Capítulo 2

420 20 0
                                    

David bajó su mirada sus ojos azules se tornaron grises… una presión comenzó a oprimir su pecho impidiéndole respirar con naturalidad, un agobio, un pesar que le hacía ser consciente de lo que estaba pasando era real, era como estar tan presente que no podía huir –aunque lo intentase- de este “ahora”, de este presente tortuoso, doloroso.

…Es mi amiga, Morga, es mi amiga… - se dijo- pero cada fibra de su cuerpo le gritaba que ella era más que eso, mucho más. Era un sentimiento embriagador que en otras circunstancias podría haberle transportado a pensamientos embriagadores de placer, pero ahora sólo le generaban un pesar, un dolor por no saber cómo abordar lo que estaba sintiendo, intentaba respirar profundamente –aunque con dificultad- para poder contenerse, cerrarse herméticamente. Quien lo viera por detrás de las ventanas del laboratorio no se habrían imaginado en el estado en que se encontraba, solo verían a Hodges trabajando concienzudamente en las muestras recogidas, sin pestañas si quiera, la mirada fija en el microscopio como queriendo descifrar un enigma, mientras que escribía disociadamente sobre una libreta.

De improviso se incorporó cogió la hoja recién impresa y se dirigió a la oficina de DB, sin mediar palabras, algo poco usual en David, le dio los resultados de sus análisis sobre las fibras y restos del interior del coche y de las ruedas del mismo. DB los leyó con una pregunta en los labios y el ceño fruncido.

-Crisótilo… Es amianto…

-…y riebeckita crocidolita, amianto azul, precisó David

- Pero el asbesto se prohibió hace años.

- Pero aún existen fábricas abandonadas donde se puede encontrar como aislante térmico. No hay muchas en Las Vegas, he encontrado 15, pero también hallé semillas de agrostis…

- césped de canchas de golf.

- efectivamente y sólo hay 7 fábricas cercanas a canchas de golf y solo 3 utilizan este tipo de césped ya que la mayoría de las 19 canchas existentes en las Vegas emplea Cynodones que se adecuan más al clima de Nevada, estas son las 3 fábricas encontradas. Sentenció, ahogando un suspiro y manteniendo la voz firme pero sus ojos indicaban.

- Buen trabajo David, vamos en camino.

DB llamó a Greg y Nick a uno, en tanto Sara y Finn irían a otra finalmente, DB junto a Brass irían a la tercera.

David se quedó con la mirada a la deriva en tanto veía como los demás se movilizaban, se quedó inmóvil apretando inconscientemente los puños, resignado a tener que esperar a que los acontecimientos se sucedieran sin poder intervenir en ellos, deseó por un momento ser un CSI para poder ser partícipe de la acción y estar con Morgan cuando la rescatasen, sin necesidad de tener que explicar su presencia pues sería un CSI y se supone que ese es su trabajo, estar en primera línea de la investigación… pero el no era un CSI y no tenía ningún argumento para ir… claro ningún argumento en que no expusiera sus sentimientos.

Sentimientos… sintió su móvil sonar, mejor dicho finalmente se dio cuenta que tenía un móvil que tenía 20 llamadas perdidas… Elisabetta, se había olvidado de su existencia, de su relación, de su compromiso y sobre todo de sus sentimientos hacia ella. Con una certeza que pocas veces había reconocido decidió contestar sabiendo perfectamente lo que tenía que decir y hacer. (O no hacer).

Mientras DB y Brass daban exitosamente con el lugar y rescataban a Morgan y la hija de Brass... David se dirigía en su coche a encontrarse con Elisabetta, ya había resuelto tener “esa” conversación con su prometida, sabía que era jugar el todo por el todo pero ¡diablos! -pensó- esto es Las Vegas y si debía elegir un momento y lugar perfecto para “jugársela” era este su día. Tal vez y solo talvez podría volver a tener “un día de suerte”, aunque en el fondo temía que esto simplemente fuera una capa de humo, una falsa expectativa, pero ahora nada le importaba, ahora más que nunca sabía lo que quería hacer, sin lugar a dudas, ganara o perdiera, se lo jugaría el todo por el todo, basta de ser precavido y organizado. Con esta decisión, que acaloró su cuerpo desde las entrañas se bajó del coche a encontrase con Elisabetta, cerró la puerta del coche sabiendo perfectamente que cerraba no solo una puerta sino que un camino que no tomaría.

Recorriendo el Camino (CSI FanFic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora