Toda una vida esperando ese gran momento que daría un giro a sus rutinas.
April y Ashley se mudan a una nueva ciudad para estudiar en la prestigiosa universidad de Wisdown.
Dos chicas totalmente diferentes, que están unidas por ese gran sentimi...
-¡April despierta o llegaremos tarde!-. El grito de Ashley hace que mis párpados se abran bruscamente, buscando en la habitación alguna razón por la cual merezca la pena levantarse hoy.
Primer día del segundo curso en Wisdown.
¿Será tan intenso como el primero?
-Como no te levantes juro que me voy sin ti-. Advierte con poca facilidad para vocalizar debido al cepillo de dientes que aún permanece en su boca.
Entrecierro los ojos.
-Creo que esto ya lo he vivido-.
-Si-. Afirma con obviedad. -Todos los días de tu vida por qué siempre te retrasas-.
Pongo los ojos en blanco.
Con resignación, hago un esfuerzo y arrastro mis pies hasta el cuarto de baño.
Intento no tardar para poder empezar este nuevo curso con una actitud positiva, pero no lo logro, por mucho que me lo proponga los diez minutos de retraso siguen permaneciendo en mi reloj.
La habitación vacía me recuerda que debo de ser la única que aún permanece en la residencia.
Lanzo un suspiro y agarro la mochila acomodándola en mi hombro derecho, preparándola para la carrera que voy a hacer con el fin de ahorrarme unos minutos.
Annie parece haber hecho un pacto con el diablo por qué no ha aparecido por nuestro cuarto y a decir verdad, no creo que el director le haya permitido ese lujo. Otra desaparecida es Carol, de quien perdimos la pista tras la pelea que tuvo con Logan, la ruptura no le sentó nada bien. Alison, James y Bradley Colin siguen recorriendo los pasillos de Wisdown, algo que no me extraña, lo que si lo hace es que Ian no haya vuelto por aquí. Deduzco que se ha cansado de joder la vida a los demás.
Al abrir la taquilla agarro el papel que me informa de todo lo que debo saber en mi primer día. Horarios que no cumplo, clases que desconozco y profesores en los que por suerte no está incluido el nombre de Adam.
Novedad de este año: Adam no está.
Si he podido volver a pisar la universidad ha sido gracias a que la fecha del vídeo en el que Adam y yo nos besábamos, era legal debido a mí mayoría de edad, si eso hubiera ocurrido semanas antes él no seguiría siendo profesor y yo no podría continuar aquí.
Frunzo los labios al recordar aquel horrible día.
Doy un portazo al cerrar la puerta de la taquilla y comienzo a caminar por los desiertos pasillos, en una búsqueda que me trae viejos recuerdos. Un año aquí y sigo sin saber las clases en las que me asignan.
-¿Perdida?-.
Su voz grave llega a mis odios terminando de despertarme.
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