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora