Originalmente en Argentina no decíamos... tantas cosas...
Entonces... ¿De dónde viene una contradicción tan grande como "Me gusta maaal"? ¿Por qué los chicos terminan una frase con "ah re" y con qué se come eso!? ¿De dónde sale zafáaa?
Todo tiene s...
¿¡lo guat?! (como bien me ha apuntado KarmaKamilion)
Éste es mucho más nuevo pero igualmente comenzó a gestarse hará unos diez años (Lo pensé mejor gracias a un comentario y creo que fueron veinte aproximadamente. No es una cuestión estadística😝). Diez años debe ser cuando empezó a usarse el AH RE solo. Pero empezó bastante antes. No te pierdas el videito de YouTube que me armé ahí arriba 👆.
Es el peor de todos. Tenemos a todos nuestros hermanos latinos preguntándose con qué se drogan nuestros preadolescentes, para decir algo con tan poco sentido al final de una amenaza, insulto, exageración o lo que se les ocurra que puedan comentar en cualquier red social.
¿Qué cómo se usa?! Por ejemplo así: —Me equivoqué en un párrafo del trabajo práctico que nos mandó la profe. —No es nada. Pero... estás despedido... ¡Ahh, re! 😳
¡¿Qué demonios es eso?! ¿Alentamos a un caballo a andar? ¿Alude a arrear ganado? ¿Por qué nos empeñamos tan vilmente en desmoronar las neuronas de los que nos leen/escuchan? ¡Tiene que ser un complot maligno para destruir al mundo!
Pero no se alarmen, no es para tanto. Es otra de las frases inconclusas que nos encanta dejar a la imaginación del interlocutor. Pero esta vez, es por muuucha falta de imaginación espontánea. (¡Lo digo por experiencia!)
No, no estoy bajo influencias de ninguna cosa rara. Es cierto.
Originalmente esas frases se usaban completando el contenido que ahora (y como habrán podido ver en los capítulos anteriores, últimamente ocurre bastante seguido en nuestro lenguaje cotidiano) dejamos a la imaginación del interlocutor. (¿Acaso eso nos habla de cómo se viene la educación o la falta de imaginación?)
¿Como se completaban originalmente? Por ejemplo así: —Estás despedido. ¡Ah re-loco el tipo se creía que era el jefe y él el empleado y era tan HDP que te despedía por nada, y después te quedabas sin poder alimentar a tu familia y los desalojaban de sus casas y terminaban viviendo en la calle pidiendo limosnas para comer. —Jaja.
Sí, "ja-ja", porque el fin de tales comentarios es simplemente hacerse el gracioso o quitarle seriedad a lo que se acaba de decir.
Además esas exageraciones se solían hacer en tercera persona. Sería como habla Maradona de él mismo.
Pero no quedó ahí, de lo contrario jamás habríamos logrado destrozarles los nervios a nuestros cultos lectores. Siguió evolucionando de a poco porque el "re" fue quedando sin su palabra modificada. O sea así:
—¿Y si no te hago caso? —Te voy a romper la cara y te voy a descuartizar en pedacitos para darte de comer al Boby que está muerto de hambre desde esta mañana. ¡Ahh re (creía) que era un asesino serial y vos no sabías nada y cualquiera que lo hacía enojar lo convertía en su próxima víctima y encima lo hacía participar al pobre perro! ¿Te imaginás al Boby? Con tu contextura, tenía para un mes.
Pero hasta acá, todavía se usaba la imaginación. Porque la teníamos. Tal vez todavía no había tanto jueguito, tanta conexión on line, tanta comunicación instantánea y todavía usábamos la imaginación para entretenernos.
El tema fue cuando esa imaginación se nos fue acabando de a poco y quedábamos patinando con el —...ahh... —ahora tengo que meter un comentario ingenioso para quedar como una genia—, reee...—, cualquier cosa, algo muy divertido que los haga descostillarse de la risa—, queee... —, algo desopilante, delirante ¿qué puede ser? —... —algún comentario ácido—... —¿nada?— ... —¿Hay alguien ahí? —... —¿nadie? —... —¡Ya fue! ... ya pasaron 10 minutos y están hablando de otro tema.
Así fue que los comentarios audaces y desopilantes los fuimos dejando para la imaginación del oyente quedando la frase "¡ah re!" para indicar que todo lo dicho era una simple broma exagerada, como la siguiente:
—Sos un master. —Y vos un idiota... Ahh re (que se iba al carajo porque no entendía nada de inglés)
Pero no quedó todo ahí, porque siguió evolucionando y fue quedando como expresión con un significado parecido a: "Nadie se cree eso". —Ayudame a limpiar la casa. —¡Ahh re! (que soy tu mucama ¡ja!. Olvidate.)
¿Y ahora? Y ahora, nada... Quedó así... una mierda... ¡ahh re!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
