A tu lado (By your side)

Capítulo 8

No me puedo creer lo que estoy escuchando
- ¿Es grave? - pregunto con miedo a conocer la respuesta. Me tiembla todo el cuerpo y me estoy empezando a marear
- No lo sé, los médicos me han dicho que ha recibido fuertes golpes en la cabeza
- ¿Con quién ha tenido la pelea? - dudo que sepa algo ya que no conoce a ninguno de sus amigos
- Con unos tipos que no conozco, eran tres contra uno. La pelea fue en un bar , Carlos estaba borracho, tonteando con la novia de uno de ellos y... le acabaron tirando una botella en la cabeza y liándose a puñetazos - papá se toma un instante para calmarse y continúa - El dueño del bar llamó a la policia y han pasado a disposición judicial - está muy preocupado, lo noto en su voz , me encantaría poder estar allí para apoyarle... No tendría que haber venido a Madrid
- Papá, voy a volver a casa - le digo con voz temblorosa. Creo que en cualquier momento me puedo desplomar en el suelo.
- Ni se te ocurra, todo va a salir bien - me dice, pero no estoy muy convencida de eso- Esto no puede impedir que cumplas tu sueño. Te llamaré cada vez que haya novedades. Intenta no pensar mucho en ello ...debes descansar porque mañana empiezas con las clases...
Oigo una voz masculina al otro lado de la línea que llama a mi padre
- Es el médico , te tengo que dejar- me dice papá
- Mantenme informada de todo
- Lo haré , te quiero - antes de poder decirle algo cuelga el teléfono.
La cabeza me da vueltas y siento un dolor horrible en el estómago
- ¡ María !- oigo gritar a alguien - ¿ estás bien ? ¿qué pasa? - Alzo la mirada y veo cómo Marta viene corriendo hacia mi.
Al llegar me agarra del brazo temiendo que me caiga al suelo, le cuento todo lo ocurrido y me echo a llorar. Parece que es lo único que hago desde que llegué aquí.
Cuando me tranquilizo entramos en el comedor pero los demás ya se han ido y no hay casi nadie. Como se me ha cerrado el estómago me como un melocotón y regreso a mi habitación después de despedirme de Marta.
Al llegar me sorprende no encontrarme dentro a Sara porque es bastante tarde, pero lo ignoro y me tumbo en la cama. Pese a todas mis preocupaciones me quedo dormida enseguida porque estoy agotada.

La alarma de mi reloj me despierta a las siete de la mañana. Las clases empiezan a las ocho así que tengo una hora para arreglarme y desayunar. Sara no ha pasado la noche aquí y sigue sin aparecer lo cual me viene genial porque así puedo ser la primera en usar el baño. Decido ponerme otra vez los vaqueros de ayer y una sudadera gris porque hace frío por la mañana.

Bajo a desayunar al comedor sin avisar a Marta y a Natalia y al llegar me encuentro a Jorge solo en una mesa. Cuando me ve me dedica una sonrisa y me invita a hacerle compañía en el desayuno. Como ayer apenas cené tengo mucha hambre y me cojo tres croissants de chocolate que me zampo en un santiamén. Mientras desayunamos Jorge me explica los horarios y las asignaturas que vamos a tener durante el día.
- Hoy tenemos literatura, mates y filosofía. Y tú además tienes química y biología- estoy estudiando el bachillerato de ciencias de la salud y él, el de letras. En las asignaturas comunes coincidimos pero en las específicas no.
- Y las clases de baile son por la tarde, ¿no?
- Exacto, tres horas todas las tardes excepto los sábados que son por la mañana y domingos que no hay clases.
- Uf, voy a morir.
Cuando terminamos de desayunar bajan los demás. Mientras desayunan Jorge y yo los esperamos fuera para ir juntos a clase. Todos vamos a ir a la misma clase menos Marta, ya que ella va a canto. Sin embargo Mateo y yo somos los únicos que estamos en el bachillerato de ciencias de la salud.
Entramos en el enorme edificio y Marta me  explica la organización de las aulas:
- En la planta principal está la recepción, una cafetería, una biblioteca, los departamentos de profesores y las salas de estudio. En la primera y segunda planta están las salas de baile, canto, instrumentos y composición. De la segunda a la sexta están las aulas de clase. Nuestro curso está en la quinta planta.
Subimos las cinco plantas por las escaleras y al llegar me falta el aliento. Después de despedirnos de Marta entramos todos a clase y yo me asqueo al ver a Sara y a todo su grupito en última fila. Sara me mira con desprecio y yo pongo los ojos en blanco. Parece que no solo vamos a ser compañeras de habitación sino también de clase. Si pensaba que la cosa no podía ir a peor me equivocaba.
Me siento al lado de Natalia en primera fila para estar lo más lejos posible de esos pijos y Jorge se sienta por el final con Mateo, supongo que para estar cerca de su querida rubia. Al mirar hacia atrás veo algo que me llama la atención: hay un asiento vacío entre Sara y Javi... qué raro... dejo de pensar en ello cuando la profesora de literatura entra a clase.

Las primeras clases se me pasan volando y todos los profesores me caen bastante bien.
Después del descanso toca química y biología. Mateo y yo decidimos sentarnos por el final  ya que el aula es bastante pequeña y se ve bien la pizarra desde allí.

Cuando llega la hora de comer el comedor, pese a lo grande que es ,se llena de gente y no me extraña porque después de una larga mañana de estudios todos tenemos mucha hambre. Los cinco nos sentamos en una mesa del final  y charlamos animadamente sobre las clases. Mientras tanto, le mando un mensaje a papá preguntándole por Carlos, pero no me responde. Y eso que me dijo que me mantendría informada...
En la mesa de enfrente nuestra se sienta el grupito de Sara y vuelvo a fijarme en que sobra una silla entre Sara y Javi . Parece que el sitio está reservado...
¿es que falta alguien de su grupo por venir ?

Fin del capítulo. ¿Te está gustando la historia? Déjame tu comentario y voto.
Gracias a todos los que la leéis. No quiero decir nada pero... La cosa va a ponerse aún más interesante... Sigue leyendo...