Más Que Un Amor De Verano || Joel Pimentel (TERMINADA)

Capítulo 10

Al día siguiente Kendall despertó y no vió a Joel a su lado ni en alguna otra parte del departamento, así que decidió vestirse e ir a buscarlo al lobby.

Bajó por el ascensor y lo vió sentado solo, así que decidió ir junto a él, pero antes de que pudiera llegar, una chica se le adelantó y se sentó sobre Joel.

Kendall pensó "no de nuevo", pero quiso no pensar nada malo, así que se dijo así misma que tal vez era solo su prima o algo, ya que él tenía una familia bastante grande, pero esa pensamiento era erróneo, por que lo vió ahí besándose con la chica.

En ese momento fue cuando su corazón se rompió en mil pedazos. Todas esas promesas y los te amo no sirvieron de nada. Todo fue en vano.

Ella ya no quería seguir viendo la escena y solo corrió hacia la calle. No quería ver a Joel Pimentel nunca más.

Escuchó su voz corriendo detrás de ella, pero aunque una parte de ella quería detenerse a perdonarlo, otra parte solo quería alejarse de él.

Hundida en sus pensamientos mientras corría, cruzó la calle y no se dió cuenta de que un auto iba en dirección hacia ella, y cuando lo vió, ya era demasiado tarde.

Joel la vió, ahí tendida en el piso, casi sin vida, y lo único que hizo fue llamar al 911. No podía creer que eso había sido por su culpa.

Luego de unos 5 minutos, la ambulancia llegó y se la llevó, pero Joel no quería dejarla sola, así que fue con ella.

Al llegar al hospital, la pasaron de urgencias. Joel quería entrar, pero unas enfermeras lo contuvieron afuera. Él con toda su desesperación, no consiguió nada, hasta que llegó Yoandri, quién logró calmarlo.

Pasadas al rededor de unas 2 horas llegaron todos los amigos de los chicos a apoyar a Joel y ver como iba la situación de Kendall.

Nadie se atrevió a preguntarle como había ocurrido el accidente, y el tampoco tenía las fuerzas para decirles que todo había sido por su culpa y de nadie más.

...

Los chicos ya llevaban todo el día ahí y nadie les decía como estaba Kendall.

Eran al rededor de las 6:30 de la tarde y por fin salió una enfermera.

-¿Los parientes de Kendall Smith?- Emma y Joel se colocaron de pie rápidamente y se acercaron a ella- no les mentiré, la señorita Kendall está en riesgo vital debido al choque y no sabemos si se va a recuperar. Se está haciendo todo lo posible para que se mantenga estable, pero hasta ahora no está dando mucho resultado-.

Joel no tenía las fuerzas de decir nada, y solo lloraba en silencio, pero por su mirada, Emma notó que el quería verla.

-¿Podemos pasar a verla? -Preguntó Emma tratando de no romper en llanto-.

-Claro, pero solo ustedes, por ser sus parientes -les respondió la enfermera con amabilidad-.

Joel y Emma entraron casi corriendo a la habitación en donde se encontraba Kendall y al verla, quedaron completamente devastados.

Estaba conectada a miles de cables y con esa máquina que suena según los latidos de su corazón.

Joel se arrodilló al lado de Kendall, tomando su mano y hecho un mar de lágrimas.

-Kendall, de verdad lo lamento. Todo esto es culpa mía. Nada habría pasado si yo no fuera tan estúpido como para darme cuenta de lo mucho que vales para mi. Ya te hice daño una vez, pero esto de verdad que ya es demasiado. Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y ya no es necesario perderte para darme cuenta de que fui un completo idiota. Kendall, por favor, no me dejes- dijo Joel, quién ahora si ya estaba devastado y con los ojos hinchados y rojos de tanto llorar-.

La máquina que funciona según los latidos de Kendall ahora estaba haciendo un sonido continuo y la línea horizontal era recta, lo que solo podía significar una sola cosa.

Kendall estaba muerta.