Stephen Barker

Carta a los lectores

Desde bien pequeño he sido una especie de creador compulsivo. Con muñecos y piezas de juegos de construcción jugaba con mi hermana elaborando tramas y relaciones de contínuo. Pasando y salpicando por diferentes métodos de creatividad terminé en caer en la narrativa enfocada en novelas y pequeños relatos, obviamente ya en una mayor madurez.

En mi breve historial de lectura destaca el género de terror y supervivencia, inicialmente impulsado por la literatura Z, algo que actualmente ha quedado muy marcado en mi faceta de escritor. Como lector debo decir que soy más versátil en la actualidad. Por encima del 80% de mi obra literaria es de terror. Mi primera novela fue una mediocre creación de 25 capítulos basada en soldados que enfrentaban zombies en una trama al estilo de los Resident Evil. Desde entonces he escrito muchos relatos de temática paranormal diversa generalmente y primeros capítulos de novelas que por nuevas ideas las dejé en pleno proceso.

Stephen Barker, una de mis propuestas más recientes, nació ante el deseo de crear una novela capaz de presentar panoramas y situaciones muy distintas dentro de las posibilidades del género de terror. Romper las barreras lógicas y ofrecer una obra flexible sin formular un desmadre. Un thriller que evada la reiteración y que anime al lector a imaginar las posibilidades de la obra mientras sus ojos recorren párrafo a párrafo. La locura, los instintos, la lujuria, el trastorno y el pánico serán conceptos reincidentes en estas páginas, formando un brebaje que espero que resulte adictivo. La forma de lograrlo fue en base al concepto de multi-realidad que con facilidad comprenderán tras la lectura de los primeros capítulos.

Como aliciente, compartiré un guiño con ustedes. Molestarse a leer todo este texto debía tener recompensa, ¿no lo cree? Todos los personajes de la obra tienen nombres basados en escritores con algún invitado especial. Nuestro mismo protagonista basa su nombre en Stephen King y Clive Barker, una combinación que se me hace particular. Les animo a descubrir la procedencia del resto de nombres como juego extra a la lectura.

Señalar finalmente que el escrito está protegido en SafeCreative, página que me asegura los derechos de autor ante posibles robos de material. Simplemente amo la originalidad y por ello pido tanto a mí, como al resto de escritores, que se les tenga en consideración como creador de su propia obra. Desgraciadamente ya sufrí de robo de material en obras más antiguas y por ende me veo obligado a ser más estricto. Gracias por su entendimiento y respeto.

Con ansías, espero que disfruten de mi obra.