Después de haber dado como unas tres vueltas más caminando Vulpécula la dejo descansar y comer algo.
―Apúrate a comer, que no tenemos toda la vida― fue lo que dijo Vulpécula para después sentarse a comer con ella, el silencio reinaba, pero tampoco era incomodo, la primera en terminar sin duda fue Vulpécula, estaba más que claro que nadie le ganaría con esa manera tan salvaje de devorar la comida, Lucy aún le faltaba la mitad así que Vulpécula se recostó mientras ella terminaba.
― Cuando termines quiero que saques el libro― le ordenó mientras veía las nubes pasar.
― ¡Sí! ― contesto emocionada y se apresuraba a comer.
Cuando termino de comer rápidamente tomo el libro y se dirigió al centro de la arena mientras Vulpécula se incorporó y la siguió a paso veloz. Lucy puso el libro en el suelo y lo abrió justo a la mitad, donde un cegador destello apareció y de este salió un apuesto joven de estatura alta, contextura delgada pero definida con un esmoquin, piel blanca, ojos violetas y cabello azabache el cual se encontraba en constante movimiento.
― Hola Milo― saludo con entusiasmo Lucy al espíritu que salió del libro.
― Buenos días Lucy-sama― respondió el saludo colocando su mano derecha en su pecho y haciendo una pequeña reverencia― ¿En qué puedo ayudarla?
― Bueno, es para que me ayudes a entrenar― respondió mientras Vulpécula se acercaba a ellos.
― También estoy aquí para ayudar, así no tienes que preocuparte por que la carga sea muy dura para ti ― dijo dirigiéndose a Milo con la intención de molestar a Lucy.
― Te dije que aprendo rápido―reclamó la maga.
― Eso ya lo veremos― respondió Vulpécula sonriendo con malicia.
Ya era pasado el mediodía y Lucy aún seguía entrenando, lo primero que Milo le pidió a Lucy fue que invocara a alguno de sus espíritus sin llave, cuando invocó a Plue sin la llave estaba realmente asombrado, Vulpécula también, pero le preocupaba más la cantidad de magia que tenía que gastar para compensar el no usar la llave, realmente no era nada bueno ese desgaste descomunal de magia. Vulpécula de inmediato preguntó que había sido eso y le grito por no haberle dicho nada al respecto, Lucy le contó lo que había sucedido semanas atrás, la manera en que los invocaba sin la llave y lo que había pasado cuando salvó a Loke.
― ¿El Rey apareció solo por algo que dijiste? ― preguntó Vulpécula demasiado sorprendida.
― En realidad no estoy segura si fue solo por eso― respondió Lucy un poco insegura.
― Es lo único que se ajusta, pero aún sigue siendo muy extraño que alguien tan poderoso tomará las palabras de una maga novata tan enserio como para aclararle en persona que la ley no puede ser cambiada― razono Milo sin salir de su expectación― Y a pesar de haber dicho claramente eso, tomo en cuenta sus palabras y le hizo caso, eso es impresionante y a la vez realmente extraño y sospechoso.
― ¿Sospechoso? ―pregunto confundida la maga.
― Por supuesto, piénsalo, porque alguien con tanto poder como el soberano del Mundo Espiritual tomaría tan enserio las palabras de una mocosa sin experiencia, además el hecho de haber "admitido" que la regla estaba errónea y que haría una excepción contigo, es demasiado raro― contesto Vulpécula irritada.
― Tienes razón, la verdad nunca lo pensé, creí que el Rey simplemente era muy amable.
― Lo es, no hay duda de eso, pero en cuanto se refiere a reglas no creo que haya alguien más estricto que él― explicó Milo cruzándose de brazos.
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No Me Quedaré Atrás
FanfictionDespués de la pelea contra Tártaros Fairy Tail se disuelve, todos toman caminos separados, Natsu se va a entrenar dejandole una nota a Lucy de que volvería en un año. Ella se queda en Magnolia ayudando a reconstruir el pueblo , después de un mes dec...