13. ¿Una pista?

3 0 0
                                    


Holaa, perdón por la tardanza. Ahí va un nuevo capítulo. 

Espero que lo disfruten :D 

C.

_______________________________________________________________________________

Al llegar a casa esa tarde, caminando bajo la lluvia, me saqué las ropas mojadas y me puse un pantalón blanco de piyama. Me senté en el escritorio y contemplé la nota de Emily. Mi cabello aún estaba mojado. Pronto me perdí en las palabras de mi querida niña, la carta era la más reciente que habíamos encontrado hasta el momento.


05/08/13

Querido diario:

No tengo mucho que contar. Desde que Nani no está no he podido leer nada, por lo que me decidí a escribir. Hoy comencé un cuento sobre un amor imposible, y así se llamará, amor imposible.

Mis intentos por salir de este lugar cada vez son más inútiles. Ayer en la noche, cuando el "Mr. Villano" bajo a traerme la cena, la cual consistía en un plato de arroz y agua, permití que la dejara. Cuando se estaba yendo lo golpee con una madera que había tirada en el sótano. Momentáneamente quedó atontado, por lo que aproveché y corrí escaleras arriba. Estaba cerca de la puerta cuando sentí una mano tapando mi boca y otra alzándome por la cintura. El Acertijo me bajó al sótano otra vez y amarró un pañuelo a mi boca. Me colocó boca abajo sobre la mesa, levantó mi camiseta, solo la parte de la espalda, y con una daga, la misma que utilizó para sacarle la vida a Nani, comenzó a trazar patrones sin sentido alguno sobre mi piel desnuda. Era la tercera vez que lo hacía, siempre varió sus castigos, pero este era el yo más odiaba. Los cortes que producía la daga sangraban, pero no eran muy profundos. Sentía la sangre brotar, resbalando por mi espalda, hasta que se detuvo.

Cuando se fue, tomé un paño, lo humedecí y limpié las heridas, como había hecho otras veces antes. Luego coloqué bien mi camiseta y engullí mi cena. Las pérdidas de sangre y los inútiles intentos de escapar me dejaban agotada.

Tal vez algún día lo consiga, pero por el momento me tendré que atener a las consecuencias de los fallos, porque no importa que, no me daré por vencida.

Emily.


Leer sobre el sufrimiento de Emily, escrito por su propia mano me entristeció, me dolió en el alma. Necesitaba encontrarla, pero en ninguna de sus cartas dejaba pista alguna, siempre estábamos en la misma. Tal vez Grace tenía razón, tal vez nunca la encontraríamos.

-Jack.- Oí que mi madre me llamaba.- Es Nick.- Continuó. No había atendido el teléfono desde que salí con Grace. Lo tomé y observé que tenía diez llamadas perdidas de Nick.

-Hola Amigo.- Dijo NK entrando por la puerta de mi habitación.

-¿Qué onda Nick?- Pregunté con desgana

-Todo bien, pero tú no te ves muy bien que digamos.- Contestó.- ¿Qué ocurre Jack?- Preguntó con preocupación.

No contesté. Por lo que se sentó en mi cama y tras observarme unos minutos dijo:

-¿Es por Emily verdad?-

-Si.- Respondí con un suspiro.

-Yo sé qué te ayudara a sentirte mejor.- Dijo con entusiasmo.

-No Nick, ir de fiesta y tomar hasta no recordar mi nombre no me hará sentir mejor.- Fui cortante.

-Iba a sugerir helado y película, pero si quieres fiesta...-

Caso DixonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora