Cap VII

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-Hola ¿Puedo ayudarte algo?-
Una encargada de la tienda de tez muy pálida parecida a la de Stuart, ojos grandes y claros, cabello largo castaño, y con una figura bien formada. Me quiso atender.

-M-me p-podrías mostrar ese vestido de ahí- tartamudee debido a que me sentía algo intimidada por el físico de aquella muchacha ¿y quien no?

-Claro- la chica se bajo el vestido y me lo dio enseguida -los vestidores están por allá-

-Gracias- le dije timidamente mientras me dirija al vestidor.

Cuando entre, enseguida me saque la blusa y el pantalón que traía y me puse el vestido y me mire al espejo cada parte de este.

-Señorita, necesita algo mas-
La chica que me había atendido, tocó la puerta del vestidor donde me encontraba

-No. Bueno si- abrí la puerta asomando solo la cabeza -p-podrías ayudarme en dándome tu opinión-

-Por supuesto- contesto con una sonrisa radiante.

Salí del vestidor tímidamente, no tenia a nadie mas que me digiera respecto a estas cosas, así que pensé que seria buena idea pedirle ayuda a alguien como ella que era linda y muy femenina.

-Se te ve esplendido- dijo ella muy segura, con una expresión de sinceridad absoluta de alguna forma sabia que podía confiar en ella.

-Gracias- le conteste feliz por el cumplido

..........

-¿Donde estará esa niña?- preguntaba a estos tontos que habían terminado de hacer sus cosas y nos habíamos encontrado en el lugar que habíamos dicho.

-Talvez ...se quedo platicando con alguien-  hablo 2-D

-¿Con quien? Ella no conoce a nadie- dije pero pensándolo bien y si el idiota de D tenia razón y si estaba platicando con alguien... o le estaban haciendo algo.

-Talvez solo se entretuvo viendo algo- hablo Russel sacándome de mis pensamientos.

-Bueno iré a buscarla, esperen aqui- me levante de aquella banca y me dispuse a dar vueltas por las tiendas, a ver si la encontraba o veía otra cosa que pudiera comprar, lo que sucediera primero. Mientras caminaba pude ver a una chica con cabello morado, que  me recordaba a Noodle... espera... esa era Noodle.
Ella se probaba ¿Un vestido? estaba enfrente de un espejo dando vueltas en si misma divisando los detalles de aquella prenda.

-Wow- sentí un rubor en mis mejillas.
Lleve una mano a mi cara tratando de tranquilizarme, respirando profundo. Decidí entrar sin que se diera cuenta, escondiéndome entre la ropa que había en esa tienda.
Se miraba muy bien con eso. Ella entro a un vestidor que estaba a su lado y la que parecía que la estaba atendiendo que debo admitir que si me la cogeria, tenia un cuerpo perfecto pero eso no eran el plan de ahorita , aquella chica se había ido a otro lado. Me acerque al vestidor y toque la puerta.

-Voy- dijo ella.
En un segundo ella abrió y le sonreí

-Hola, preciosa-

-Murdoc- grito con una cara sorprendida
Y después senti un fuerte golpe en la cara.

..........

No podía dejar de verme al espejo, me gustaba demasiado.

-Muchas gracias por ayudarme-

-No fue nada. Hay que ayudarnos entre nosotras- contesto la castaña - un momento, vuelo enseguida-

-Claro- le dije mientras entraba al vestidor
Ahora que lo pensaba bien , necesitaba que me ayudara con el cierre para poder quitarme el vestido.
En eso escuche que tocaban la puerta

-Voy- conteste pensando que era la encargada.
La abrí enseguida y me encontré con Murdoc con una sonrisa burlona.

-Murdoc- di un grito cerrando la puerta en su cara escuchando un quejido despues.
-Eso dolio- se quejo

-Lo siento Murdz- le dije a través de la puerta -¿Que estas haciendo aquí? -

-Bueno, te vi y pensé que necesitabas ayuda- dijo componiendose un poco.

-Claro que no- di una risa nerviosa- estoy bien-

-¿Porque no sales?-
Maldición, no quería salir así, pero necesitaba que alguien me ayudara a desabrochar el vestido.

-Podrías hablarle a la que atiende-

-¿Para que?- pregunto de modo de burla- a qui estoy yo ¿Que necesitas?-

-¿Esta todo bien? -
Se hoyo una voz femenina, estaba segura que era aquella chica.

-Todo esta bien preciosura- escuche a Murdoc decir - necesitamos un vestido mas corto ¿Porque no va a traerlo?

-No. Espera.- trate de gritar

-¿Que?-
Ella había escuchado algo, pero no lo suficiente.
En eso Murdoc había fingido una tos muy ruidosa para que no pudiera escucharme.

-Esta tos que no me deja. Bueno, aquí la estaremos esperando-
Después de que la chica se fuera, él volvió a tocar la puerta.

-Noodle ¿Porque no quieres salir? - dijo aun burlon

-Necesito ayuda con algo- le conteste ya rendida

-Yo te puedo ayudar- hablo un poco mas serio.

-Esque...-

-¿No quieres salir porque tienes puesto eso?-  me interrogo - déjame decirte que ya te vi y... te ves muy bien-
Mi corazón se acelero, mi cara se muy caliente, una sonrisa tonta estaba apareciendo en mis rostro, no sabia que responder.

-Noodle si no sales de ahí voy a...-
Abrí la puerta y deje verme

-Gracias- voltee a verlo a los ojos tímidamente.
Murdoc se quedo viendo sin decir nada, parecía ido.

-¿Esta todo bien?-

-Si, todo excelente- dijo saliendo de si trance -y ¿Cual era la ayuda que necesitabas?-

-Quiero cambiarme pero necesito que me ayuden con el cierre-

-Oh claro- me contesto tratando de que me diera vuelta

-Oye!- me exalte un poco

-¿Que?-exclamo confundido - vamos solo es tu espalda. No hare nada extraño eres...solo-
Trataba de terminar su frase pero por alguna razón no lo hizo

-Date vuelta, sabes que puedes confiar en mi-
Le hice caso y me gire, el puso una de sus manos en uno de mis hombros y con la otra empezó a bajar el cierre. Esa situación hacia que me pusiera de una forma muy extraña, mis manos temblaban, suspiraba pesado pero me gustaba de alguna forma.
Talvez era mi imaginación pero podía jurar que lo hacia muy despacio al bajarlo, podía sentir su mirada en todas partes.
Solo es mi espalda ¿Porque debería sentirme asi?

-Noodz- dijo serio

-¿Que sucede?-

-¿Que es esto que tienes aqui?-

Él paso uno de sus dedos por la extraña marca que había que había visto esta mañana.

-Creo que me golpee con algo y así me quedo- hable un poco mas despreocupada-Murdz-
El había puesto otro dedo para tratar de sobarme el supuesto "moretón" que tenia , se sentía lindo aquella caricia que me brindaba.

-Lo siento, creo que ....bueno- dijo el pelinegro - ten mas cuidado-
Me voltee, nos miramos a los ojos y me dedico una sonrisa.

-Deberías comprarlo, te queda muy bien ese color-

-¿Tu crees?-

-Claro, cámbiate y vamos a pagarlo- dijo mientras me revolvía el cabello y se iba para que pudiera cambiarme.
Después de pagar, fuimos para donde estaban 2-D y Russel y reclamarnos por tardar mucho, nos dirigimos a los estudios Kong a descansar.
Un rato después 2-D y yo jugábamos el nuevo juego que compramos, en eso se vimos a Murdoc levantarse y ponerse de nuevo su chaqueta.

-¿A donde vas Murdz?-

-Iré a un bar, tiene un buen rato que no voy- termino de ponerse su chaquete y tomo las llaves del auto.

siempre te cuidare Donde viven las historias. Descúbrelo ahora