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Tormenta se veía bastante feliz con su hallazgo. Daba círculos en el lugar y batía sus alas, como si quisiera mostrarle algo a su jineta.

-¿Que es eso?-Patan tomo el pedazo de pierna, en ese momento más que una prótesis parecía una espada algo machucada.

-Quiza sea una pista a lo que encontramos en el bolso-Brutacio sujeto su mentón, como si estuviera analizando la situación.

Los presentes se miraron y luego miraron a Brutacio.

-Oigan, que nos guste divertirnos no nos hace tontos.-Brutilda se cruzó de brazos en defensa de su hermano.

Tormenta contagio, luego de unos gorgoteo y rugidos, al resto de la manada y los dragones comenzaron a alegrarse también.

-Si fuera así, creo que deberemos visitar la isla de los Berserkers....-Astrid miro a su dragona, quien se acercó y le dio un leve empujón.

-Pero, ¿que dirá Estoico? El viaje en barco hasta la isla es de 5 días-Patapez se encontraba calculando lo que decía.

- Pero ahora tenemos dragones idiota-Patan subió sobre Dientepua- ¿Que dices si vamos a dar un paseo lindura?- giño el ojo de forma galana a Astrid.

-Sera un honor -respondio esta con sonrisa burlona a la vez que subía sobre su dragon- ¿Vendrán?

Patapez se rascó la cabeza antes de montar a Gorgonzua, sin mucha conoviccion. Los gemelos ya habían montado vuelo y tenían la delantera.

-¡El último en llegar es un huevo de dragón podrido!- gritaron los gemelos a coro.

-Pues, espero que estén listos para oler tan mal- respondió Patán, tratando de alcanzarlos.

-Astrid..-Patapez interrumpió por un momento el vuelo de la rubia.- Se Que los Berserkers saben que montamos dragones y todo eso, pero. ¿No crees, que ir a la isla donde ahora el gobernador es Alvin, es un poco arriesgado?

-La verdad Patapez es que si,pero si no mal recuerdo ,la parte del tratado de paz que tenemos implicaba no acampar en islas del otro sin aviso previo- recordó los sucesos de ese día.

El resto del viaje fue tranquilo, hicieron carreras hasta haber llegado.

-Ya casi llegamos-anuncio Patán luego de que Dientepua se detuviera en seco al divisar la isla.

-Eh,chicos, ¿alguien podría explicarme porque nuestros dragones no avanzan?- Brutacio se inclinó hacia adelante, intentando que su Cremallerus retomará el vuelo.

-Tranquila nena, no pasa nada, no les harán ningún daño-Patapez acarició el costado derecho de su Gronckle, esta banjo hacia la "entrada" de la isla.

Sorprendentemente la aldea seguía igual, solo que había Terribles terrores por todas partes.
Algunos parecían algo asustados de los enormes dragones.
Otros, bastantes curiosos sobre las nuevas visitas dragontinas.

Lo que más llamo la atención de los jinetes fue la ausencia de otras especies de Dragones, la isla era habitada completamente por Terribles terrores.
Ninguno hizo ningún comentario hasta que que Alvin apareció.

-Astrid, Patapez, Brutacio y Brutilda y mi preferido de todos, Patán-extendio sus brazos- Bienvenidos a la nueva isla Berserker, donde ahora los dragones son bienvenidos-chasqueo sus dedos, y, un terrible terror color verde agua sin alas trepo por su pierna hasta su hombro- dejen que sus dragones se diviertan-Miro a Astrid quien llevaba el bolso de su tribu- les daré un recorr.

-Lo siento Alvin, no estamos aquí de visita, queremos respuestas, encontramos este bolso en la costa de Berk.-Menciono Patán a la vez que señalaba el bolso.

-Oh, vaya, eso es un terrible error, mi hijo se olvida de algunas cosas...-Alvin se había volteado, dándole la espalda a los jinetes- luego del accidente que tuvo suele olvidarse cosas en muchos lados...

-No sabía que Alvin tuviera un hijo-menciono Brutilda a Brutacio.

-Hermana, hasta el hombre más feo encuentra el amor algún día-respondio este.

Alvin comenzó el recorrido, mostrándole a nuestros jinetes el establo a medio terminar.
La aldea había hecho una pequeña fosa, donde los dragones podian dejar sus huevos y no necesitar irse.

Patán recorrió el lugar con la vista, le parecía bastante triste ver a los terribles terrores en aquel lugar, sin verde suficiente para esconderse o juguetear.

-Alvin, se que haz cambiado, pero-Astrid tomo al jefe de los Berserkers del hombro- rompiste el tratado, si Estoico se entera...

Alvin suspiró y voltio a ver al grupo de jóvenes. Rascó su espalda y luego vio al terrible terror, lo tomo en brazos y se lo dio a Astrid.

-Tengo, este pequeño estuvo como el mejor dragón de aquí, tome lo como una demostración de disculpas y porfavor, acepten una cena en demostración de aprecio.

-Supongo que podríamos quedarnos una noche aquí, al fin y al cabo, llevamos todo un día sin comer algo-comento Patapez.

-Una cena y un lugar donde dormir, o nada...-Dijo Brutilda.

-Una cena, un lugar donde dormir y un jabalí para nuestra goza de jabalíes- corrigió Brutacio.

El jefe Berserker suspiro fastidiado y luego de dar un aplauso varios terribles terrores rodearon a los jóvenes.

-Ellos los llevarán a la cabaña para visitantes especiales- acarició la cabeza de un terrible terror Titán, color rojo con grandes ojos ambarinos- son los terrible terrores más fuertes que tenemos, gracias a un estricto entrenamiento de un dragón aún más superior que el Titán.





Años sin actualizar </3 perdón!
Tengo problemas de salud, y estoy súper atrasada con la facultad.
Debo recursae una materia.
Rendir un final.
Ponerme al tanto con tres materias, todo es un caos.

Enamorada de un &quot;Berserker&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora