Mezcla Perfecta (Nathaniel x Sucrette)

Capítulo 31: Cita con el médico

(Nathaniel)

Llevé a Angie a su casa, fuimos a su habitación y la recosté en su cama.

-Nath...-ella colocó su mano en mi rostro- Tenía miedo....

-Ya todo pasó, ese hombre no podrá obligarme a casarme, en este país hay derechos, así que él no puede hacer nada.- ella sonrío

-Es cierto.....estaremos juntos- dijo con su preciosas sonrisa al final.

-Si, siempre estaremos juntos....te amo Angie- dije dándole un beso en los labios- Prepararé algo para cenar.

-Claro- salí de la habitación y me dirigí a la cocina, pero antes le había preguntado si se le antojaba algo, ella me dijo que quería unos ravioles y lasaña.

-Bien, a cocinar

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(Angie)

No tenía sueño, muchas emociones por el día de hoy me arrebataron mi descanso, lo único que podía pensar era en Nathaniel y en mi bebé. De pronto mi celular comenzó a sonar.

-¿Si?

-¡Yuju! amiga, soy Rosa

-Rosa...¿Pasa algo?

-No, solo quería saber como estabas

-Estoy bien, Nath está conmigo es todo lo que me importa.

-¡Owww! ¡Qué tierno!, dile que te cuide bien o si no se las verá conmigo- amenazó ella

-Si si...

-Oye ¿Quieres ir de compras ?, para olvidar este mal rato ¿Qué te parece si salimos mañana de compras para el bebé?

-Rosa aún no se el sexo del bebé

-Es cierto, ¿Ya te hiciste tu chequeo médico?

-Eh..con todo esto, no he podido hacerlo- hubo un silencio-¿Rosa? ¿Sigues ahí?

-¡¿Cómo que te has hecho el chequeo médico?! ¡No piensas en el bebé! ¡Ya llevas un mes, debes hacértelo ya!

- Tranquila, lo haré lo haré, tendré que conversar con Nath

-¡Si! te dejo para que hablen, cuídate preciosa- colgó, dejé el celular en mi cómoda y me puse a pensar que debería hacerme ese chequeo pronto.

-¡Llegó la comida!- Nath apareció con una bandeja

-¡Vaya! Se ve delicioso- dije y en eso mi estómago empezó a gruñir - Tengo mucha hambre al parecer

-Pues anda lávate las manos y luego me acompañas para ver una película- dijo él arreglando todo para pasar el tiempo juntos.

-A la orden- después de lavarme mis manos, me senté con él y empezamos a ver una película, cuando esta acabó y terminamos de comer decidí decirle a Nath lo del chequeo médico.

-Nath...tengo algo que quiero decirte

-Dime amor...- me sonrojaba al escuchar esa palabra

-Bueno es que....yo...aún no me he realizado un chequeo médico- él me miró algo confundido- Como soy primeriza, debo realizarme un chequeo médico para ver si mi embarazo va bien.

-Claro amor, mañana iremos al médico, no te preocupes, yo correré con todos los gastos. La empresa ya me pagó algo adelantado así que mañana iremos al doctor.- sonreí

-De verdad no puedo tener mejor novio que tú- dije y él me besó

-Anda ve a dormir yo recogeré todo esto

-¿No regresarás a casa?

-Por hoy no, no quiero ver a mis padres, aún sigo enfadado, ¿Puedo quedarme?

-Por supuesta, esta...tam-bién es..tu casa- dije algo avergonzada

-Gracias- él se río un poco por mi actitud- Buenas Noches...yo dormiré en el sofá para no incomodarte

-Pero...

-Angie, anda- me besó en mi frente y no tuve más remedio que irme a dormir.

....

A la mañana siguiente, me levanté algo tarde, pero como era sábado no importaba. Fui a la cocina y vi a Nath con un delantal.

-Buenos Días amor- sonrío

-Hola...- dije algo soñolienta, él me preparó el desayuno y cuando acabamos él me dijo que llamó a una ginecóloga para que me atendiera así que nos alistamos y salimos hacia el hospital. Una vez que llegamos fuimos a recepción.

-Disculpe, ¿La doctora Silvana?

-Si se encuentra, ¿Tienen alguna cita?

-Si, de parte de Nathaniel 

-Ok, tome asiento, yo lo llamaré cuando ella se desocupe-  nos sentamos en la sala de espera, estaba algo nerviosa.

-¿Nervios?- preguntó Nath

-Si...un poco, no, miento, estoy muy nerviosa

-Yo también, se supone que es en estos momentos donde recurrirías a tus padres, al no tenerlos cerca me siento algo perdido.

-Nath....ellos comprenderán que lo que hicieron no esta nada bien- dije para calmarlo, se que se sentía triste más que molesto.

-Gracias Angie- acarició mi mejilla y en eso...

-Nathaniel y Angie, la doctora los espera- dijo la enfermera.

-Vamos...-dijo él, entramos al consultorio de la doctora y ella nos recibió con bastante alegría.

-Tomen asiento por favor, díganme ¿Cuál es el motivo de su consulta?

-Verá doctora, mi novia.....-Nath me miró algo nervioso- Ella está embarazada

-Embarazada, ¿Cuántos años tienes hija?- preguntó la doctora

-Diecinueve- contesté, ella se sorprendió un poco, era de esperarse

-Pues, son algo jóvenes claro esta, pero no se preocupen, ya he atendido varios casos similares incluso algunos de embarazos en muy menores y déjenme decirles que lo orientaré y ayudaré en todo lo que necesiten- dijo ella muy amable

-Gracias doctora, en serio- respondí Nath por los dos.

-Bueno, ¿Cuántos meses ya tienes?

-Acabó de cumplir un mes

-Oh, por lo general se tiene que venir antes del mes para cerciorar que todo ande bien, pero no hay de que preocuparse, haber venga por aquí señorita- la doctor me indicó que me recostara en la camilla, Nath sostenía mi mano, ella me echó un líquido en mi vientre y con un aparato fue moviendo de manera circular.

-Miren, ese es su bebé- dijo la doctora, nosotros miramos atentamente la máquina en la cual proyectaba a nuestro hijo.

-¿Ese es nuestro bebé?- pregunté, la doctora asintió, mis lágrimas no tardaron en brotar por mis ojos, me sentí muy feliz, era una sensación indescriptible.- Nath...-él también sonreía, la felicidad era enorme.

-Su bebé esta bien, aún es muy pequeño, tardará en formarse, pero no se preocupen todo está muy bien- concluyó la doctora

-Lo ves Angie todo está bien- me besó Nath, yo no dejaba de llorar, estaba realmente feliz.

-Me alegro que estén juntos, por lo general las parejas a su edad no se toman bien este tipo de etapa.- la doctora nos felicito, luego me dio unas recomendaciones y algunas medicinas que tomaría y eso fue todo.

Al regresar quería contarle a los gemelos y a Rosa lo que había pasado hoy.

-Me haces el hombre más feliz Angie

-Y tú a mí Nath- dije y nos fundimos en un beso, después fuimos a casa muy contentos a contarles la noticia a nuestros amigos.

En el quinto mes recién sabré el sexo de mi bebé, pero sea lo que sea, lo amaremos y cuidaremos mucho.