Bajo la lluvia.

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Ya casi son las nueve y media de la noche y la fiesta comenzara en media hora, justo lo necesario para que nos de tiempo a arreglarnos, cosa que no hemos podido hacer antes por que estábamos llevando a cabo nuestro plan. April había tramado llenar el casco de la equipación de Eidan de pegamento pero es demasiado cruel por lo que hemos llegado a la conclusión de que es mucho mejor llenar el casco de un liquido pringoso y viscoso que deje sin duda a Eidan en ridículo por varias semanas.

-¿Y si te culpa a ti?-. Pregunto. Sabemos que eso puede pasar, Eidan no es tan tonto y seguramente que se de cuenta en cuanto April no pueda contener su risa al verle con todo eso cubriendo su precioso rostro.

-Eso no pasara por que ya hay una culpable-. Se gira y sonríe cínicamente. Empiezo a tener miedo de mi amiga, puede llegar a ser malvada cuando se lo propone. Me encojo de hombros para saber a quien se refiere, no hemos conocido a mucha gente pero ya tenemos algunas enemistades que podrían ser las victimas de este plan.

-Annie-. Aclara finalmente aun con una sonrisa de victoria en sus labios. No me gusta vengarme o culpar a las personas cosas que no han echo pero la verdad es que Annie se lo merece, desde que hemos llegado no ha tenido ni una pizca de amabilidad y ha demostrado que solo es una antipática con muy pocas neuronas.

La pantalla de mi móvil desprende una luz y enseguida empieza a vibrar encima de la cama donde lo había dejado hace un par de minutos, me acerco rápidamente antes de que cuelgue la persona que esta llamándome. "NÚM.DESCONOCIDO" leo en la pantalla del móvil, lo vuelvo a bloquear y lo dejo donde estaba.

-¿No lo coges?-. Me pregunta April mientras se acerca para cotillear de quien ha sido la llamada. Niego con la cabeza. No me fío de los números desconocidos y mucho menos de los que llaman en la noche.

-Había quedado con Logan así que nos vemos allí, ¿vale?-. Obtengo como respuesta un leve 'si' desde el baño. Recojo todas las cosas y salgo con paso acelerado a la residencia de los chicos, se supone que había quedado con Logan a las nueve y de eso hace más de media hora, de modo que da igual si corro o ando de todas formas Logan me va a matar.

Todo esta oscuro debido a que estamos en esa época del año en la que anochece demasiado pronto y en la que hace un frío insoportable, sobretodo aquí, en Manhattan. Acelero el paso cada vez más, odio tener la sensación de que alguien te sigue y mucho más en este momento en el que estoy tan sola que puedo escuchar el ruido de mis pisadas y mi respiración -que cada vez va más rápido-. Escucho el crujido de las hojas al ser pisadas, eso me pone todavía más nerviosa ya que no estoy pisando ninguna hoja. Tengo mucho miedo, no soy de esas chicas que le sale un hombre de entre la oscuridad y se tiraría a por él a romperle algún diente y ser él quien salga huyendo, soy más de gritar ponerme a correr y caerme por pisar alguna rama que esta siempre en el lugar idóneo para sentirte la más torpe de este mundo.

Al fin consigo llegar al edificio sana y salva. Como era de esperar, toda la universidad esta aquí dentro para ver quienes representaran este año a la universidad en el equipo de Rugby. Se parece muchísimo a la anterior fiesta, mucho ruido y música a la vez, mucho alcohol y mucha zorra suelta.

-¿Y April?, debería estar aquí-. Me pregunta Alison de manera indiferente y con un tono elevado. Hago un intento por controlarme y hablarle educadamente demostrando que yo no me pongo a su bajo nivel.

-Tú deberías estar en un zoo con las demás zorras pero estas aquí-. Gruño. Y esto no es ponerme a su nivel esto es poner a cada uno en el sitio que se merece.

-Pues Ian ha preferido a una "zorra" antes que a ti-. Contesta mientras sonríe de esa forma que tanto detesto. No sé muy bien que ha querido decir con esa frase, de todas maneras ha echo que me ponga nerviosa y que cada cosa que diga la odie más.

Dos chicas, una ciudad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora