Cap XI

581 45 30
                                    

La tarde paso rápido, pasamos un buen rato platicando con los invitados, y por su puesto hablamos con Damon y Jamie sobre el reciente álbum que pronto sacaríamos después de tanto tiempo y de estar haciendo casi nada, me alegra poder regresar.
Comimos mucho, hubo algo de música y algunas bebida que al parecer Murdoc ya se las había tomado casi todas. Para eso entonces ya no estábamos tan arreglados como cuando recibimos a todos, ya que no estábamos tan cómodos.
Faltaba poco para que fueran las doce y los invitados se iban a sus respectivos hogares a pasarlo con sus familias. También significaba que era tiempo de abrir los regalos o esperar hasta mañana, pero ninguno de los cuatro quería esperar tanto. Decidimos abrir primero los de Russel, los de 2-D, después los míos y al final los de Murdoc.

–Todos sus regalos me gustaron mucho– hablo el peli azul, abrazando sus obsequios – también me gusto el tuyo Murdoc– dijo no tan seguro, tomando una fotografía del azabache autografiada.

–Siéntete con suerte. Jamás conseguirás nada parecido a eso– hablo orgulloso de su regalo, tratando de no quedarse dormido debido al efecto del alcohol.

–Oye Murdoc ¿Dónde esta el regalo de Noodle? – Russel interrumpió –no me digas que no le compraste porque estabas enojado–

–¿Qué? No. Claro que no. Jamás haría tal cosa– se levanto y me tomo de la muñeca dirigiéndonos a la puerta –vamos tu regalo te espera. O al menos ¿Qué quieras que se lo de a alguien mas? –trataba de mantenerse de pie.

-No, claro que no– me deje llevar por el.

–Cierra los ojos primero–
Parecía mas ansioso que yo, todo para que viera lo que me iba a regalar. En cuanto salimos aparte de cerrar mis ojos el me los tapo con sus manos.

–Sigue caminando luv– me guiaba como podía , no esperaba mas que un…bueno con Murdoc no podías esperar algo en especifico, era difícil saber en lo que estaba pensando.

-Listo. Ábrelos.– quito sus manos e hice caso a lo que me había dicho.
Y lo que vi fue una inmensa isla flotante con un molino de viento.

–¿Es toda mía? – estaba en verdad emocionada.

–¿Quieres verla por arriba? – siguió caminado por un lado de la isla donde se encontraban una escaleras de cuerdas donde podíamos subir.

–¿Seguro que puedes subir en tu estado? –

–claro que si ¿No sabes con quien estas tratando? – se señalo egocéntricamente.
Subimos como pudimos. Obviamente dejaría que el subiera primero, no tenia la ropa exactamente adecuada para esto.

–Por arriba es mas linda– me acerque a él a darle un corto abrazo –gracias. No  esperaba esto –

–Bueno, cuando tienes a alguien como yo, solo puedes esperar lo mejor–rio por lo bajo.
Como era de noche se podía apreciar la enorme y hermosa luna, junto con las estrellas a su alrededor. No pude evitar emocionarme aun mas, quería correr alrededor del molino, pero solo me limite a dar brincos y al ver el césped tan suave con un perfecto clima, me acosté en el, extendiendo mis brazos y piernas   mientras Murdoc observaba con una sonrisa pequeña.

–Esto es genial– voltie a verle y le daba una señal para que se sentara conmigo.
El se acerco pero no a mi lado, si no tras de mi con las piernas abiertas rodeándome , haciendo que mi nuca quedara recargada en su pecho.
–Me alegra que te guste… porqué ya sabes, que haríamos con esto–
–claro– rei – es muy hermosa la isla-

–Si, claro– en cuanto termino de decir eso me rodeo con sus brazos haciendo que sintiera su calor tan embriagador.

Pasamos un buen rato platicando en esa posicion tan comoda, en algun momento me quedaria dormida.
No quería levantarme de mi lugar, jamás había estado tan cerca de él por tanto tiempo. Temblaba un poco, no sabia si era la emoción acumulada o era el frio.

–Noodle estas temblando, deberíamos irnos– hablo buscando mi mirada ya que en nuestra posición era difícil.

–No, todo esta bien–

–Bueno, tengas frio o no debemos irnos– se levanto de su lugar.

–Primero ¿puedo preguntarte algo? – me levante también enseguida

–ya lo hiciste– se burlo, provocando que también me riera de forma sarcástica –¿Qué pasa? –

–Es algo tonto pero, esta tarde me diste algo y solo queria saber ¿Por qué me besaste? –

–Noodz.  Podemos hablar de eso despues–

–Pobre niña ingenua, engañada por un viejo idiota– se había oído una voz gruesa y escalofriante.

Ambos miramos a todos lados sin encontrar a nadie de donde proviniera esa voz. Un escalofrió recorrió mi espalda junto con un inmenso miedo, haciendo que un sueño despertara en mi cabeza como si ya lo hubiera vivido antes.

–Que mierda– Murdoc volteaba a todas partes rápidamente.
Oímos una risa que provenía de lo mas alto de aquel molino de viento. Una figura negra, cono ojos rojos carmesí brillantes nos miraba a ambos. De repente soltó un polvo negro que no nos dejo verlo cuando apareció frente a nosotros.

–¿Boogieman? –hablo Murdoc colocandome tras él –¿Qué carajos haces aquí? –

–¿Sabes quien es? – hable temblorosa

–Parece que no nos hemos presentado pero si nos hemos visto– volteo a verme mas de cerca, extendiendo su mano, quitándola enseguida cuando Murdoc se volvió a poner frente a mi lentamente con una cara de furia.

–¿Por qué mierdas te apareces aquí? – grito el mayor, molesto.

–Solo quería pasar a ver a los humanos sufrir un poco, visitar gente quee no a pagado, personas que buscan una ayuda y al final ustedes, las dos almas que pronto serán mías–

–El plazo aun no se a… ¿Dos almas? –reacciono ante tal declaración–¿De que putas hablas? –

–oh ¿No sabias?... pero claro, no te diste cuenta–

La criatura desapareció frente a nuestros ojos para aparecer tras nuestro, provocándonos un susto.

–Esta niña inocente estuvo en el ritual, observando todo tras la puerta– hablaba mientras me tomaba de un brazo fuertemente.

–Suéltame– quite mi brazo con brusquedad, confundida.

–Ella no es parte del trato– tomo mi hombro –yo no puse a otra persona mas que a mi maldita alma–

–¿No recuerdas mis palabras de esa noche verdad? –

Murdoc quedo callado ante eso, recordando aquel dia.
Mientras tanto yo , no podía creer lo que estaba oyendo ¿Había vendido mi alma?¿Por eso mi piel estaba cambiando de color? Mis rodillas temblaban, no queria creer nada de lo que pasaba, solo sera una pesadilla mas , se que pronto despertare esto.

–Me estas jugando una puta trampa– grito el peli negro, desesperado.

–¿Tendré que repetirlo? “el presente en este ritual tendrá lo que quiere”, y ya sabes el resto–

–Yo no estuve en ningún lado– le grite -¿o si?-

–Noodle– hablo Murdoc serio –cuando eras niña, bueno no estoy seguro, después de hacer aquello, yo te vi tirada en el suelo, llorando y puede ser que hallas visto algo–

–Yo no recuerdo nada de eso–

–Vas a tener que anular esa mierda– el mayor se giro, para gritarle al ser.

–¿Y porque? Su alma es pura. Me conviene tener un alma así de deliciosa–

Sentí nauseas en ese instante.

–No se porque esta aquí contigo, un maldito bastardo infeliz que se coge a todo lo que se mueva–

–Si te atreves hacerle algo, te juro que iré hasta el fin del mundo y hare que te arrepientas –

-Estare esperando ansiosamente ese dia- se cubrio con aquella manta que tenia puesta, desapareciendo completamente.

No dijimos nada al respecto, solo nos quedamos viendo a ese punto donde se encontraba aquel ser demoniaco.  Murdoc acerco su mano tomando con su mullique, el mío, brindándome algo de seguridad que me necesitaba.














siempre te cuidare Donde viven las historias. Descúbrelo ahora