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Maratón 3/10

Me arrepentí averla golpeado, llamaron a mi padre.

Y eso no era para nada bueno..

Se enojaría y yo no quería hacerlo enojar.

Veía las casas pasando mientras los segundos daban minutos y por desgracia, llegamos a casa.

- Entra a la casa, ahora entro.

Asentí nerviosamente y camine hacia la entrada.

Mire todo desordenado como era de esperarse y corrí hacia mi habitación.

- Abrí la puerta, micaela.

- No lo volveré a hacer, padre. Te lo juró.

Apreté la almohada mas a mi cuerpo, mientras sentía como mis ojos se empezaban a humedecer.

- ¡Que habrás la jodida puerta, micaela!

Dio fuertes golpes en ella y me sobresalte, rendida abrí la puerta esperando lo peor.

[...]

Mi padre, quien solía ser mi héroe me golpeo sin parar, y no quería que lo repitiera de nuevo.

Era domingo por la noche y aun tenia mi ojo enrojecido junto unos moretones en él cuello y uno en mi mejilla.

Todo cambio hace dos años, desde que mi madre muriera de cáncer, y mi padre se volviera alcohólico.

[...]

Lunes y me estoy alistando, maquillandome los moretones para cubrirlos, pero no hace efecto.

Resignada bajo lentamente las escaleras y me voy corriendo hacia clases.

Un cuerpo choco contra él mio.

Ramiro.

Me miro con él ceño fruncido y antes de que pudiera insultarme me fui corriendo, llorando.

¿Acaso también se burlara de mi al dejarme golpear?

"Hey Micaela"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora