Más Que Un Amor De Verano || Joel Pimentel (TERMINADA)

Capítulo 9

Ya en el Aeropuerto, decidieron quien se sentaría al lado de quién. Los asientos eran de: 2 a la izquierda, 4 en el centro y 2 en la izquierda (no se si me explico).

Joel y Kendall se sentarían en la izquierda; Zabdiel, Chloe, Yoyo y Brooke en el centro; Zoey y Erick en la derecha; y Emma y Chris detrás de Joel y Kendall. Richard se había ido el día anterior, ya que tenía que solucionar unos problemas con la madre de su hija.

-Cuidado con las manos, Pimentel -dijo Emma- te estaré vigilando todo el vuelo-.

-Tranquila, Emma. No haré nada que Kendall no quiera -sonrió y la beso-.

-Emma, yo sé lo que puedo y no puedo hacer. No te preocupes, hermana -la abrazó-.

-No puedo creer como has madurado. Antes de conocer a Joel eras toda una inmadura -le siguió el abrazo y ambas rieron-.

-Aún soy algo infantil, pero se cuando tengo que comportarme como una chica madura- le dedicó una sonrisa a su hermana-.

-Bueno, siendo inmadura o no, yo te amaré aún así -dijo Joel con cara de chico locamente enamorado mientras abrazaba a su novia por la espalda-.

-Y sobreprotectora y todo, yo te amo a ti -dijo Chris acercándose a su novia, Emma para besarla. Si, así era, ya se habían hecho novios-.

Los pasajeros del vuelo 532 con destino a Los Ángeles, California, por favor abordar por la puerta número 12, gracias.

Al escuchar la señal, todos los chicos se dirigieron a la puerta 12 y entraron al avión.

Cuando ya estaban en el aire, Kendall y Joel se acomodaron para dormir abrazados. El vuelo era aproximadamente de unas 6 horas así que tendrían un poco de tiempo para dormir.

Pasadas 6 horas y media, el avión había aterrizado y la mayoría de los pasajeros ya habían bajado, excepto por el grupo de chicos y chicas, ya que Joel y Kendall aún dormían y se veían bastante tiernos como para despertarlos.

Yoyo había sacado su teléfono para sacarles unas fotos, y con el ruido del flash, Kendall despertó y se sintió nerviosa cuando vió a todos los chicos al rededor de ellos.

-Más vale que me mandes esa fotos, Cabrera -rieron-.

-Ya lo hago, tranquila- sonrió y se las mandó- bueno, ¿qué tal si despiertas a tu novio?

-Claro, aguarden -comenzó a darle pequeños besos por toda la mejilla para despertarlo, y cuando lo logró, él le robó un beso en los labios, a lo que ambos sonrieron-. Amor, tenemos que bajarnos.

-Okay, bebé -se colocaron de pie y sacaron sus bolsos de mano-.

-Por cierto, Yoyo nos sacó unas cuantas fotos mientras dormíamos abrazados -rieron y Kendall sacó su teléfono de su bolsillo para mostrarselas-.

Al revisarlas, la favorita de ambos fue una en la que Joel tenía un brazo al rededor del cuello de Kendall, mientras ella tenía su cabeza apoyada en el pecho de él y estaban tomados de la mano con los dedos entrelazados. Además, ambos tenían una pequeña, pero algo notoria sonrisa. Estaban demasiado enamorados, y cualquiera podía notarlo.

...

Joel había invitado a Kendall a que se quedara unos días en su departamento, ya que vivía solo y ella aceptó.

Cuando llegaron, dejaron sus cosas encima de una mesa para ordenarlas luego, y fueron a recostarse a la cama de Joel para descansar un rato, pero luego Kendall recordó lo que se habían dicho en sus vacaciones.

-Lo prometido es deuda, amor -se colocó encima de él mientras le daba besos apasionados en los labios-.

-¿Estás segura de que quieres hacerlo ahora? -Dijo él mirándola de manera pícara-.

-Muy segura. Joel te amo, y no quiero que mi primera vez sea con nadie más que tú -sonrió dulcemente-.

-Yo igual te amo. Y tampoco quiero mi primera vez con alguien aparte de ti. Esta es mi primera relación seria, y quiero hacerlo todo bien desde el principio -le dedicó una sonrisa y volvió a besarla-.

Ahora él estaba encima de ella, ambos solo en ropa interior. Entre beso y beso, los dos quedaron completamente desnudos. Joel no podía dejar de admirar lo hermosa que era su novia, pero ahora ya estaba listo para entrar, pero antes, se colocó el condón.

-¿Estás preparada? -La miró algo nervioso, pues no sabia bien como hacerlo-.

-Claro. No estés nervioso, se que lo harás bien -sonrió y lo besó- ahora solo hazlo, bebé-.

Él se adentro en la chica suavemente, cada vez aumentando más la intensidad. Ella pedía más y más hasta que ya casi ni podía hablar por lo agitada que estaba y ahora solamente gemia por el placer que su novio le provocaba.

Ambos sentían ese placer recorriendo su cuerpo, hasta que ya no podían aguantarlo más y lograron llegar al orgasmo.

Al terminar, Joel se recostó al lado de Kendall y la abrazó.

-Amor, ¿estás seguro de que era tu primera vez? Porque parecías un total profesional -rieron-.

-No me hagas sonrojarme -dijo bromeando- tú estuviste fantástica-.

-Espero que nunca nos separemos. Quiero sentir más de donde vino eso -bromeó y ambos rieron-.

Así estuvieron todo el día. Solo bromeando y pasándola bien, hasta que cayó la noche y los dos se quedaron dormidos.