Capítulo1: Fractura.

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Hacía una cálida mañana en el Valle de la Hechicera, donde dos hechiceras de idéntico rostro, Cya y Lana, vigilaban juntas el equilibrio de la Trifuerza a través de su bola de cristal. Todo parecía tranquilo, cuando de repente, el cielo se oscureció y una nube negra, más bien niebla, surgió desde los cielos y atrapó a ambas hechiceras en su maligna bruma.

Este mismo suceso se hizo visible no sólo en el valle, la bruma se extendió por diversos lugares de Hyrule; desde el majestuoso castillo, donde una princesa, junto con su guardia personal y una joven heroína de ropajes verdes contemplaban un cielo oscurecido; hasta las Cuevas del Volcán de Eldin, donde este hecho era avistado por un caballero de armadura carmesí; pasando por el frondoso Bosque Perdido, donde un misterioso duende, acompañado por sus dos hadas, veía cómo el cielo se partía liberando un destello.

Todos ellos contemplaron como de esta abertura que se abrió en el cielo, surgió un haz de luz que empezó a transformar el paisaje.

De esta transformación surgieron islas que flotaban en fragmentos de mares de otras realidades, praderas marchitas sumidas en la oscuridad, y otros lugares que no pertenecían a esta tierra.

Link también vio este suceso desde el Templo de las Almas, que ahora se había convertido en su residencia debido a su relación con Cya. Preocupado por lo que le podría ocurrir, Link partió hacia el Valle de la Hechicera en busca de su amada y su amiga Lana.

Cuando llegó allí, sus mayores temores se habían hecho realidad. Cya estaba casi inconsciente, mientras Lana le sujetaba la cabeza sobre su regazo. Link se arrodilló para comprobar el estado en el que se encontraba la hechicera, esta sonrió al verle y él le acarició la mejilla mientras Lana explicaba lo ocurrido.

-Link, ha ocurrido algo terrible. De la nada a aparecido una misteriosa oscuridad y nos ha atacado a mí y a Cya. Se ha llevado la Trifuerza del Poder que compartíamos, y ha robado gran parte del poder mágico de Cya- Link escuchó atentamente la explicación de Lana, mientras ayudaba a su pareja a levantarse, apoyándola en su hombro, Lana mientras tanto siguió con la explicación -Esto es algo muy serio Link. Sin su poder mágico, Cya podría desaparecer para siempre, por no decir los estragos que puede causar la Trifuerza del Poder en malas manos. Estoy segura de que lo que ha ocurrido en el paisaje del reino tiene algo que ver-

Link se alarmó al escuchar la segunda parte de la explicación, estaba claro que debía llevar a Cya de vuelta al Templo de las Almas para so agotar el escaso poder que aún conservaba. Una vez allí, tumbaron a la hechicera en la cama de su habitación y los dos velaron por su recuperación. Fue entonces cuando Proxi apareció volando alarmada.

-¡Link! Es terrible, está todo cambiado. Es como cuando las líneas del tiempo se fragmentaron, pero distinto- trató de explicar la hadita lo que ya se había hecho evidente -La princesa me ha pedido que contacte contigo, te necesitan en Hyrule para resolver esto-

Link comprendió las palabras de Proxi, sin embargo, no podía dejar a Cya en el estado en el que se encontraba, por muy Héroe de Hyrule que fuera. Cya se dio cuenta en seguida de lo que estaba pensando su héroe y decidió intervenir.

-Link, tienes que ir...- trató de hablar la debilitada hechicera -...no puedes dejar que el reino sufra sólo por mi bien. No sería propio de ti...- dijo sonriendo.

Así pues, Link decidió hacer caso a la petición de la princesa siguiendo las palabras de Cya y preparó sus armas para ir a solventar la crisis en la que se encontraba el reino de camino al castillo y se despidió de Cya y Lana.

-Buena suerte, mi amor...- dijo Cya viendo marchar a su héroe.

-Te estaremos observando desde la bola de cristal- dijo Lana dando ánimos.

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