Man-Eater.

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Al fin, llegamos. Era un centro comercial enorme, y había muchísima, muchísima gente. Tanto que nada mas pasar la puerta me empecé a agobiar.
Escuchaba las conversaciones de todo el mundo a mi alrededor, pero no entendía ninguna.
Le pedí a los chicos que entráramos deprisa a la bolera. Ellos aceptaron y en 5 minutos estábamos  dentro.

Menos mal, aquí no hay tanta gente- suspiré.

La bolera era enorme. Estaba repleta de luces parpadeantes por cada milímetro y música muy alta. Molaba mucho, la verdad.
Tenía tres plantas. Abajo la bolera, en medio sala de juegos y arriba un bar.

-Jake: Chicos vamos a pedir pista.

-Yo: Siii.

Nos pusimos en fila y cada uno iba diciendo su talla de zapato para que la recepcionista nos entragara las zapatillas especiales para la pista.
Primero fue Cameron, luego Jonhy, después Jake y mi  turno llegó.

La recepcionista me hablaba en inglés, pero no la lograba entender. Alomejor si me lo dijera más despacio la lograba entender. Pero aun así, llamé a Thomas para que me tradujera.

-Yo: ¡THOM!... - paré la palabra.

Me quedé con la boca abierta al ver lo que estaba viendo.

No podía creerlo. Isabella y Thomas se estaban BESANDO delante de mis narices. Otra vez. Esa sensación dentro de mi tripa. Me estaba desgarrando el puto corazón.

Antes de que se volteara para contestarme, le dije:

-Yo: Nada, ni te he llamado. Sigue con tu novia, que no quería molestar.

Si, si que quería molestar. Lo hice sin querer, pero no me causó pena ninguna. Quería separarlos cogiéndolos del  pelo a los dos.

E iros a un hotel, gracias. -pensé.

-Yo: ¡Jake! Puedes ayudarme con el inglés un momento, ¿por favor? Es que al parecer Thomas está muy ocupado. - dije con cara de rabia.

-Jake: Claro, yo te traduzco.

Al fin, el me ayudó y conseguí las zapatillas de mi talla.

Estuve hablando con Jake un buen rato en unas butacas hasta que el señor  abriera nuestra pista. Era muy gracioso y a la vez nos entendíamos. Se que podía confiar en él. Me lo decía algo de mi cada vez que hablábamos. Era muy buen niño.

-Jake: Te gusta, ¿verdad?

-Yo: ¿El qué? ¿Quien?- dije riendome dudosa.

-Jake: Thomas, tonta.

Se me abrieron los ojos como platos. Intenté disimular, pero me empecé a   mirar al suelo nerviosa. Nunca he sabido disimular, cosa que odio mucho de mi.

-Yo: ¿A mi? ¿Thomas? Que va. Como mucho me parece guapo, eso no te voy a negar. Encima, tiene novia y eso se respeta.

-Jake: Venga ya. A mi no me engañas. He visto con la cara de asco que miras a Isabella. Y como sólo la conoces de hoy, solo puede significar una cosa. Celos, bonita.

-Yo: Nooo... A mi I-Isabella me... me cae emh....bie..

Lo siento mucho la palabra 'Isabella'y 'caer bien' no podían ir en la misma frase.

-Jake: Y si te sirve de consuelo, a mi Isabella tampoco me cae bien. Antes de que estuviera con Thomas, la gente decía que era una "man-eater". Una guarra, básicamente.

Thomas Sansgter |  Actually... I'm In Love. © (editando 2021)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora