—¿A que te refieres con empezar de nuevo? —Preguntó ella secándose las lágrimas.
—No se…Conocernos, llevarnos bien. —Dijo él mirándola de reojo. —¿Por qué estabas llorando? —Preguntó curioso.
—Nada importante. —Suspiró cansada.
—Puedes contarme… sé que no nos conocemos lo suficiente, pero puedes confiar en mi. —Sonrió.
—Gracias Justin…—Murmuró. —Pues… estoy algo cansada de… de mi vida. —Confesó echando la cabeza hacia atrás.
—¿Cómo de tu vida? —Preguntó Justin acomodándose mejor.
—Sí… siento que es aburrida. No es lo mismo de antes, me acuerdo que salía casi todos los fines de semana con mis amigos. —Rio recordando. —Y ahora…No tengo amigos y bueno —Miró su panza. —No puedo salir.
—¿No tenes amigos? —Preguntó confundido.
—Me dejaron cuando se enteraron de mi embarazo. —contó melancólica.
—Ah. —Agachó la cabeza pensando. —¿Quieres contarme como paso…—Frenó y calló.
—¿Cómo paso que?
—Lo del…embarazó. —Tragó saliva.
—No quiero hablar de eso ahora. —Pidió. —Pero cuando esté lista te voy a contar…—Sonrió.
—Bueno está bien. —Sonrió también. —te voy a dejar para que descansen. —Dijo caminando a la puerta.
—Justin…—Dijo ella, él volteó. —Gracias… —Dijo tímida.
—¿Porqué?
—Por… darme otra oportunidad de llevarnos mejor, y por la conversación. —Dijo agradecida.
—No es nada, descansa. —Dijo y salió de la habitación.
[+]
A la mañana siguiente se levantó normal, sin molestias ni dolores. Se quedo mirando el techo unos minutos, no tenía muchas ganas de levantarse, pero aun así lo hizo. Tomo algo de ropa y fue al baño. No había ruidos en la planta baja, tal vez era muy temprano. Prendió la regadera y dejo que él agua se calentara un poco… él invierno estaba terminando. Hoy hacia frio. Se saco su pijama y se metió en la ducha para asearse.
Después de una media hora ya estaba bañada y vestida Salió y volvió a su habitación. Hizo la cama y después bajo las escaleras.
—Buenos días…—Saludó Pattie cuando la vio entrar a la cocina.
—Hola. —Respondió ella.
—¿Qué quieres desayunar? —Preguntó amable. Miley se encogió los hombros. —¿Quieres leche con cereales? Le estoy preparando eso a Justin…
—¡Sí eso! —Dijo como niña pequeña. Pattie rio y Justin entró.
—¡Buenos días! —Dijo animado.
—Hola…—Saludaron Pattie y Miley a la vez.
Así pasaron la mañana, desayunando entre chistes que Justin hacia a cada segundo, a Miley ya le empezaba a caer mejor Justin y viceversa. Más por la tarde Justin salió , Pattie se fue a hacer algunos tramites para la casa así que Miley quedo sola. Subió a su habitación, no tenía nada, pero absolutamente nada que hacer. Estaba aburrida. Decidió salir a tomar un poco de aire puro, o tal vez visitar el club de danzas.
Tomo su móvil y las llaves y salió. Caminó un largo rato por el barrio. Lo conocía ya que por allí era su antigua casa, es decir la casa de sus padres. ¿Cómo estarían ellos ahora? ¿La extrañarían? Quería averiguarlo pero no se atrevía. No podía ir sola. Necesitaba a alguien de apoyo, y ahora no tenía a nadie. Fue a la plaza, y se sentó en una de las bancas color amarillo que se encontraban juntó a los juegos para niños pequeños.
Observó por unos instantes, muchas madres con sus hijos. Pronto sería ella la que estaría ocupando ese puesto. Y… no estaba preparada del todo. No podía cuidar a un pequeño sola. Necesitaba a alguien. Un…¿padre?
—¿Miley? —Se escuchó una voz atrás de ella. Volteó, Justin.
—Hola. —Sonrió.
—Te reconocí por el gorrito. —Rio. — ¿Qué haces acá? —Preguntó
—Nada…solo quería tomar un poco de aire. —Explicó y volvió a mirar a los niños, Justin hizo lo mismo.
—¿Cómo te imaginas de madre? —Preguntó él después de unos minutos de silenció.
—No lo sé. —Dijo ella. —Nunca lo había pensado…
—Yo creó que serás una buena madre. —Confesó. —No se, eres muy dulce.
—Oh, gracias. —Respondió ruborizada.
—Me gusta cuando las chicas se sonrojan. —Admitió él sin rodeos, Miley se puso aun más roja.
—Ya basta. —Dijo riendo.
—Lo siento —Se unió a sus risas. —No se porque me caías mal…
—¿Te caía mal? —Preguntó incrédula.
—Si…bueno nose, creó que no me caías mal, solo estaba enojado conmigo mismo.
—¿Por qué? —Preguntó curiosa.
—Ya sabes, deje en Canadá a mis amigos, y…a mi novia. —Habló triste.
—Perdón no sabía. —Se disculpó.
—No tienes por qué pedirme perdón, no es tu culpa. —Miró un momento más el parque. —¿Vamos? Ya esta oscureciendo.
—Dale vamos. —Dijo parándose.[+]
—¿Qué queres comer? —Preguntó Justin cuando entraron a la casa.
—Ehm, no se…—Dijo pensativa. —¿Vas a cocinar vos? —Preguntó sorprendida.
—Sí, yo cocino. —Confesó.
—¿Enserió? Wow…—Rieron. —Sorpréndeme.
—Eso hare…—Dijo caminando hacia la cocina.
Miley fue al living a mirar algo de televisión, recordó que mañana tenía turno con él pediatra, ya que sabría el sexo del bebe. Estaba emocionada, se lamentó ya que iría sola. Maldito sea él día en que aquel idiota la dejo, ahora podrían criar un hijo juntos, y ser una familia. Pero no, la abandono. Los abandono.
—Miley a comer. —Gritó desde la cocina.
Miley Se levantó del sillón. Apagó la tv. Camino hasta la cocina, había un rico olor. Allí estaba Justin, sentado en la mesa de la cocina con un plató de fideos con tuco delante. Se sentó frente a él.
—Mm, mi comida favorita. —Contó ella mirando su plató.
—¿Enserió? —Abrió los ojos como platos—La mía también! —Confesó.
En ese momento se escucho la puerta de entrada. Era Pattie, fue a la cocina y saludó a ambos.
—Perdón por la hora. —Se disculpó. —Estaba terminando los trámites para él viaje. —Explicó. —Me voy mañana.
—¿Mañana? —Preguntó Justin. —¿Tan rápido?
—Sí, lo adelantaron para no tener que ir en vacaciones de verano.
—Ah…—Se limitó a responder.
—Justin ¿tu cocinaste? —Preguntó al ver la comida.
—Si claro. —Respondió orgulloso.
—Y está muy rico. —Comentó Miley.
—¿Cómo están Miley? —Refiriéndose a ella y al bebé.
—Bien…genial. —Dijo dulce.
—¿A que hora te vas mañana mamá? —Preguntó Justin.
—Por la madrugada, así que ya voy a ir a hacer las maletas. —Explicó— ¡ya comí! —Gritó subiendo las escaleras.
—Creo que vamos a estar un mes solos. —Soltó Justin después de unos minutos de silenció.
—¿Te molesta? —preguntó tímida.
—No, para nada…Es más podemos conocernos mejor. —Dijo sonriendo ampliamente. Miley sonrió igual, le gustaba la idea.
—Bien, creo que me voy a dormir, estoy algo cansada. —Suspiró. —Hasta mañana Justin. —Beso su mejilla y subió las escaleras para ir a su habitación.5:45 de la madrugada.
Miley se levantó de golpe, otra vez los dolores en la panza y el sudor ‘Mierda, otra vez no’ —Rogó en su mente. — tiró las sabanas a un costado, miro debajo, no había sangre. —Suspiró. — Quiso levantarse pero le agarró un terrible dolor. Gritó, no muy fuerte pero gritó.
Justin se encontraba regresando a su habitación, recién había terminado de despedir a su madre. Paso por la habitación de Miley y escucho un gritó. Entró sin pensarlo dos veces.
Estaba toda sudada y con los ojos llorosos, fue hasta ella.
—Miley ¿Qué pasa? —Preguntó preocupado. —Vamos a un medico.
—No no. —Jadeo pesadamente. —Estoy bien, solo…Quiero un vaso de agua por favor. —Pidió con dificultad.
—¿Segura? —Volvió a preguntar Miley lo miró mal y asintió. —Ahora vengó, tranquila. —La tranquilizo aunque él estaba más nervioso.
Corrió a la planta baja y de ahí a la cocina. Tomo un vaso y lo lleno de líquido transparente. Subió lo más rápido que pudo las escaleras sin que una gota de agua se callera al piso. Volvió a la habitación de Miley y le entregó el vaso.
—Gracias. —Respondió Miley ya más tranquila y con menos dolor.
—No hay porque. —Dijo sentándose junto a ella. —¿Estas mejor?
—Sisi. —Suspiró. —Otra vez los dolores. —Le contó a punto de llorar. —tengo miedo Justin… —Dijo ya con lagrimas en los ojos.
—tranquila, todo va a estar bien…—Intento calmarla. —No llores por favor. —Rogó.
—Justin…—Habló débil y después calló. —No nada.
—Decime, confía en mí.
—Puedes…—Calló. —¿Puedes abrazarme? —Continuó tímida.
Justin la miro con ternura, se acercó más y la rodeó con sus brazos Miley con timidez acomodo su cabeza en él pecho de este y sollozo.
—todo va a estar bien…—Murmuró Justin cerca de su oído.
—Eso espero…
Estuvieron unos minutos abrazados, Justin acariciando el suave cabello de Miley. Y ella pensado.
—¿Estás despierta? —Preguntó después de unos 10 minutos de silenció.
—Si, perdón. —Dijo sonrojada saliendo del agarre.
—No tienes que disculparte. —Rio Justin. —te estaba abrazando.
—Lo sé, pero me quede un largo rato. —Ambos rieron. —Ya voy a dormir…
—Dale…—Dijo parándose para irse. —Ah, lo olvide, mamá se fue hace un rato. —Avisó.
—¿Qué? ¿Cómo? —Preguntó nerviosa. —No la salude. —Dijo triste. Justin rio al ver su reacción.
—No te preocupes, no queríamos levantarte. Parecías cansada. —Explicó. Se acercó a su oído y dijo. —te ves muy tierna cuando duermes. —Miley se sonrojo de inmediato.
—Gra…gracias. —Tartamudeo y Justin rio.
—Hasta unas horas. —Dijo como si nada, saliendo. Miley se quedó callada, sintio una electricidad recorrer por su cuerpo cuando Justi le dijo eso pero ¿Por que?.
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Hasta que llegaste tú (Miley Cyrus & Justin Bieber) ©
Fiksi PenggemarAveces la vida te da sorpresas Ella estaba sola en esto... hasta que un día el llego y su vida cambiara. Un embarazo, una chica, un chico, una historia, dos protagonistas descubre una nueva historia de amor, locura, decepción, triteza y traición. "H...