¿Que nos paso?

Capitulo 14

Había pasado toda la mañana ignorándola. ¿Qué delito había cometido? ¡Que pecado! Sí, moría por besarlo y lo hizo, luego todo fue subiendo de tono ¡¿Y que?! Fue la mejor noche de su vida, al menos la única que recordaba de esa manera.

Ahora el pasaba de un lado a otro omitiendo totalmente su presencia y acomodaba todo para llevarla de regreso a quien sabe donde y obviamente con su familia. Era de esperarse ¿quien podría hacerse cargo de una persona que a penas recuerda su nombre?

Ahora lo entendía perfectamente, no hubo nadie que lo amara tanto como Dulce lo había hecho y aun a pesar de no recordar nada, lo había vuelto a amar. El no podía permitir aquello. Tenia que actuar de inmediato. Regresaría a la ciudad y luego desaparecería para siempre de su vida aunque eso le ocasionara el peor de los dolores, no podia imaginar como seria su vida son esa mujer.

Volver a encontrar aquella caja repleta de recuerdos. Un suspiro escapo de lo mas profundo de su ser. Alcanzo una de las primeras fotos. Ambos se miraban a los ojos y sonreían. Deseaba retroceder el tiempo y volver a esos días donde el pudo hacerla sonreír.

Había sido el día mas feliz de su vida. Soñaba con convertirla en su esposa, mas no contaba con que cometería tantos errores. Sintió como sus ojos se humedecían.

Estoy harta de que me ignores Christopher – la oyó decir desde la puerta de la habitación. Tiro bruscamente las fotos dentro de la caja y busco la manera de mantenerlas ocultas de Dulce. – si cruce la raya te pido disculpas pero es que por primera vez en estos días que han pasado siento que... – ella respiro por un momento tratando de encontrar las palabras – siento que era lo que debía hacer. Quiero estar contigo, no me separes de ti – dijo acercándose a el

Dulce yo no... - ella noto perfectamente lo que el escondía. Lo hizo a un lado mientras llevaba una de sus mano a sus labios con asombro. Trataba de controlar el temblor de sus manos al tomar una de las fotografías.

Las piezas del rompecabezas se iban armando en su mente. El dolor volvía a instalarse en su corazón. El engaño, la perdida de su hijo, sus planes de divorcio, el viaje a la casa de campo y su inesperado encuentro con Christopher, el accidente. A todo aquello que revivía se le sumaban todos los sentimientos que había encontrado con Christopher en los últimos días. Dios mío, sentía que en cualquier momento sus piernas fallarían. Su corazón volvió a romperse en mil pedazos.

Empezó a llorar desconsoladamente. Christopher la tomo con delicadeza girándola hacia el y cuando la miro a los ojos se dio cuenta que ella lo había recordado todo. Ella soltó un grito desgarrador tratando de zafarse de los brazos de ese hombre.

Dulce por favor cálmate – le suplico con lagrimas en los ojos, ella seguía sumida en su dolor, tratando de sacarlo de su cuerpo. – Dulce escúchame – ella sollozaba de tal forma que a penas podía respirar. Como pudo hizo a un lado las cosas y la puso sobre la cama.

Busco desesperadamente su móvil y trato de localizar a la única persona que podía ayudarlo, aunque lo odiara. Anahí llego en menos de lo que Christopher había esperado, acompañada por el doctor de la familia.

No puedo creer que el destino sea tan cruel con mi hermana – expuso la rubia – y no puedo creer que después de lo que le paso hayas accedido a su absurda petición de no regresar a la ciudad – el la escuchaba sin protestar – ¿que esperabas Christopher?

Me iré de su vida – soltó sin mas – lo prometo

Eres un cobarde Christopher – añadió – no esperaba mas de ti – gruñó – arregla todo lo que has hecho. Empieza por su corazón - El doctor salió de la habitación y se dirigió hacia Christopher y Anahí.

Le suministre un calmante – dijo – esta muy afectada, ha revivido todas las emociones que le causaron el shock y con eso la perdida de la memoria. – al ver las caras de preocupación de ambos les explico que era normal que al sufrir tantas emociones su cuerpo creara como un escudo haciéndola olvidar para que ella dejara de sufrir – Solo necesita descansar, aunque sea muy doloroso que haya recuperado la memoria es buena señal – afirmo

Se removió entre las sabanas, con los ojos adormilados logro divisar la figura masculina, yacía dormido a escasos metros de ella sobre uno de los sillones de la habitación. Otra vez la cicatriz se había abierto. Se preguntaba cuando acabaría el dolor.

No se ha querido despegar de ti – oyó una voz muy familiar a su lado – ni yo por supuesto. ¿Cómo te sientes? – quiso saber su hermana.

El ha sido lo mas hermoso que me ha pasado Annie – dijo tratando de contener las lagrimas. – pero todo este dolor... no se si pueda con el – su hermana la abrazo para poder consolarla.

Las oportunidades solo se dan una sola vez en la vida Dul – ella observo atenta a su hermana – se que tomaras el mejor camino para ti. Ahora que estas un poquito mejor, tengo que regresar Cami debe estar histérica – volvió a abrazar a su hermana y luego se marcho.

Se puso de pie y merodeo por la casa. Se abrazo a si misma recordando todo lo que había vivido en esos días. Entre todo el dolor una sonrisa se dibujo en su rostro al recordar las cosas buenas que habían pasado en ese lugar.

Dulce! – escucho un grito desesperado. Se giro para encontrarse con Christopher, estaba todo despeinado, con muy mal aspecto. Su noche tampoco había sido fácil. – pensé que te habías ido – hizo una pausa acercándose un poco – tenemos que hablar. – ella asintió

Buscaron un lugar cómodo para poder desahogarse. El narro su historia de los hechos. Recordando todo, lo bueno, lo malo y lo que nunca debió pasar. Le confeso su eterno arrepentimiento. Ella solo miraba al vacío. Algunas lagrimas escapaban sin permiso alguno.

Si no quieres perdonarme yo me iré de tu vida para siempre Dulce – trato de apartarse de ella pero Dulce no se lo permitió.

Puedo vivir con este dolor pero no puedo vivir sin ti – Christopher seguía absorto por las palabras de Dulce. Ella se acerco a el y le dio un dulce beso.

Te amo tanto Dulce – dijo con una enorme sonrisa en sus labios - Se que no merezco tu amor pero te juro que te estaré toda la vida agradecido por esta oportunidad que me has dado – Volvió a besarla y a partir de ese día ambos se entregaron a ese amor y fueron felices por siempre.

FIN