Mezcla Perfecta (Nathaniel x Sucrette)

Capítulo 2: Los amigos te corrompen

(Nathaniel)

Salí temprano de mi casa para ir a la universidad, cruce el parque y llegué a la universidad.

-Hola Nath- me saludó

-Hola Rosalya, ¿Qué tal?- 

-Ja ja ja...aún sigues siendo un poco tímido- reía

-Eh... no... no le veo lo malo

-Ja ja ja...si si como digas, bueno me voy..- dijo ella entrando al Instituto

-Uff...-suspiré, de verdad tengo que mejorar esta parte de mí

-¡Nathaniel! Llegas temprano- Melody venía corriendo y sin darse cuenta se tropezó con una roca.

-Cuidado- antes de que se cayera, la sostuve

-Gra-gracias- sonrío

-De-Denada... por cierto debemos ir a la sala de delegados, tenemos que terminar lo que dejamos pendiente- le recordé

-Mmm con que algo pendiente... no imaginaba que tu también harías esas cosas rubia

-¡Castiel!- él siempre malinterpretaba todo- No...no es lo que crees

-Ja ja ja...no dije nada...nos vemos- dijo golpeándome el hombro, si ese es mi amigo dejándome en ridículo frente a todo el mundo.

-Vamos Nathaniel- dijo Melody

-Ah s-si vamos- entramos a la universidad, nos dirigimos a la sala de delegados y terminamos de revisar todo, por fin pudimos ir a clases.

 Cuando tocó el timbre todos salimos al patio, yo fui a mi preciada Sala de delegados a comer mi almuerzo.

-¡Oe delegado!- alguien pateó la puerta y eso provocó que casi me atore.

-Castiel...miles de veces te digo que no patees la puerta *Cof cof*

-No importa tengo que pedirte algo

-¿Qué es ahora? que te cubra para que salgas del Instituto, que te haga una tarea, que te ayude con...

-¡No!, qué cruel eres, solo te lo pedí una vez para escaparme y las tareas no es mi culpa que los profesores enseñen mal.

-Ajá si Castiel, bueno dime ¿Qué es?

-Necesito que me acompañes a un lugar 

-¿Un lugar?, ¿Dónde?

-Eh bueno... verás, la semana pasada fui con un amigo a un bar a por unas copas, tú sabes pues... pero hoy no puede y realmente necesito ir hoy... 

- Entonces por qué no vas

- Porque cuando regrese ese día a casa estaba muy ebrio y no pensé que mis padres llegarían a mi departamento ese día por lo que me castigaron al verme así... no pude hacer nada para excusarme

- ¿Y qué quieres que yo haga?

- Si vas tú, te apuesto a que me dan permiso para salir... ayúdame rubia, en verdad es muy urgente

-Castiel... sabes que esos lugares no me gustan...además no me dejan salir de noche- dije, es cierto mi padre se pondría muy en contra y sobretodo si es que voy a un lugar como esos.

-¡Por favor! Además no crees que ya estás grande como para seguir las órdenes de tu viejo, deberías revelarte amigo

-Castiel...-tiene razón a veces yo mismo me avergüenzo de que siga al pie de la letra las órdenes de mi padre.- No sé..

-Por favor solo será esta vez... te lo pido..- me suplicó

-Bu-bueno pero solo será esta vez

-¡Bien! No te arrepentirás, ese es mi amigo- me dio un golpe en el brazo