SOY JADE

Capitulo 12

Entré a clase de historia, el profesor comenzó a hablar y yo solo tomaba nota de lo que estaba escrito en el tablero. Me puse a pensar en lo que había pasado con Kev en el descanso, su desaparición repentina me hizo recordar como todo se había ido desvaneciendo desde la muerte de mi madre.

Flashback

Entré sigilosamente en la habitación de mis padres siguiendo unos leves sollozos  que escuché desde el pasillo.

-Papá.-Dije en un susurro para no despertar a mi madre que dormía pacíficamente en la cama junto a nosotros.-Por qué lloras?.-No me respondió, supuse que no me había escuchado así que elevé un poco el tono de mi voz.-Papá porqué lloras?

-Tu... madre...

-Que pasa con ella?.-Dije acercándome a la cama para tomar la mano a mi madre, cuando la toqué noté que estaba muy fría así que me dirigí al armario, lo abrí y busque unos guantes, volví junto a mi madre y con mucho cuidado para no despertarla se los puse. Los sollozos de mi padre se convirtieron en un sonoro llanto.-Papá, haz silencio, no quiero qué mi mamá se despierte.-Mi papá se acercó a abrazarme e intente consolarlo diciéndole que se calmara, como no funcionó decidí que era mejor bajar a la sala para poder hablar sin despertar a mamá.

Fui hacia las escaleras cogida de la mano de mi padre que no paraba de llorar, era como si yo fuera la adulta de la situación, cuando llegamos a la sala me senté en un sofá con él, como no se calmaba fui a la cocina, acerqué una silla del comedor a la alacena para poder alcanzar  los pocillos, cuando alcancé uno bajé de la silla y me dirigí hacia la cafetera, el café estaba frío, pero igual serví un poco en el pocillo, luego, metí el pocillo en el micro-ondas y puse a calentar 25 segundos el café, cuando estuvo listo se lo llevé a mi padre, que lo recibió, tomo un pequeño sorbo entre sollozos y lo puso en la mesita.

-Quieres galletas?.-Le ofrecí. Él negó con la cabeza y volvió a tomar su taza, tomó un largo sorbo de café y por fin se calmó.-Me vas a decir que pasa?.-Le pregunté muy seriamente.

-Tu madre...

-Esta dormida, por poco la despiertas.

-Es imposible que despierte.

-Es falso,sabes que tiene un sueño muy ligero.

-No me estas entendiendo, Jade.-Me quedé en silencio.-Literalmente  no va a despertar, tu madre murió.-Al escuchar estas palabras mi corazón se partió, y sin saberlo el resto de nuestra vida también.

Mi madre era doctora y le iba muy bien, mi padre era un contador en una empresa, pero no le pagaban muy bien, así que mi padre tenía que trabajar mucho mas tiempo para poder pagar mi educación, tuvimos que vender todas las joyas de mi madre y al final tuvimos que vender la casa. Al poco tiempo despidieron a mi padre y solo consiguió trabajo como obrero en una construcción, ese trabajo lo consumió mucho pero siguió trabajando por mi. Cuando no pudo continuar pidió un préstamo a los bancos y se lo negaron. 

Una noche cuando mi padre me mandó a dormir y me quede levantada escuché que alguien golpeó la puerta, mi padre abrió y lo escuche hablar con un hombre que tenía una voz muy gruesa, me escondí detrás del sofá para poder escuchar mejor.

-Necesito que me devuelvas ese dinero Jhon.

-Juro que lo devolveré en unos meses...

-Llevas diciendo eso casi un año.

-Lo sé, pero necesito mantener con vida a mi hija y no me pagan lo suficiente...

-Eso es obvio, mira la pocilga en la que vives.-Él hombre hizo una pausa.-Se me acabo de ocurrir algo. Si no tienes el dinero para dentro de un mes, tu horrible niñita se vendrá a vivir conmigo.