Simplemente Tú (Johnny Depp)

Cuatro

LA CAMPANILLA de la entrada resuena cuando entro en la cafetería. He venido a tomar un frappé. ¿Creían que era otra mi idea fantástica? Nah, que mejor que un buen frappé y mas cuando se trata de los de esta cafetería. Mi telefono vibra de un mensaje y lo saco para revisar de quien se trata en lo que camino a pedir mi frappé. Tengo dos mensajes. Uno es de mamá y el otro es de Van.

*Mamá*
"Hola cariño, ya llegamos. ¿cómo la pasas tú?"

*Yo*
"Muy bien mamá. Me alegra que llegaran bien"
Pulso enviar y ahora voy a leer el mensaje de Van.

*Van*
"¿Qué tal belleza?"

*yo*
"Bien. He venido a tomarme un frappé :)"
Estoy  a punto de darle enviar cuando choco con alguien. Levanto la vista para disculparme.

-Valla, deberé creer que ésto es una casualidad o tendré que reportarte por acoso- el profesor Depp, es con quién choqué.

-Oh, no yo... yo lo...

-Tranquila, solo bromeo- me sonríe

-De verdad lo siento- me disculpo y me encojo de hombros.

-No pasa nada, los jóvenes de ahora ya no sueltan sus teléfonos- señala el mío y yo solo sonrío tímidamente- bueno, nos vemos despues Emma- pasa a un lado mío, huele muy bien. Termino de llegar al mostrador y escucho que me habla de nuevo.

-¿Emma?

-¿Si?

-¿Con quién vienes?

-Sola ¿por qué?

-Si gustas puedes sentarte en mi mesa a tomar tu café- me voy a volver adicta a su sonrisa si sigue sonriendome así.

-Gracias- respondo. ¿Y ahora que rayos hago? Me pregunto a mi misma. Se verá mal que me siente con el profesor a tomar mi frappé. Ya sé! Pondré la excusa de que me acaban de llamar urgentemente de mi casa. No! Siéntate a tomar tú frappé con él, no tiene nada de malo, solo estarás sentada con él en la mesa. A menos que mires al profesor de otra manera. ¿Cómo podría mirarlo de otra manera? Es cierto, es muy apuesto, a pesar de ser mayor para mí. Y tiene un lindo trasero. Ay dios que cosas digo.

-¿Señorita?- la encargada de tomar mi pedido me observa detrás del mostrador con cara divertida- ¿qué va a tomar?

-Un frappé porfavor. Con chispas y jarabe de chocolate encima.

-Enseguida. Son 5 Dólares- le entrego el villete y me regresa mi cambio- Es muy apuesto- me dice ella fijando la mirada sobre el señor Davis y yo sonrío.

-Algo- le digo.

- que no te de pena sentarte con él, yo no lo veo mal- me guiña un ojo, parece que me leyó la mente - en seguida te mando tu frappé.

-Gracias- y llega el momento de dirigirme a la mesa del Sr. Depp. Camino y me tiemblan los pies, no deberian estarme temblando, en todo caso deberían temblarme con respecto a un chico de mi edad.

-Y… ¿Por qué vienes sola?

-Mis padres están de viaje.

-¿Y, por qué tú no?

-Pues me da flojera viajar con ellos- le digo y él se ríe de lo que digo -¿y usted por que viene solo?

-¿Por qué supones que vengo solo?

-Por ofrecerme que me sentara en su mesa- asiente.

-Vengo solo porque si.

-Lo siento Sr. Depp.

-No pasa nada. Me gusta estar solo la mayoría del tiempo- una mesera me trae mi Frappé y al Sr. Depp le trae un café negro.

-¿Eres una loca del chocolate?- aquello me sorprendió –lo siento- se ríe y me rio con él.

-No se preocupe. Si soy una loca del chocolate.

Me dice que es nuevo en la escuela, y que no le incomoda serlo, que algunas maestras y secretarias le coquetean.

-Para mi no es incómodo que lo hagan- se encoge de hombros -Aunque no entiendo por qué lo hacen. Soy Feo!!- exclama. Claro que no lo es, de hecho es muy sexy. Maldito subconsciente quédate callado, no me ayudas en nada diciendo esas cosas.

-Usted es agradable- digo de repente. Rayos, por qué dije eso. Que pena.

-Gracias- dice con una pequeña sonrisa.

-Bueno Sr. Depp, ya es hora de irme- digo y asiente y me levanto de la mesa.

-¿tienes en que irte?- me pregunta levantándose de la mesa también.

-Traigo mi auto.

-Bien- automáticamente volteo a ver a la chica del mostrador y le digo adiós y ella también. Salimos a la calle, hace un poco de frio.

-Hasta luego Sr. Depp.

-Hasta luego Emma- camino al Shelby y subo.

Conduzco hasta casa, entro en ella y subo a quitarme la ropa que tengo puesta y ponerme algo mas cómodo. Recuerdo que no pude responderle a Van su mensaje y ahora lo voy a hacer.

*yo*
“Estoy bien. Fui por un Frappè  :)*
En menos de un minuto ya tengo respuesta.

*Van*
“Perra, y fuiste sin mi </3*

*yo*
“Te recuerdo que fuiste tú la que no podía pasarla conmigo.”

*Van*
“Pero sabes por qué fue :’(“

*yo*
“ya sé, no pasa nada”

Después de esto, bajo a ver que hay para cenar, reviso el refrigerador y lo único que hay es un trozo de lasaña que podría estar desde el año 3500 a. C. Y decido mejor ordenar una pizza, aunque no me la voy a acabar, será mejor que sobre para mañana.
Tomo mi teléfono y ordeno la pizza, rato después se escucha el timbre y corro a abrir... es la pizza

-Hola Emma- Es Chris, el repartidor, me saluda del otro lado de la puerta.

-Hola Chris- me entrega la pizza y yo le entrego un billete -gracias.

-De nada preciosa- Chris suele tratarme muy cariñosamente siempre, sospecho que es porque le gusto, o no sé, tal vez solo me lo imagino -que disfrutes tu pizza- me guiña un ojo y se va. Corro a la cocina por un vaso de jugo y me siento a ver televisión.
Ya pasado un rato, decido que es hora de irme a dormir. Miro el reloj de pared que está en la sala, 12:47 a.m. ya es algo tarde. Subo a mi habitación y me cepillo los dientes, despues me acuesto sobre mi cama y espero que el sueño me envuelva.