Castillo de sueños y banalidades

El extraño caso del Doctor Jekyll, Mr. Hyde y Lestat el vampiro

Hacía días que el parlamentario sir Danvers Carew había aparecido muerto. Todo indicaba que el autor había sido el misántropo Mr. Hyde. Así lo había apuntado un testigo. Aún así estaba dispuesto a tratar de esclarecer los hechos para tratar de alejar a esa abominación de mi buen amigo, el Doctor Jekyll.

El mayordomo me abrió la puerta de su casa y me dijo que el Doctor me esperaba en su laboratorio con otro caballero. No dudaba de que el otro sería Mr. Hyde. Mi sorpresa fue mayúscula. Al entrar un caballero atractivo me sonrió extrañamente. Henry Jekyll se acercó hasta mí y estrechando mi mano derecha con sus dos manos me dijo, señalando con la mirada a su otro invitado:

— Utterson, viejo amigo, permíteme que te presente al señor Lestat. Después de hablar con él estoy seguro de que comprenderás mejor los últimos sucesos.