Prometido Falso

01| Contrato de Seis Meses

Canción: Malibú - Miley Cyrus

Miré por la ventana del departamento, era un lindo día, los pocos árboles que había en la calle me daban alegría. Era la última vez que iba a ver ese hermoso paisaje que tenía de Buenos Aires en las mañanas desde mi departamento. Me había mudado hace poco más de dos años y medio para huir de mi realidad. Ciudad nueva, vida nueva. Mucho que tuve que aprender: costumbres nuevas, grandes personalidades y grandes oportunidades.

No hablaba con mi madre desde que me mudé a este lugar, antes de cruzar la puerta de mi casa, mi madre dijo, más bien grito: "Te vas de aquí y dejas de ser mi hija. En esta casa se hace lo que yo diga" y bueno, no he hablado con ella desde entonces. Vengo de una familia conservadora donde "Hasta que no te cases no te vas de esta casa", pero yo rompí las reglas. Ni me casé con el "hombre", si es que se puede llamar hombre a eso, que ella quería y tampoco esperé a casarme para irme. Todo eso a pesar de sí amar el hombre que ella quería para mí.

Aunque pensándolo bien yo siempre rompía las reglas. Nací prematura y rompí la regla que decía ella que tenía que gritar como película terror para tenerme, rompí las reglas cuando ella me decía no comas dulces y rompí las reglas al abandonar la universidad de abogados a la que me había inscrito. A mi me gusta el arte y la aventura, estaba claro que esa carrera no me daría ninguna de las dos cosas.

Todo lo que tenga que ver de alguna forma con "rebeldía" o así llamaba mi madre a el arte y la aventura, ella no lo entendía. Era conservadora y algo extremista.

Creo que esa fue una de las razones por las que abandoné todo y vine a vivir a Argentina. Muy lejos de mí ciudad, muy lejos de mi madre, una Italiana muy machista que siempre nos decía que en esa casa se hacía lo que ella quería, por tal razón no tuve buena relación con ella el último año cuando comenzó a controlar mi vida por completo. Fue cuando empecé a importarle de más. 

"Te casarás con este vestido"

"El anillo lo elegiré yo"

"Aún no te puedes comprometer"

"Jamás estudiarás eso"

"Eso es para los hombres"

"La mujeres van en la casa"

"Para tener a ese hombre tienes que soportarle todo"

Más machismo tenía ella que un hombre y eso que mi padre no era nada machista. Incluso era más comprensivo que ella. Eran esa pareja que encaja perfectamente en el polo opuesto, ni siquiera era posible creer que estuvieran juntos siendo tan diferentes. Al final no podía quejarme mucho. Era mi madre y por desgracia había heredado todos los genes de la familia de ella. Unos grandes ojos color miel de pestañas arqueadas y grandes, una nariz rara, unos labios finos, la piel pálida y el pelo castaño. Ironías ¿No?

Ella siempre dijo de pequeña que sería una hippie rebelde que viajaría por el mundo, terminaría fumando marihuana en una casa rodante y comiendo raíces, me lo repitió tanto que hasta me gustó la idea. ¿De dónde sacaría eso? No lo sé, de seguro fue en Wikipedia o Rincón del Vago. En fin, nací así, siempre fui destinada para llevar la contraria fuera tarde o temprano. Más tarde que temprano, claro. Siempre había sido sumisa hasta el día de mi cumpleaños número 18, ese día nació otra yo, pero esa historia por ahora no.